342

582 88 26
                                    

Stephen vestía formal, con su portafolios bajo el brazo, unos apuntes en una mano y en la otra un vaso descartable de café ya acabado, caminaba hasta el cesto más cercano cuando Everett gritó

-¡Ey! ¡Strange!- le nombrado levantó la cabeza asustado. Ross corría desde la otra punta del campus saltando a algunos estudiantes sentado o acostados en el césped, comiendo, hablando, estudiando o durmiendo, a la vez que pedía disculpas por aquello. Al momento de cruzar la calle interna cometió el error de no ver y el autobús frenó con fuerzas tocando bocina por un largo rato ya no por precaución, sino por un odio vengativo por parte del conductor.
Ross se sobresaltó y sin dejar de correr le levantó el dedo del medio al vehículo que ya estaba yéndose. Stephen observaba todo anonadado.

-¡¿Qué demonios, Ross?!- gritó cuando lo tuvo al lado, respirando agitado por el ejercicio.

-Esperame que no estoy en forma- dijo entrecortado, inclinándose con las manos en las rodillas y tomando aire. El contrario se cruzó de brazos.

-¿Bien?- preguntó luego de esperar un rato.

-En las películas es… uff, más simple, corren y luego se besan y ninguno respira como asmático- rió divertido pero al contrario no le causo mucha gracia. Se rascó la nuca incómodo- fuí a buscarte a la residencia, dije el número que me mandaste, hable con tu compañero de cuarto y es una… persona especial.

-Fuma marihuana, nada muy grave, continúa- interrumpió el más alto y Ross obedeció.

-Me dijo que estabas en el campus y cuando vi este lugar… Dios… es muy grande, me desesperé, luego te vi y no quería perderte de vista y luego corrí y…

-Casi te chocan, Everett, mierda- por primera vez se notaba un poco de enfado en la voz de Stephen e instantáneamente el contrario puso cara de gatito herido, el estudiante de medicina sonrió vencido- te extrañe- le golpeó un hombro con suavidad.

-¡Yo igual!- gritó Ross y varías personas de su al rededor voltearon a verles.

-¡¿Por qué no viniste antes?!

-¡Estoy ocupado, lo siento!

Stephen lo observó severo y luego volvió a sonreír. Tomó la mano del contrario con ternura y comenzó a caminar.

-Ven, tenemos una cafetería increíble.

Everett se dejó llevar sonriente.

Avengers Academy Things IIDonde viven las historias. Descúbrelo ahora