Dinamo y Shield [Parte 2]

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Al momento de darse la vuelta ninguno de los dos se dio cuenta de que una de las puertas del establo se había abierto por si sola apenas el Slime salió del lugar. Una criatura un tanto extraña empezó a trepar por una de las vigas del lugar, se trataba de un Huzhizhu. Un felino semi espectral, compuesto por energía pura y cristales, su cabeza parecía la de un tigre, con cuatro ojos, dos al frente y dos debajo de las orejas, ocho patas, dos al frente y dos detrás, y una cola del mismo largo de su cuerpo que al final, en la punta, parecía estar adornada de plumas. Rayas amarillas y negras cubrían su pelaje hecho de energía y cristales tan finos como el pelaje de un tigre común.

El animal de medio metro, usualmente muy calmado y obediente, vio su apetito abierto al ver a los dos Rekans. La dieta de los huzhizhu se compone principalmente de cristales, pero este individuo en especial prefería la energía. Su maestro, un Enano que daba clases en la academia sobre como investigar las profundidades de Tellurus, le premiaba con orbes de energía elficos cada vez que regresaban de una expedición subterránea. Esta gran montura, de la que se enorgullecía tanto el profesor, que a pesar de ser una de las criaturas más peligrosas del mundo subterráneo de forma inesperada, jamás había ocasionado un problema a su amo en ninguno de los lugares que visitaron, hasta este momento.

Los ojos azulados y naranjas del huzhizhu se encontraban enfocados en las dos bolas de energía levitando en medio de los pasillos de donde se encontraba descansando hasta que su amo la volviera para sacarla en una nueva aventura.

Apenas se fue el ser que había estado visitando esta zona de descanso durante estas últimas noches, decidió cazar. Abrió la puerta de su establo con una de las plumas de su cola, con su gran agilidad y fuertes garras trepo por una de las vigas del lugar sin alertar a sus presas ni a las demás criaturas del establo. Sus ojos que habían estado pegados a las dos bolas de energía desde el momento en que entraron se contrajeron. Y como el cazador que era se lanzó sobre la esfera con más energía.

―! Cuidado ¡― grito Shield golpeando el costado del huzhizhu.

Una de las garras del felino alcanzó a rosar a Dinamo, haciéndolo gritar de dolor. Ambos Rekans se alarmaron, Dinamo se enfureció y se dispuso a enfrentar al ordinario cazador que se atrevió a lastimarlo.

Shield, sin pensarlo dos veces se estrelló contra dinamo haciéndolo atravesar una de las ventanas del lugar que se encontraban cerradas durante estas horas. Los pedazos de madera salieron volando y la herida de Dinamo causo un corto circuito generando una pequeña explosión e iniciando una conflagración. El estruendo despertó a los demás animales que se encontraban durmiendo en sus respectivos establos. El fuego y el aura asesina del huzhizhu desestabilizaron a todos los herbívoros del lugar terminando con la tranquilidad de la noche.

―Sígueme― ordenó Shield

― ¿Qué? ¿No vamos a pelear?

Shield pensó rápido en como contestarle a su hermano para no causarle más problemas a Laxus, de enterarse los profesores de que el incendio era por culpa de ellos lo castigarían.

―Si llegan los profesores, nuestra investigación secreta será un fracaso.

Dinamo no muy convencido asintió y se dispuso a seguir a Shield. En ese momento el huzhizhu atravesó la pared y casi agarra a Shield. Los dos Rekans salieron a toda velocidad y el felino comenzó su cacería.

A los pocos minutos de persecución llegaron al coliseo y se adentraron por una de las apreturas de ventilación. La criatura que se los esperaba comer choco contra el edificio, pero se espabilo rápido y se dispuso a escalar el lugar.

―Ahora ya nadie nos va a ver. Ya podemos enseñarle a ese gatito quienes son los que mandan.

―Estate atento― le contesto Shield, mientras pasaban por uno de los oscuros pasillos.

Al llegar al centro las luces automáticas se encendieron.

―Nos tenemos que ir, las luces atraerán atención de los que estén investigando el incendio.

―Pero todavía no hemos acabado en el gato.

De improvisto el huzhizhu cayó del cielo agarrando a Shield, quien a diferencia de Dinamo no sufrió heridas por las garras del cazador.

― ¡Quita tus sucias garras de mi hermano!

Dinamo se dispuso a dispararle un rayo de energía con toda la potencia que pudo recaudar; sin embargo, el huzhizhu era prácticamente invulnerable a ataques de energía o cristal, sobretodo de ese nivel. Lo que nadie podría haber predicho es que de la herida de Dinamo salieron rayos de energía desviados.

El felino se dispuso a acabar con Shield de un bocado, una corriente eléctrica lo envigoró haciendo que sus pupilas se dilataran, pero cuando abrió su boca una de las enormes pantallas le cayó encima haciéndolo soltar a Shield.

Pufff!!

Una enorme nube de humo lo cubrió todo. Dinamo subconscientemente asumió que todo ese desastre se debió a su ataque, ignorando las pantallas y que las había tumbado un error suyo.

De entre los escombros salió Shield sin rasguño alguno, se encontraba entre asustado y molesto. Estuvo a punto de perder su vida, en el momento en el que el gato gigante abrió su boca una especie de agujero negro empezó a succionar su energía. La lluvia de insultos de Dinamo lo despertó de su estupor, se guio por la voz de su hermano para atravesar la nube de polvo.

―Salgamos de aquí.

La voz de Shield fue tan tajante que Dinamo quedo mudo y asintió al instante. Los dos Rekans abandonaron el coliseo y regresaron al cuarto haciendo como si nada hubiera pasado.

Sentado en un sillón, frente a la ventana por donde entraron los dos Rekans se encontraba Yaboth. Estaba cuidando a Laxus luego de que una Vhighoul se lo hubiera intentado comer, una gran sonrisa apareció en su rostro al ver a los dos Rekans entrar por la ventana, detrás de ellos se podían ver los establos en llamas y la nube de humo que salía del coliseo.

Memorias de TellurusDonde viven las historias. Descúbrelo ahora