42. ... us

3.3K 266 301
                                    


Mina chocó el puño con Jeongyeon cuando la bola de papel ingresó al cesto de basura, ambas celebraron por ese pequeño logro y estuvieron a punto de iniciar una innecesaria batalla por ver quién era capaz de anotar más veces, pero la puerta abriéndose detuvo cualquier intento de jugueteo. La japonesa se impulsó con sus pies y la silla giratoria le hizo dar cara a la persona que había ingresado.

— ¿Interrumpo? — Preguntó Nayeon tímidamente. La castaña negó e invitó a la mayor a pasar. — Momo quiere que bajes un segundo.

— ¿Ocurrió algo?

— Quiere que pruebes su estofado. — Tanto Mina como Jeongyeon hicieron una mueca de dolor. — Yah... no es tan malo.

— Creí que habíamos quedado en que Jihyo cocinaba. — Dijo la castaña suspirando y mirando con súplica a su mejor amiga.

— A mí no me mires. Tú eres su novia, ve y dile que está delicioso. — La japonesa se encogió de hombros estirando su brazo para tomar otro papel y hacer de este una pequeña esfera. — Apresúrate. — Dijo lanzándola y anotando nuevamente.

— ¿Por qué eres tan buena con eso? — Jeongyeon viró los ojos y salió de la habitación antes que Momo empezara a gritar desde la cocina.

Cuando las dos chicas se quedaron a solas se sonrieron torpemente, Nayeon se acercó a la menor y miró el desastre que había en el escritorio. — Creí que avanzaban con unos planos.

— Nos rendimos diez minutos después.

— ¿Qué hicieron encerradas estas dos horas? — Mina rascó su nuca.

— Jugar... — Confesó ganándose un leve golpe en el brazo. — Lo arreglaremos. — Dijo levantándose para estar a la altura de Nayeon, extendió su brazo y tomó un lápiz junto a un papel. — Solo debemos concentrarnos, estaba pensando hacer unas modificaciones en las medidas...— Mina se entretuvo escribiendo y borrando algunos números, pasando por desapercibida la tierna mirada que le dedicaba la mayor. —... podremos terminar cuando...

La menor se calló cuando la mano de Nayeon tomó su mentón para atraer su rostro y juntar sus labios.

Mina se tensó sin saber cómo corresponder al suave beso que recibía, sin embargo, cuando sintió los brazos de Nayeon enredarse alrededor de su cuello ella hizo lo mismo en la cintura ajena. Pensó que después de esa noche podría haber cierta incomodidad con la mayor, pero todas sus dudas se dispersaron al escucharla reír al momento de separarse.

Se quedaron mirando en silencio. — Creí que querrías hablarlo.

— No hay mucho qué hablar. — Se encogió de hombros.

— ¿Todavía estás segura de ir conmigo?

— Estaré segura ahora, mañana y todo el tiempo, Mina.

Esa respuesta fue suficiente para apresar a la mayor entre el escritorio y su cuerpo, sin temor a algún reclamo o rechazo la menor tomó el control del próximo beso, intentando transmitirle lo mucho que había necesitado de momentos como ese.

A pesar de no querer, ambas tuvieron que separarse cuando escucharon pasos cercanos a la habitación de Jeongyeon, y lo hicieron a tiempo ya que la castaña ingresó preocupada. — Ahm, ¿Nayeon? — Llamó entornando los ojos. — WooJin vino, te espera abajo.

La mayor infló su mejilla derecha en un tierno mohín y asintió. — Iré ahora.

Mina quiso seguir a Nayeon, pero fue detenida por su amiga. — Si quieres bajar, es mejor que te limpies eso...— Señaló sus labios. — Sí, sí, eso, te quedó algo de la boca de Nayeon ahí. — Dijo cruzándose de brazos, notando como las mejillas de la menor se coloreaban. — No puede ser, Myoui. ¿En serio?

↳ Greedy ┇ MinaYeon - G!PDonde viven las historias. Descúbrelo ahora