JINMIN||The baby and WHY?

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Jimin frunció el ceño, viendo el pequeño hotel de enfrente, se giró a ver al alfa con rostro de extrañeza y bastante preocupado de que se hayan perdido de lugar; pero la segunda opción no parecía viable debido a que Jin mantenía un rostro muy alegre.

—Dime...¿Dónde estamos?

—En el hotel de playa donde pasaremos la segunda mitad de nuestra luna de miel—comentó con tranquilidad aquel alfa.

—¿No es muy tenebroso este lugar?—preguntó viendo las hiedras en las paredes para luego enfocar su mirada en las ventanas, notando alguna que otra medio vidrio rajado—es viejo...

—¿Qué? ¡Claro que no, es rústico!—dijo señalando aquella casa grande—En la verdad, íbamos a irnos a un hotel super bonito; pero llegó un idiota millonario y pagó más por el cuarto...—el alfa hizo una mueca al recordar como su secretario le dijo que alguien había comprado el último piso de aquel hotel—¿Puedes creerlo? compró la maldita penthouse, malditos millonarios, choi algo era su apellido, que mas dá, el rico humillando al pobre.

—¿No es tu familia, millonaria?

—Bueno...tenemos dinero; pero no tanto—dijo quejoso—Además, los millonarios son mis padres, no yo—dijo cohibiendo sus hombros.

—Pero tú heredarás su riquezas.

—Si; pero no ahorita hasta que mueran, así que en palabras resumidas, soy un tipo normal como tú—sonrió espléndido.

¿¡Normal?! ¡Normal las ganas de darte un jalón de orejas, semejante animal! ¡No te enojes, eres perfecto, no te enojes!~

Jimin contempló al alfa de un solo al escuchar semejante cosa ¿No tanto? ¡Sus padres tenían una mansión! y no se dijera de ese anillo de compromiso que cargaba que costó más de cincuenta mil dólares o su traje y la fiesta, y-....podía incluso hacer una gran lista.

¡Ni tanto sus huevos!

—¿Puedes bajarle un poco a tu humildad? me da dolor de cabeza—comentó Jimin haciendo un siseo para luego contemplar al frente—entremos.

Jin sonrió tomando las maletas del omega y las suyas, arrastrando con todas las emociones del mundo, tarareando una canción, ingresaron, dirigiéndose de un solo a recepción donde un joven muy hermoso se encontraba atendiendo. Jin se quedó en profundo silencio viendo a su alrededor, mientras Jimin notó como aquel trabajador parecía embobado visualizando el físico del alfa.

—Si, tenemos una reservación, mi esposo y yo—recalcó lo último subiendo el tono.

—¿Su nombres, por favor?

—Kim Seokjin y KIM Jimin—volvió a resaltar su nuevo apellido al chico que ni siquiera estaba viendo a Jimin, aún enfocando su mirada en Jin mientras movía sus dedos en la computadora.

—Si, tienen una reservación de tres días—comentó el chico—señor Kim SeokJin.

—Y Kim Jimin—recalcó el rubio de nuevo.

Jin contempló al chico, ofreciendo solo una media sonrisa. Cuando iba acercarse a tomar las llaves, notó que Jimin lo hizo primero, girándose sobre sus talones, soltando suaves gruñidos en el proceso, para dirigirse a su numero de cuarto. Jin hizo un puchero sin comprender porque el menor andaba con ese humor ¿No le había gustado el lugar? incluso eligió un cuarto con jacuzzi, que le costó más caro solo para que el omega se relajara.

—¿No te gusta?

—¡Oh sí, me encanta!—dijo sarcástico para girarse, notando al recepcionista viendo de pie a cabeza al alfa—¿Por qué demonios no naciste con una cara fea?—susurró en bajo.