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Hemos estado aquí un par de horas, Cora se durmió e intento hallar la manera de no despertarla.

Con cuidado la levanto como a un bebe, la cargo hasta la habitación y se me hace difícil no chocar su cabeza con alguna puerta o alguna pared.

La dejo lo más delicadamente que puedo en la cama, no estoy muy acostumbrado a tratar cuerpos con delicadeza ,  por lo general los arrojo en un contenedor de basura con gasolina y un poco de Acetatos de butilo, no se si sea legal pero es efectivo. No es que me agrade matar, en realidad lo detesto pero si me niego a las ordenes de mi padre… podría irme muy mal a mi y ahora de seguro a Cora.

Le quito los zapatos  y me deslizo delicadamente hasta su lado.

Su belleza no  es el tipo de belleza al que estaba acostumbrado, ya saben: delgadas, muchos atributos y cabello que parece recién salido de la peluquería.

Ella es diferente, en muchos sentidos, es lo contrario que yo pensaba para una novia… o esposa, imagine casarme con una modelo o algo así; infantil, ¿no creen?.

***

POV CORA

Despierto, no se muy bien donde estoy por un momento, luego, las imágenes de ayer pasan por mi cabeza, apenas esta amaneciendo, puedo notarlo debido a  la obscuridad que se desvanece lentamente.

Me levanto cuidadosamente de la cama y salgo de la habitación.

Me dirijo al balcón donde me espera un hermoso alba, observo el amanecer, por un momento el cielo se tiñó de un hermoso anaranjado y una tibia brisa llegó hasta mi cabello.

Tengo la sensación de ser observada, me volteo tranquila sabiendo quien es.

-buen día- digo mirando a Set quien esta algo somnoliento y al parecer cansado.

El solo asiente con su cabeza, se acerca a mi y me da un fuerte abrazo, gesto que no esperaba.

-¿y eso porque?- pregunto cuando se separa de mi, el solo encoje los hombros y se dirige al baño.

No hago preguntas y sigo mirando el cielo... No se que hacer, por un momento entro en estado de ansiedad interna, a mi cabeza vienen cosas terribles que prefiero no describir.

Sacudo mi cabeza, me estiró y me dirijo a la cocina, reviso el mini bar Y saco una bolsa de café… tengo un tiempo de no tomar café.

Abro la bolsa, un esplendido olor inunda la cocina el cual logra que mi estomago gruña… delicioso.

Voy por mi segunda taza de café cuando Set entra en la cocina, se ve húmedo, su cabello gotea y él solo lleva un pantalón de piyama puesto, algo que no le resulta del todo desagradable a mis ojos, él se acerca a mi y dice:

-¿no me preparaste uno?, eso es muy bajo- dice en un tono de burla… como un niño pequeño
-prepáralo tu, si es que sabes cocinar- digo en un tono sarcástico.

-al parecer hoy tendremos a una Cora ruda señoras y señores – dice a un publico imaginario con voz de presentador, para luego soltar una risita.

Se acerca a la bolsa de café y la huele, suelta un suspiro después de eso estoy apunto de tomar mi taza de café de el meson cuando siento la mano de Set en mi hombro, me volteo, me mira con una sonrisa maliciosa.

De repente baja el torso y antes de que pueda reaccionar estoy en el aire, Set me carga como si yo fuera un saco.

Suelto un grito por la sorpresa, ¡genial!, ahora, ¿Cómo me salgo de esta?.

-¡bájame ahora!-exijo, me comienza a doler el estomago por la posición en la que estoy, intento dar patadas a lo que él agarra mis piernas.

-no seas una gruñona, Cora- dice riéndose mientras me lleva al salón.

Casada con el asesino de mi madreDonde viven las historias. Descúbrelo ahora