Monster -Mateo Palacios y Karen Watson (3ra temporada)- Fanfiction

-Capítulo 14-

Me desperté en el suelo, me había caído del colchón en la noche. Me levanté del suelo y me senté en la silla. Me dolía la espalda de las malas posiciones, me encogi de rodillas

Miré a Mateo que dormía plácidamente, se giró en la cama y empezó a palpear mi zona, pronto abrió los ojos como platos y se asustó al no verme. Eché una pequeña risa delatadora

Mateo: estás ahí... -Musito y se estiró en la cama- ¿qué hora es?

Karen: las doce... -Mateo bostezo-

Mateo: ven aquí... -Me agarró de la mano y me tumbó sobre él. Me dio pequeños besos en los labios, su simple y romántica manera de darme los buenos días y después me recoste sobre su pecho-

Karen: ¿a qué hora quedaste con nuestros padres?

Mateo: a las dos...

Karen: ¿no tendríamos que prepararlos ya?

Mateo: tienes razón...

Hicimos todo en un tiempo récord, justo cuando sono el timbre ya estaban perfectamente preparados

Karen: adiós amores... -Susurre dándole un beso a cada uno- por favor, que no se les olviden por ningún lado

Pedro: ¿quién te crees que somos? -Me riño mi suegro-padastro, lo mire divertida-

Mateo: papá, ¿te recuerdo que me olvidaste en el Carrefour cuando era solo uno niño?

Pedro: era joven, no fue queriendo. -Se rió- tranquilos, los cuidaremos

Ambos salieron por la puerta y Mateo y yo nos quedamos mirando cómo desaparecían con el coche. Cerramos la puerta y nos miramos

Mateo: son las tres, ¿quieres algo de comer? -Dijo yendo a la cocina-

Karen: vale...

Preparamos algo rápido y comimos en el sillón viendo la televisión, estaba segura de que los dos pensábamos lo mismo pero ninguno sabía como empezar, hacía tanto de la ultima vez

Karen: voy un momento a la habitación... -Dije sonriendo mientras me ponía de pie- ¿te vienes?

Mateo: ¿qué vamos a hacer? -Dijo devolviendo la sonrisa. Di un suave beso en sus labios-

Karen: aprovechar el tiempo que estemos solos...

-Narra Escritora-

Rosdeli y Pedro en el parqué se habían sentado en un banco, cada uno aguantaba a un niño y les ayudaban a caminar

Rosdeli: tan joven y ya soy abuela... -Dijo con una sonrisa irónica-

Pedro: muy joven no eres ya... -Rió el padre de Mateo por otra parte-

X: señora Watson, no esperaba verla por aquí -Susurró una voz a sus espaldas, era Julen-

Rosdeli: Julen, cariño, ¡cuánto tiempo hace que no te veo!

Julen: demasiado... -Sonrió él- ¿son los hijos de Karen?

Rosdeli: sí, ¿no los conoces?

Julen: por desgracia ya no entablo una amistad con su hija, es la primera vez que los veo. -Se acercó a ellos-

Rosdeli: él es David y él Matías... -Le indicó- ¿quieres cogerlo?

Julen: oh no, señora... Su hija podria enfadarse

Rosdeli: no seas bobo Julen, no se enfadaria por eso... -Le colocó a David entre sus brazos- ¿a que se parece muchísimo al padre?

Julen: al padre... -Susurró mirando los claros ojos color avellana de él- se me parece más a Karen. -Mintió-

Pedro: pues eres el primero que piensa eso... -Musito- ella ha empezado a dudar que sean sus hijos, ¡y eso que salieron de ella! -Julen río mientras mecia en sus brazos a David-

Julen: ¿dónde está Karen?

-Narra Karen-

Mateo y yo habíamos entrado a la habitación con un solo motivo. Me acerqué a él y mordi su labio inferior, él alargó el beso y me puso sobre la cama con él encima

Acarició con su mano todo mi cuerpo y arrebató mi pantalón corto, yo metí mis manos por su blusa, tocando sus abdominales hasta llegar a su pecho y quitar su blusa

De un seco movimiento quede encima de él y me quitó la blusa, le sonreí y empecé a besar su cuello, dejando pequeñas marquitas mientras él me apretaba el trasero. Volví a subir los labios a su boca y él subió sus manos a mi sujetador, quitándolo con un suave juego de manos. Los acarició suavemente, dejo un recorrido de besos por cada uno de ellos y volvió a tumbarme de bajo

Mateo: por fin... -Susurró desabrochando su pantalón- vuelves a ser mía

Le sonreí divertida

Su erección rozó mi intimidad y su mano bajo mi ropa interior, ayudé a terminar de quitarmela y la lanzó lejos. Hizo lo mismo con el suyo y miró profundamente a mis ojos, dio otro suave beso a mis labios y con suma fuerza me embistió haciendo que un gran gemido saliera de mi boca. Repitió la misma embestida varias veces y después dio más rápido

Clave mis uñas en su espalda, desde el omoplato hasta donde empezaba su trasero, lo cual aumento la fuerza. Me encantaba que se pusiera bruto. Mire a sus ojos, cuales me miraban con lujuria y decían mas que palabras. Querían que gritara. Y asi hice. Grite tanto como placer sentí. Hundio sus labios en mi cuello y succiono. Grite lo mas fuerte que pude sintiendo como se acababa en mi

Mateo: uff –susurro jadeante en mi pecho, ambas respiraciones eran agitadas. Mateo se tumbo a mi lado y me acerco a el, quedando abrazados- shh... -susurro sin haber yo dicho nada- escucha...

Karen: no escucho nada... -dije después de varios segundos-

Mateo: exacto... Nada. Nadie llora, nadie grita –sonrio y me dio un suave beso en la frente- necesitaba este dia contigo

-Narra Escritora-

Rosdeli: se ha quedado con Mateo, necesitaban pasar un dia a solas, sin interrupciones –dijo sonriente, no sabia que hablaba con un moustro-

Julen: ¿han salido?

Rosdeli: no, se han quedado en casa. Solo espero que no fabriquen otro nieto –volvio a reir-

Julen miro a David que se había quedado dormido sobre su pecho, le dio un beso en la frente y se lo entrego a Rosdeli

Julen: pues encantado de haber hablado con ustedes, espero volver a verlos...

Rosdeli: lo mismo digo Julen...

Julen se marcho a su coche, aguantando sus ganas de gritar. De pronto se le ocurrio una idea, sonrio para sus adentros y marcho a su casa

-Narra Karen-

Karen: Mateo... -le susurre acariciando sus abdominales con un dedo- si no hubiéramos tenido hijos, ¿crees que estaríamos juntos?

Hice la misma pregunte que Julen me había hecho y que yo sufria por querer saberlo. Mateo se quedo callado y paso su mano por mi cara

Mateo: mas alla de ser la madre de mis hijos, eres el amor de mi vida. Hubiéramos estado juntos aun asi –sonrei y me abrace mas fuerte a el-

Karen: y... ¿has vuelto a sentir la necesidad de acostarte con otras mujeres?

Mateo: ¿Quién te mete esas cosas en la cabeza? ¡por supuesto que no!, ¡antes de serte infiel, me mato a pajas en el baño!

Karen: solo preguntaba... -Mateo se quedo callado y acaricio mi pelo-

Mateo: ¿y tu?

Karen: no –susurre- solo tu...

El móvil empezó a sonar en la mesa, alargue para cogerlo y mire la llamada