Capítulo 9.

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Me desperté por los rayos del sol que atravesaban en el ventanal, miré el otro lado de la cama y no había nadie seguro de Ayden ya se había levantado.

Me levante y camine hasta al baño para darme una ducha, abrí la puerta y creo que hasta al baño es más grande que mi cuarto. Había dos duchas una bañera y una ducha normal eso era un sueño hecho realidad.

Tome una ducha caliente rápida, después camine hacia el armario y decidí usar una de las cosas que habían comprado, todo era muy elegante, tome lo más sencillo, un vestido blanco de encaje es muy bonito con tacones del mismo color, luego de eso decidir llevar el cabello lacio hoy así que tome el secador y empecé hacer el trabajo.

Ya estando lista, baje a ver si Ayden estaba por algún lado de la casa, no podía haberse ido sin mí al trabajo soy su secretaria, soy vital para el o eso creo.

La casa era muy grande así que decidí buscarlo por el comedor debe de estar desayunando. Fui hasta allí y justamente estaba, se encontraba leyendo el ¿Periodito? ¿Todavía existen?

—Buenos días—Salude el alzo la mirada y me escaneo.

—¿Qué haces vestida así?—Pregunto y yo lo mire confundida.

—Al trabajo, ¿Se te olvido que soy tu secretaria?—Dije incrédula.

—No es necesario que trabajes—Dijo—Yo prometí pagar todos tus gastos—Termino de decir.

—Oh no eso sí que no, no pienso ser una mantenida y tampoco voy a depender de ti por un año—Dije molesta el me miro por unos minutos.

—Madeline ahora eres mi esposa, no puedes ser también mi secretaria—Dijo y volvió a ver su periódico, yo le quite el periódico de sus manos  y el me miro confundido.

—A ver Ayden soy tu esposa pero yo quiero trabajar no quiero estar metida en esta casa todo el día sola esperando a que tu llegues, me gusta ser independiente lo he sido todo mi vida—El enarco una ceja por lo último que dije, eso se refiere a mi pasado—Solo déjame trabajar hasta que habrá la bu-tic. Por favor—Dije el respiro profundo.

—Está bien, me devuelves mi periódico, ha y por cierto aquí están los anillos uno es de compromiso y el otro de la boda—Dijo y saco de su bolsillo una caja azul pequeña me la extendió, la tome y la abrí, estaba encantada eran preciosos, el de compromiso era con un aro de oro con un diamante pequeño, y el otro era de matrimonio era un aro con un diamante más grande y su al redor habían pequeños diamantes.

—Esto es mucho Ayden, no pudiste comprar algo más sencillo—Dije, en verdad esto era demasiado, eran diamantes es muy exagerado.

—No—Dijo y volvió a su periódico.

Desayunamos y nos fuimos a la empresa, pase mi temiendo algunos informes, me levante para ir a entregárselos a Ayden que necesitábamos en una reunión entro de una hora.

Toque la puerta de su oficina y entre no sin antes escuchar un “pase”

—Aquí están los informes que me pediste—Dije y se los coloque en el escritorio.

—Gracias, Madeline mi madre nos ha invitado a una cena esta noche   allí voy a presentarte como mi esposa—Dijo, no pensé que fuera tan pronto, bueno pero estoy un poco tranquila al parecer tengo un don de caerle bien a los padres de mis amigos así que creo poderle caer bien a mis suegros.

—Voy a conocer a tus padres—Afirme—¿No crees que es muy pronto? ¿Cómo le vamos  a explicar lo del matrimonio?—No, no creerían casarnos tan pronto.

—Ya hable con mi madre, le diremos que lo mantuvimos en secreto para que no hubieran escándalos y eso—Dijo.

—Pero son tu familia, no crees que es raro que no se los hayas dicho—Dije me miro por unos segundos pensando.

I Love MadelineDonde viven las historias. Descúbrelo ahora