JINMIN||The baby and WHY?

[26]

Los señores Kim se encontraban tomando su té de la tarde, hasta que escucharon el timbre de la casa, la señora Kim sonrió con mucha tranquilidad, hasta que el sonido del timbre se empezó a intensificar y puso los ojos en blancos—¡Alguien vaya abrir la maldita puerta!—dijo exaltada, notando a una de las ayudantes de casa, correr en dirección de la puerta, al abrirse, apareció un espléndido Jin con un bebé en manos y su esposo detrás de él, aferrándose y escondiéndose de su suegra.

—¡Hijo, precioso be-...—la señora Kim no terminó de hablar cuando un rostro se asomó detrás de su hijo—y ...extra.

—¡Hola Mamá, mira lo que te traje y no es que vaya a usar a mi hijo como soborno para que nos dejes estar en tu casa unos días mientras encontramos una casa más; pero es justo lo que estoy haciendo—dijo levantando a su hijo tipo simba.

Namjoon miró a su papá por breves segundos y cuando vio a su abuela, hizo ojos de cachorro triste, expandiendo sus pupilas.

La señora Kim vio al esposo de su hijo, para luego enfocar la mirada en su nieta y tomó rápido a su nieto con una gran sonrisa y chillidos de emoción, besuqueando las regordetas mejillas del cachorro, para alejarse casi saltarina como si le habían entregado un peluche del cual jugar.

—Bien, pero mi nieto estará más tiempo conmigo ¿Entendido?—agregó de último , se dirigió con pasos tranquilos al cuarto que habían hecho para su nieto, para juegos y otras cosas.

—¡Si!—dijo Jin sonriendo e ingresando a la casa, Jimin seguía aferrado a su camisa y con la mirada desviada tratando de no cruzar miradas con una molesta señor Kim que soltó un leve gruñido.

El señor Kim solo hizo un gesto de saludo y respeto al omega de su hijo.

—Joven Jimin. Ha pasado mucho tiempo.

—¡Como un año...por allí!—exclamó Jin con tranquilidad—¿Sabes qué lo encontré en un lugar donde dan leche materna?

—¿Ah, sí?—dijo sorprendido el señor Kim y luego contempló su rostro en dirección del omega. Sonriendo con amabilidad al de cabellos grises, que no pudo evitar sonrojarse. Ahora viendo bien al padre de Jin, ya sabia de donde su pareja sacó tal atractivo.

Jimin chilló de la vergüenza, pellizcando la espalda de su pareja, molesto por esa información que estaba dada de más.

—¡Auch Jimin! ¿¡Por qué me pellizcas?!

—¡No lo hice!—negó rápido fingiendo inocencia.

—Pueden quedarse en la tercera recámara de la casa, está en el segundo piso—comentó el señor Kim.

Ambos sonrieron y se dirigieron al lugar en silencio. Después de varios minutos, la puerta principal se abrió, apareciendo un Yoongi entre gruñidos, que tomó aire para luego gritar—¡Kim Jimin!

Jimin estaba dándose besos con Jin en la cama cuando un grito invadió sus oídos y se sentó de un golpe—Min...Yoongi—dijo entrecerrando los ojos, se bajó de un solo y tomó una escoba que estaba por la puerta de aquel cuarto que de seguro una ayudante de casa había dejado allí. La partió a la mitad y contempló por el pasillo abierto, viendo abajo a su hermano.

—¡Tú, te osas a venir aquí después de quemar la casa! ¿¡No tienes Vergüenza alguna?!

—¡Ya te dije que no fue mi culpa!—gritó el otro señalando al mayor.

El señor Kim se sentó y metió un cubo de azúcar al té, dando un sorbo y viendo a un hermano, para luego ver al otro. La señora Kim salió con Namjoon en brazos preguntando porque tanto ajoloteo en la sala, hasta que vio a la pareja de su hijo con un palo partido a la mitad en manos.