Buenas noches todo el mundo, aquí les traigo su siguiente capítulo, espero les guste. Ah una cosa más, está narrado desde el punto de vista de Caín.
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Desde que salimos de ésa puerta sabía que algo estaba mal, lo sentia, su presencia, mi hermano estaba cerca, y eso solo significaba caos. Los demás estaban preparandose para atacar a unos militares, no quise hablar después de todo estaba muy concentrado por mi hermano.
Ellos empezaron una pequeña guerra, disparos y humo ocupaban todo el cuarto, y cuando quedaban pocos paso.
La pared exploto dejando salir de el agujero, humo color negro, y a su vez fuego y relámpagos también de ése color negro como la oscuridad misma.
Mi corazón casi se detuvo, lo vi, mi hermano Abel portaba esa diabólica sonrisa con dientes afilados y esos perturbadores ojos blancos sin pupilas.
-¡Hermanito!-, dijo Abel viendome con una expresión de puro cinismo, -Vamos a jugar-.
Tragué saliva, y respondi tan rápido como pude.
-¡Rosco,Mike y John, salgan de aquí!-, dije pero ellos me vieron confundidos.
-Oye Caín no te abandonaremos aquí con está cosa, te debo mi vida después de todo-, me dijo John soltando una ligera sonrisa.
Uno de los militares se levantó, y al ver a Abel, esté comenzó a gritar y a dispararle asustado.
Abel riendo camino lentamente hacía el militar, haciendo caso omiso de las balas que lo impactaban.
Al estar a centímetros del militar, Abel introdujo sus manos en el pecho del hombre haciendole dos grandes heridas, luego separó con fuerza su torso mutilando en dos el cuerpo del pobre militar.
John y los demás tenían el rostro en blanco.
-John, vayanse el me quiere a mi, lo mantendré a raya. Tienen que salir de aquí-, dije abriendo la puerta.
John solo movió la cabeza lentamente, señalando que si era su respuesta.
-Mucho cuidado Caín, te quiero volver a ver-, me dije Rosco mientras se iba, misteriosamente, Mike no me dijo nada, solo siguió derecho.
Cerré la puerta y me voltee a ver a Abel.
-Tanto maldito tiempo-, dijo y saco dos espadas color negro de un agujero negro debajo de su brazo. -Tanto maldito tiempo esperando para poder desgarrarte la piel y hacerme un trofeo con tu cabeza-.
-Vaya hermano, tu siempre tan elocuente, no me podrás hacer nada y lo sabes, tengo el "don" aún-. Dije mientras me quitaba el polvo de las manos.
-Quizás hermanito, pero te recuerdo que tu energía se va acabando, y yo puedo venir a matarte las veces que me de la maldita gana-.
-¿Sabes que? Quiero verte intentarlo-.
Y lo intento, Abel comenzó a correr hacía mi, una aura color negro parecida a una esfera que soltaba electricidad. Yo camine hacía el y comencé a rezar a lo bajo, dije antiguas oraciones en latin.
Un aura color azul que soltaba electricidad de la misma manera que Abel se puso a mi alrededor.
-¡Muere maldita escoria!- grito Abel.
Su aura choco con la mía, causando una explosión de gran potencia y radio.
Me lanzó para atrás pero pude mantenerme en pie. En cambió a el lo mando disparado contra la pared, pero se levantó y comenzó a lanzarme sus dagas de sombra, esquive las que pude pero una me dio en el brazo. Mi brazo se calento y me agaché para aliviar el dolor, pero me puse en guardia lo más rápido que pude.
-¡Muere de una maldita vez!-, me grito Abel corriendo hacía mi.
Abel me trato de golpear pero me moví rápido y le golpee el estómago con mis brazos metálicos, retrocedio un poco pero tomo compostura y me patéo en las costillas. Tuvimos un largo combate cuerpo a cuerpo hasta que el retrocedio.
-Estoy cansado de está miérda-, dijo enojado y comenzó a levitar. Unas alas de energía salieron de su espalda y dos gigantes espadas también de energía de sus manos. -Te matare, y luego haré lo mismo con tus estupidos amigos-.
-Jamás permitiria que hicieras eso, escoria-, le respondi y dije las últimas oraciones en latin que conocía.
Mis brazos comenzaron a erradiar energía color azul de una manera radical.
Voló hacía mi una velocidad endemoniada y yo corri hacía el.
Lo golpee en el pecho atravesandolo, pero el me corto ambos hombros. Una gran explosión ocurrió.
Me levante lentamente y vi con veía el agujero en su pecho.
-Y eso no es todo hermano-, dije y mi frente comenzó a brillar.
-¡No! ¡No!-, grito y una fuerte luz azul hizo que explotara en miles de pedazos.
Me tire al suelo, mis piernas y brazos estaban humeando, no podía moverme.
Mis brazos se desarmaron y perdíeron sus movilidad.
Cerré los ojos lentamente y espere lo mejor.
Se que no había muerto gracias a mi condición.
Pero lo único que me preocupara era que John y los demás estuvieran a salvo...
Amen.
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Bueno amigos aquí estuvo su capítulo, disculpen la tardanza pero tuve chicunguya o como se escriba y estuve bastante débil, falta poco amigos, poco para el final jejeje, hasta la próxima!.
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falla de contención
Horrorjohn trooper un personal clase -D trabajador de la fundación S.C.P. Se encuentra en el medio de una falla masiva de contención causando la libertad de varios seres y mounstruos que buscan causar caos podrá el escapar de la fundación? O se verá obli...