JINMIN||The baby and WHY?

[03]

Jimin soltó un enorme bostezo, ingresó a su clases y se estiró mientras dejaba su cuaderno sobre su escritorio. Se acostó cerrando sus ojos, queriendo tomar un poco de descanso en los minutos que el licenciado Kim SeokJin llegara.

—¿Hiciste la tarea? ¡Me costó mucho investigar sobre la filosofía de Durán respecto a la calidad!—comentó su amiga que se sentó con una cara de mal humor—¿me escuchaste?—preguntó al ver al rubio muy dormido.

Kim Seokjin ingresó y varios de los alumnos tragaron duro, contemplando al hombre de cabellera negra dejar su maletín sobre su escritorio.

—Buenos días ¡Y no es mejor día, que un examen sorpresa!—sonrió divertido, notando como los presentes le miraban de un golpe con gran cara de asustados—. Sobre todo ese chico que está durmiendo sobre el escritorio ¡Park Jimin!—alzó la voz un poco.

Jimin había caído en un profundo sueño, su amiga lo sacudió un poco; pero ni aún asi, el chico no pareció responder.

—Está muy cansado... —dijo ella preocupada.

—Aplaudan conmigo —pidió el alfa y empezó aplaudir con fuerza. Todos los del grado se le unieron con extrañeza.

Jimin se levantó sin comprender, empezando aplaudir también y miró a sus lados con cara de sueño, hasta que sus ojos se enfocaron en el frente. Notando a Kim seokjin se brazos cruzados, mirándole en un profundo silencio.

—¿Por qué aplaudimos? —preguntó Jimin.

—Gracias a usted, joven Park. Le pediré que se quede después de la clase, necesito hablar con usted —pidió con una sarcástica sonrisa.

—No puedo—chilló este—tengo un hermanito que cuidar—el omega expandió sus pupilas y se hizo un ovillo en el pupitre.

Muchos alfas al ver aquella reacción, contemplaron muy molestos al licenciado. Los gruñidos de sus estudiantes se fueron alzando, hasta que el pelinegro, fue quien soltó un gran gruñido que hizo temblar a todos mientras sus ojos se volvían de color lila. Las orejas de Jimin se pararon de un solo, a tal punto de hacerse atrás en forma de susto y frunció el ceño ante aquella dominancia.

Los alfas que habían retado a Jin, soltaron chillidos y desviaron rápido la mirada del tipo, con el deseo de arrinconarse en la esquina de aquellas paredes,en el fondo.

Su...su gruñido es demasiado fuerte...ay mami, me quiero ir.

Toda la clase fue absoluto silencio, con cabezas bajas escribiendo al son de lo que dictaba aquel hombre mientras un pequeño rubio estaba con la mente en blanco, preguntándose que sería de él a finales de la clase.

Pasadas las horas de clase. Park Jimin estaba listo para escapar de Kim SeokJin, colándose entre los alfas altos, pensando que de esa forma iba cubrirse de la mirada de su maestro, sin embargo,Jin sabía que el chico se le iba querer escapar, por lo que salió en la entrada principal y se fue a la puerta traser, donde llegaban los tarditas y donde escapaban algunos de la clase.

Jimin sonrió feliz al ver que su plan iba funcionando hasta que una mano lo tomó del cuello del suéter celeste que llevaba y lo arrastró un poco fuera del tumulto de los alfas. El omega se giró con una gran cara de incógnita y se giró a ver quien era el causante de su impedimento para huir.

—Muy buen plan, si no fuera porque su pelo rubio resalta entre todos esas personas y su aroma—comentó Jin, quien frunció el ceño, se acercó un poco al cabello del chico, notando unas raíces un poco grises, casi llegando a lo blanco—¿Hmm? ¿Se pinta el pelo, joven Park?

Jimin quitó la mano del alfa sobre él y se tocó los cabellos un poco avergonzado, agachando su mirada y viendo a los lados un poco tímido.

—N-no.