Monster -Mateo Palacios y Karen Watson (3ra temporada)- Fanfiction

-Capítulo 68-

Me acosté en la cama mientras escuchaba una de esas baladas estúpidas sobre el perdón con mis auriculares. Quería lanzarme por la ventana y huir, aunque preferí afrontar que nos divorciaríamos. Un rato después Mateo tocó a la puerta de la habitación y no lo escuché, así que entró y me miró. Me quité un auricular y lo miré.

Mateo: ¿Puedo entrar?

Karen: Sí, por supuesto...-Dije volviendo a mirar al techo. Él buscaba la ropa en el armario mientras yo me mantuve seria- Siento mucho lo que ha dicho tu padre de ti, si no quieres ir no vayas.

Mateo: No lo sientas, tiene razón en decírmelo aunque eso ya no vaya a cambiar nada.

Karen: Ya... -Musité-

Mateo: Iré de todas formas, no hago mucho aquí solo... Karen: De acuerdo... -Se hizo otro desagradable silencio y se sentó en el otro lado de la cama-

Mateo: ¿Has hablado con Julen?

Karen: Sí...

Mateo: ¿Y? -Dijo evitando un enfado-

Karen: Se arrepiente de lo que hizo.

Mateo: arrepentirse es tardar en rectificar -Lo miré con mala cara, suprimí levantarme y meterle un puñetazo en la cara-

Karen: Da consejos cuando te los apliques... -Sujeté mi traje y fui al baño a cambiarme-

Me estuve cerca de una hora preparándome. Mi tristeza se había tornado a rencor en un minuto, ¿el por qué? No lo sé. Salí de allí con aquel vestido negro que me gustaba tanto y miré a Mateo quien estaba tumbado en la cama, le hice señales con la cabeza y marché al coche. Cinco minutos después apareció él...

Mateo: ¿Qué vamos a Hacer? -Dijo en susurro-

Karen: No sé, si quieres estar bailando con la gente puedes hacerlo, si por el contrario prefieres estar más tranquilo... No hay fiesta en la zona VIP.

Mateo: ¿Y tú?

Karen: Yo estaré en la zona VIP. Tengo una cuenta pendiente con una botella de tequila, tres limones y un bote de sal. -Mateo me miraba fijamente mientras conducía, estaba más nervioso que yo por estar allí-

Mateo: ¿Puedo ir contigo a la zona VIP?

Me encogí de hombros mientras aparcaba. Él notó que no me hacía mucha gracia pero aún así subió conmigo mientras aquel local se llenaba menos de lo normal. Era sábado, así que supuse que la mayoría estaría en resaca.

Nada más llegar me serví un chupito y otro para Mateo, yo me senté en un sillón blanco de tela suave mientras él se mantuvo de pie observando la zona

Mateo: Vaya...-Susurró.- Si no fuera por la música yo viviría aquí.

Karen: Y yo... –Susurré-

Mateo: ¿Se puede fumar aquí?

Karen: No se debería, pero no hay nadie -Dije sacando un cigarro de mi bolso. Él sacó otro de su bolsillo. Encendí el mío pero él se mantenía pensativo, no tenía fuego y dudaba si pedírmelo sería una buena opción- ¿Necesitas mechero? -Asintió. Yo me levanté y se lo encendí-

Mateo: Gracias...

Karen: De nada, hombre, para eso estamos las ex...- Dije sirviéndome otra copa y poniéndome sal en la mano-

Mateo: Legalmente aún estamos juntos...-Dijo sentándose enfrente de mí-

Karen: Ya, legalidad...-Dije dejando mis ojos en blanco- Dime, ¿Y aquella chica tan mona con la que viniste quién es?

Mateo: Era una tapadera, ya te lo dije...

Karen: Mateo, no me mientas...-Dije con una media sonrisa en la cara- Ya que no somos pareja, vamos a intentar tomar el papel de amigos. -Él alzó una ceja-

Mateo: Era sólo una tapadera, Karen Palacios

Karen: Watson.

Mateo: ¿Te avergüenzas de llevar mi apellido?

Karen: Bah, no. Me avergüenza no poder lucirlo. No me queda bien...-Dije irónica-

Mateo: Pues a mí me gusta cómo suena... Tiene ritmo.

Karen: ¿Ritmo? -Me reí- ¿Cómo en una canción?

Mateo: Sí, más o menos... -Sonrió tímido. Cambiamos de bebida y nos servimos vodka. Cada vez parecíamos más estúpidos-

Karen: Me gustaría ponerme más pecho... -Admití mientras hablábamos del dinero-

Mateo: ¿Más? Si estás bien así -Me encogí de hombros-

Karen: Me gustaría tener más.

Mateo: ¿Y si tienes otro hijo? No podrás darle el pecho.

Karen: Créeme, no están en mis ideales de vida tener más hijos -Me apoyé en el cristal que daba a la planta baja-

Mateo: ¿Por?

Karen: No quiero, eso es todo.

Mateo: ¿No querías buscar una niña?

Karen: Sí y también quería irme y no puedo -Dije dándome la vuelta, él miró hacia la gente- La pelirroja tetuda te mira mucho.

Mateo: No es mi tipo... ¿A cuál hombre te tirarías de los de ahí bajo? -Dijo señalando un montón de tipajos. Me quedé mirando durante un rato, niñatos-

Karen: A ninguno -Me reí- ¿Y tú a qué tía? -Se rió-

Mateo: ¿Ves a la rubia aquella de allí? La del traje lila...-Miré detenidamente-

Karen: Pero Mateo si... ¡Si podría ser tu madre! -El rompió en carcajada. Me había tomado el pelo- Estúpido... -Dije tapando mi sonrisa-

Mateo: ¡Pero si sólo es una broma! ¡No te enfades!

Karen: No me he enfadado...-Sonreí sin mirarlo- Pero sé que te tirarías a alguna de ahí.

Mateo: Pues no.

Karen: Mientes.