↳ Greedy ┇ MinaYeon - G!P

45. message

(+) Las letras en cursiva son recuerdos y cursivas en negrita pensamientos.

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Desde pequeña aprendió que sus deseos eran órdenes que debían ser acatadas a la brevedad si no querían enfrentarse a sus arrebatos de ira; no estaba orgullosa del tipo de persona en la que se había convertido pero tampoco era algo que le molestara. Podía lidiar con ello.

Su verdadera preocupación era el no encontrar a alguien que estuviera a su nivel. Inteligente, apasionado, rico y atractivo, esas eran las cualidades para su futuro esposo, claramente basadas en las numerosas películas y series que había visto a lo largo de su vida, sin embargo, el mundo real solo le ofrecía relaciones fallidas que se convertían en una decepción. En casos como esos, no podía acudir a su padre y pedirle a la persona perfecta, no podía crear en un laboratorio al espécimen que llenara sus expectativas, no podía hacer nada más que esperar y eso le frustraba.

Entonces, su mejor oportunidad llegó dos años atrás cuando conoció a Myoui Akira, con una falsa sonrisa, muchos planes millonarios y, por supuesto, dos hijos solteros. Ser casada por conveniencia con alguno de los herederos Myoui no estaba en sus planes, no quería algo forzado, y personalmente, los hijos de los socios de su padre no le agradaban, llegaban a ser igual o más engreídos que ella. Claro que todos esos pensamientos se esfumaron cuando conoció a profundidad a la japonesa.

En la primera fotografía que le mostraron, Kai abrazaba a Mina por la espalda mientras sonreían hacia la cámara. EunHa la observó con detenimiento y ocultó su sorpresa al enterarse que estudiaban en la misma universidad. Podía estar equivocada, pero la descripción de Mina no encajaba en nada con otras chicas que conocía y provenían de familias poderosas, al parecer disfrutaba de tener un bajo perfil. Por supuesto, después de conocer el secreto que la japonesa guardaba bajo sus pantalones su interés se disparó todavía más.

Muchas veces creyó que estaba haciendo un bien social, un favor a la japonesa y a su familia por aceptarla, pero cuando menos se lo esperó, se encontró a si misma buscando a la chica entre todos los estudiantes en la cafetería, pasillos y salones, siendo atraída completamente por ese misterio, tranquilidad y seguridad que Mina desprendía. ¿Se había enamorado de alguien con quien no cruzaba palabra? Todavía se encontraba descubriéndolo y, después de vigilarla por varios días, pudo acercársele en una noche de fiesta universitaria.

Esa noche, la primera vez que compartía cama con Mina, se dedicó a observar la espalda descubierta de esta mientras dormía, contando sus lunares y reteniendo el impulso de acariciar esa suave piel. Ya que las últimas semanas la había observado de lejos, nunca había notado la profundidad e intensidad que Mina poseía en su mirar, había quedado atrapada en ella. Pero eso no era lo que le generaba verdadera curiosidad, se preguntaba por qué la japonesa lucía triste y solitaria, ¿el dinero que poseía no era suficiente? Mina podía tener lo que quisiera con tan solo pedirlo, ¿no le bastaba? ¿Qué le faltaba?

Quizá... lo único que necesitaba era alguien que pudiese entenderla, y no tardó en descubrir que la persona ideal para esa tarea era ella, o al menos eso creía. Pensó que, si iba a compartir su vida con alguien que su padre le impusiera, Mina no era una mala opción.

Su único error fue no esperar, estando desesperada por obtener la atención de la mayor solo logró que otras personas interfirieran.

Im Nayeon...

Esa entrometida chica que consideró su amiga la había traicionado. Así lo miraba EunHa. Esperaba que la extraña relación que mantenía Mina con Nayeon no superara la tolerancia mutua, sin embargo, todo parecía irse en picada cuando las miradas y comportamiento de esas dos cambiaron radicalmente.