08: Bonnie

6.6K 380 27
                                    

-Me han dicho que no eras muy amiga de Samuel, ¿Se puede saber porqué?

-Simplemente nunca tratamos de congeniar, eramos de mundos diferentes y ni nos dirigíamos la palabra.

-Después de el asesinato de Marina, el colegio se vio obligado a colocar cámaras en todos lados, hasta en el salón de clases.

-Me pregunto si lo de Marina es una excusa, solo para mantenernos vigilados la mayoria de tiempo que pasamos aquí adentro.

-Señorita Aguilar, solo estoy haciendo mi trabajo, ¿Podría colaborar con la causa?

-Señora inspectora, nunca fui de esas chicas que son de colaborar, con su permiso.

-No he terminado, Señorita Aguilar.

-Conmigo si termino,esta gente guarda más secretos que billetes dentro de cajas fuertes, le recomiendo que no pierda ni un solo detalle, cualquiera de esos caras de "Ángel" que están ahí afuera puede ser culpable, tanto del asesinato de Marina, como de la desaparición de Samuel.

-¿Y como se que no eres tú quien hizo desaparecer?

-Eso usted ya lo sabe, usted ya me conoce señora, sabemos perfectamente quién es quién aquí. Yo solo quiero recuperar lo que me pertenece, así tenga que pasar por encima de quien sea para conseguirlo, incluso de ti, madre.

-¿Y que te impide lograrlo, Sara?

-¿Quién le dijo que no puedo lograrlo, Amanda?.

______________________________________

La fiesta de disfraces de Rebeka estaba por comenzar, me retoque el labial para luego mirarme al espejo y sonreír satisfecha, como siempre. Con Lucrecia habiamos arreglado cenar mañana por la noche, ya que hoy sería Halloween e iríamos a la fiesta.
Con Miguel habíamos elegido un clásico; siempre nos disfrazabamos juntos, era básicamente una tradición y este año no podía quedar atrás.
Bonnie y Clyde fue la de este año, la famosa pareja de enamorados, fugitivos, ladrones, criminales, los enemigos públicos de los estados unidos o como quieran llamarles.
Cuando me estoy acomodando el falda, Miguel entra a mi habitación apuntándome con un arma y con un habano en la boca, sin prender. Yo le hago lo mismo con la pequeña pistola de plástico y ambos nos miramos seriamente, a los dos segundos empezamos a reírnos, mirándonos mutuamente.

-Creo que es la única vez que te voy a ver vestido tan lindo, Migue.- Me acerque a el y lo abracé rápidamente, para después dejar un beso en su mejilla y tirar la pequeña pistola encima de la enorme cama de mi habitación.

-Y vos como siempre, tan amorosa y linda conmigo.- Yo simplemente le sonreí, achinando mis ojos y pasando mis manos por su cintura.

-El bullying nos une cada vez más, Nadin.- Ambos sonreímos, siempre que nos fusionamos no hay persona que nos pare, le deje un pequeño beso sobre la nariz y agarré mi cartera donde no llevaba más de cuatro cosas.

LOVERS | éliteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora