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Jimin afiló su mirada viendo al frente, Min Yoongi también lo hizo. El mayor levantó su pie y agarró con su mano la chancleta, Min Yoongi miró a los lados y encontró una cacerola, así que la agarró con rapidez, dando giros en el proceso.

—¡Min Yoongi, te dije que no tocaras mi pavo!—gritó el mayor que tiró la chancleta.


Para el albino, cuando aquel objeto iba en dirección suya, lo vio todo en cámara lenta, levantando la cacerola para defenderse, la subió y cerró los ojos de un solo. Aquella chancleta cayó en la cacerola. El albino la bajó y rió divertido que no le habían pegado; pero no le quedó tiempo de reaccionar cuando una segunda fue directo a su rostro, haciéndolo caer de espaldas por la sorpresa.

Jin y Namjoon se encontraban sentados en la sala, el alfa comiendo un pan de mermelada de fresa mientras el más pequeño, se metía a la boca un juguete, tratando de succionar.

—Si tu esposo está haciendo una comida...—comentó Jin acercándose al oído de su cachorro—¡Jamás toque sus cocina, sobre todo si es el que la prepara...si lo haces!—el alfa hizo un gesto de ahorcado y sacó la lengua.

El pequeño Namjoon abrió los ojos del susto y negó rápido, tirando el juguete al suelo. Jimin se giró y le sonrió a su bebé.

—No te preocupes amorcito, pronto saldrá tu comidita ¿Si?—contempló a Jin y se puso serio—¡Y tu, semejante que tienes los huevos grandes! Deberías ayudarme en la casa ¡Siempre hago todo yo!—dijo quejoso—¡No más vea que me vaya de esta casa y haber si aprendes a vivir solo!

—¡Pues lo hice y con todo bebé!—dijo sacando la lengua al menor.

—¿¡Cómo?!—gritó más encolerizado el omega

—Ayer me dijiste que tu me querías; pero todo fue mentira~—empezó a cantar el alfa que se levantó de un solo y corrió directo a su oficina a encerrarse.

Jimin suspiró, poniendo los ojos en blanco. Contempló cómo su hermano menor se levantaba y se alejó sobando su mejilla entre quejidos ¿Pero qué demonios pasaba con su hermano? ¡Solo quería probar un poco de pavo y su estómago ya rugía!



El timbre fue tocado, el omega suspiró, se dirigió a la puerta, al abrirla, un hombre contempló en cámara lenta y en cómo salía brillos alrededor de ese chico hermoso, Jimin sonrió con dulzura y aquel tipo sintió que iba fallecer allí.

—¿Se le ofrece...algo?—preguntó Jimin.

—Soy...

El alfa sonrió escuchando un coro de ángeles tras suyo y su mundo brillando.

—¿Disculpe, señor?

—Estamos haciendo un concurso en la colonia, para elegir al rey-reina de la colonia—habló el hombre sin dejar de sonreír de forma tonta. Extendió la mano mostrando un pequeño flyer, el concurso es para mañana, no sé si le gustaría participar.

—¿En serio?—dijo sorprendido tomando aquella información—¿Cúal va ser el premio?–preguntó extrañado—no creo que tenga tiempo, debo cuidar de mi bebé-...

—Habrá 50% de rebaja para el supermercado.

Jimin al escuchar aquello, alzó de un golpe la mirada. Pensando en la comida que podía comprar y también en el ahorro que tendrían para los pañales de su hijo. Incluso pareció olvidar que su esposo era millonario.

—Por supuesto, participaré ¿Dónde será?

—En el parque de la segunda cuadra.

—Gracias.

JINMIN||The baby and WHY?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora