50. she knows

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(+) me gusta cuando comentan, háganlo, es agradable leerlos y me anima bastante.

•••

WooJin observaba con preocupación a cierta pelirroja sentada en una de las mesas más alejadas, colgó el trapo sobre su hombro izquierdo y se cruzó de brazos, dejando escapar un suspiro cansado. Él realmente deseaba tener la valentía para acercarse, sin embargo, no estaba preparado todavía para recibir otro rechazo por parte de ella. No había pasado por desapercibido ese rostro cansado y semblante pálido que acompañaba a la mayor cada vez que la veía en la cafetería o en los pasillos, sabiendo muy bien la razón; después de todo, él era parte de todo ese silencioso problema con Mina, solo había decidido mantenerse al margen, no se consideraba una pieza fundamental para encontrarla.

—Hey, chico, ¿qué tanto miras? —el hombre que actuaba como su jefe de le acercó con varias bandejas, alistando todo para la hora del almuerzo. WooJin negó y quiso regresar a su puesto cuanto antes. — La miras como si fuese una súper modelo, ¿problemas con tu novia? —volvió a preguntar tocando la fibra sensible del muchacho.

—Ya no es mi novia. — quiso cerrar el tema para seguir con su deber. —¿Qué? —cuestionó al ver a su jefe negar.

—¡Así no se consiguen a las chicas!

WooJin dejó escapar una risa. —¿Ah, no? ¿Entonces cómo?  —cuestionó solo para distraerse un momento con las tonterías que solía decir el hombre.

—¡Actuando! Sé un hombre y acércate, dile: "Te ofrezco un café, yo pago." Después, las cosas se darán solas.

—¿Me estás diciendo que con eso la tendré de nuevo conmigo y dejará de amar a otra persona? ¡¿Cómo no lo supe antes?! —preguntó sarcástico.

El mayor formó una mueca de dolor. —Amor no correspondido, eso es peor... —llevó una mano a su mentón y fingió pensar por varios segundos. —El café no es mala idea, ¡pero! Ya no irías directo a coquetear, empieza como su amigo.

—Créeme, ya pasé por eso. —dispuesto a finalizar todo tomó un par de bandejas para así tener una excusa e irse de ahí.

—Solo digo, que si en verdad la quieres de vuelta, debes empezar por algo.

El chico alzó su mirada hasta el hombre con más experiencia. —Lo tendré en cuenta, gracias señor Kim.

Nayeon suspiró al ver la foto de Mina, los últimos días los vídeos habían sido reemplazados por fotos mal tomadas desde ángulos que no le permitían tener detalles de las condiciones en las que la japonesa se encontraba. Al menos, por ese día, y examinando con gran detenimiento, no pudo reconocer ningún golpe nuevo, llegó a pensar que era alguna foto antigua tomada el primer día que Mina fue secuestrada. Estás bien, ¿verdad? Su mano, casi en automático, la llevó hasta su vientre para acariciarlo y así calmar su ansiedad. La única razón por la que intentaba ser más positiva era ese pequeño ser en formación, no deseaba transmitirle su tristeza,  no a su hijo.

Cuando se dio cuenta del tiempo que llevaba ahí notó que no había más limonada por tomar y emparedado por comer, su apetito no era grande y a veces deseaba pasarse las comidas pero no podía prohibir a su pequeño los alimentos, por lo que, haciendo un corto esfuerzo, comía todo lo que Jeongyeon le recomendaba después de una larga búsqueda en internet.

Al levantarse e intentar caminar un mareo la hizo retroceder, llevándose una mano a su cabeza mientras cerraba los ojos intentando recomponerse.

—Nayeon. —la voz de WooJin tras ella la hizo ver por sobre su hombro, el chico la sostenía de los antebrazos y la preocupación impregnada en su mirada posiblemente era igual a la de ella las últimas semanas. —¿Te encuentras bien?

↳ Greedy ┇ MinaYeon - G!PDonde viven las historias. Descúbrelo ahora