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┌───── •✧✧• ─────┐ NARRADOR: SARA MISMO DÍA └───── •✧✧• ─────┘
Después de que Valerio haga su entrada 'trinfal', dejando varias caras de sorpresa, otras de aburrimiento y demás, la clase siguió comúnmente, era raro estar acá sin Miguel, pasamos básicamente toda nuestra vida juntos. Cuando el receso llegó, me acerqué a Guzmán y salimos del salón en camino a la cafetería, moría por un café. Sonreí al ver como Lucrecia discutía con Valerio.
-Al parecer alguien ya se cansó de jugar a la mamá de Valerio.- los señalé con la cabeza y mire a Guz, quien miro unos segundos para después caminar hacia la cafetería conmigo.
-Que va, era hora, llevan así durante años.- suspiró y justo cuando estamos a un lado de ellos sigo algo en un susurro, Valerio hizo caso omiso, en cambio Lucrecia me miró con mala cara, ganándose una sonrisa de mi parte.
-¿Problemas en el paraíso, lindos?.- finalmente llegamos al lugar y me separo de Guz para acto seguido servirme un café, lo pago para después volver con mi amigo, que estaba bastante estresado. El día fue largo, no voy a mentir, pero una vez llegué a mi casa vi como un auto lujoso blanco se estacionaba justo detrás mío, quite mis gafas de sol y las puse sobre mi cabeza, mirando como el pelirrojo salía de su auto fumando un cigarro y con aires de bad boy. Me acerqué lentamente a él y agarré el cigarro de sus labios, dejándolo con una cara sorprendida, para después tirarlo al suelo y pisarlo con mi tacón. Me di media vuelta y sin decir una sola palabra me encaminé hacia la puerta principal, entrando por esta y dejándola abierta para que el mayor pase.
-Ale, ¡que placer tenerte por acá!.- escuche decir a mi padre, rodee los ojos y me dirigí hacia la cocina para agarrar una manzana, quite mis tacones mientras me encaminaba nuevamente al living, viendo como mi papá le daba la bienvenida.
-Llegué hoy por la mañana, y pensé en dar una vuelta.- Ale me miró a mi, yo solo me senté en el sofá y miré a mi padre mientras que el me miraba seriamente.
-Recien llego del colegio...- Ale iba a decir algo pero mi padre lo interrumpió.
-Sara anda a cambiarte, vas a salir con el.- me levanté del sofá nuevamente y agarré mis cosas para caminar hacia mi habitación, Ale no me caía mal, es más, es muy bueno conmigo, el problema es cuando está Gary, quien se empeña en realmente hacerme muy difícil la existencia. Me dirigí hacia mi armario y me puse algo básico, jeans mom junto a un top y unas zapatillas, junto a una campera ya que hacía bastante frío. Baje las escaleras con mis gafas puestas y mirando a mi celular, camine hacia afuera esperando a que el pelirrojo me siga, una vez en la entrada de la casa lo miré.
