Contigo

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Algunas horas antes

Mihawk

Cuando Shanks y yo nos separamos un hilito de saliva cuanta entre nuestros labios. Lo miro a los ojos. Se ven más oscuros que de costumbre.

Si seguimos con esto... Vamos a hacernos daño. Soy consciente de ello. Y normalmente no soy el tipo de persona que se deja herir con dificultan. No obstante...

-Deberíamos parar - susurra Shanks pasándose la mano por el pelo intentando hacerlo para atrás.

- Pero hacemos cosas que no deberíamos todo el tiempo - Contesto. Shanks sonríe. De lado , los mechones escarlata vuelven a deslizarse hacia delante. Y entonces. Sin más le vuelvo a besar.

Antes sentía piedad por Shanks ya que le faltaba un brazo. Esa era mi escusa perfecta para dejarnos de ver como enemigos amistosos y ya sólo como amigos. Sin embargo no le tengo piedad, ya no, hace tiempo que no.

Puede que sea manco. Que le falte un brazo y que ya ni sea tan letal con la espada como antes. Pero sigue siendo un mafioso. Un asesino, sigue dando miedo, sigue siendo muy capaz con un solo brazo. En todo este tiempo no ha perdido su papel en la cima. En todo este tiempo se ha mantenido fuerte.

Y es bastante capaz de desnudarse con un solo brazo. Tanto como yo lo desnudo a èl con los dos.

Tiro de su pelo cuando mi abrigo cae al suelo junto con su blusa de botones.Esto es incómodo.bastante incodo. Shanks está sentado un escalón por encima de mi. Con las piernas abiertas para darme acceso a su cuerpo y yo estoy de rodillas entre ellas. Pero es lo que tenemos. Lo que siempre hemos tenido. Algo incómodo y poco práctico.

Su lengua lucha contra la mía. Ambos queremos llevar el control, y se de ante mano que ninguno de los dos va a ceder. No si podemos evitarlo.

- Si seguimos así acabaremos en empate, siempre acabamos en empate cuando empezamos a pelear -susurre a dos centímetros de mi boca después de separarse de mi.

Sonrió. De lado. Una de mis manos se desliza por su pierna y ir la cara interna de su muslo hasta llegar a su paquete. Shanks mueve la mano rápidamente, como so fuera parte de un reflejo para agarrar la mía con fuerza, deteniendola, pero no partandola, no se atreverá a apartarla, entre otras cosas porque no quiere hacerlo.

-Entonces... Terminaremos en empate - susurro. Mi voz suena mucho más ronca de lo que pretendía. Apretó un poco el agarre de mi mano. Sólo un poco para masajesrle esa zona. Shanks deja escapar una especie de gruñido y apreta aún más mi mano reuniendo el entrecejo.

Tal vez ahora si debería apiadarme. El tiene sólo una mano para jugar, pero yo juego con las dos.

Shanks cierra un momento los ojos, y por un momento pienso que está meditando algo. Es en el siguiente movimiento que realiza en el que se que efectivamente estaba meditando algo.

Antes de que me de tiempo a reaccionar o a esquivarlo se deja caer hacia delante arrollandome por completo. Caigo al suelo de espaldas.

SHAKS

No permito que se golpee en la cabeza. Antes de que se de colocó mi mano debajo. El golpe de la espalda no puedo evitarlo. Pero se que no le duele. Es demasiado fuerte como para que le duela caer de espaldas dos escalones.
Sus ojos dorados me miran. Sigue teniendo una expresión totalmente tranquila. No dice nada, sólo me observa. Retiro la mano de su nuca y me alejo un par de centímetros del.

Es la primera vez en años que me arrepiento de perder un brazo. No me arrepiento de salvar a Luffy. Eso nunca. Pero tal vez debería de haber permitido que Marco me pusiera la prótesis. Sólo para poder jugar igual que él. Apoyo mi mano en el suelo, sólo para asegurarme de que no caigo sobre él y vuelvo a inclinarme para besarlo. Mi pecho roza el suyo. Cuando vuelvo a mirarlo sigue con esa expresión tranquila.

Amor en La SombraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora