START | Niall Horan.

Capítulo 29.

Cuando salgo del despacho del director y le cierro la puerta, me encuentro con Niall a escasos centímetros. Éste, muy enfadado me coge de la muñeca y me lleva hasta el ascensor.

-¿Por qué lo haces? -pregunta de manera que parece mas un grito que nada.

Pasan varios segundos y no pronuncio respuesta, sigo evadida en mis pensamientos y mi cabeza permanece cabizbaja, a pocos centímetros de la suya.

-¡Dime! -grita de manera que me pilla por sorpresa, la piel se me eriza y mis ojos, brillosos por las lágrimas que necesitan ser expulsadas, expulsan a la primera y al cabo de tres segundos la siguiente.
-Porque te quiero. -un simple te quiero, y lo que cuesta decirlo. A Niall le pilla por sorpresa, ya que sabe que yo no soy capaz de decir cosas tan cariñosas, de ese tipo, puesto que su boca cae abierta. Creo que aun sigue en proceso de asimilación.

Me agarra de las manos. Ahora si que parecemos pareja.

Me doy cuenta de que hemos llegado a la planta de arriba desde hace un buen rato cuando alguien silva. Jodido silvido, que nos ha sacado de nuestra burbuja en la cual solo estábamos nosotros dos.

Le cojo de la mano y nos dirigimos hacia mi habitación.

Vemos al chico que emite el sonido y Niall cabreado va a dirigirse hacia él, hasta que yo le paro colocando mi mano sobre su abdómen.

-Niall, no. -consigo pararle con mis técnicas y acto seguido abro la puerta con la tarjeta. Sigue con las miradas de odio hacia aquel chico, el cual nunca había visto por aquí. De manera que cuando cierro la puerta Niall vuelve a la honda.

Ésta vez decido ser yo la que se lanza.

Acerco mis labios a los suyos y nos fundimos en un cálido beso y bastante largo y apasionado. Ahora estoy subida a su cintura, mis piernas estan colocadas en forma de círculo, rodeándole. Él mantiene sus manos sobre mi trasero y camina despacio hasta la cama, allí me deja caer dándome cuenta de que él quiere llevar el mando de la situación.

Nos besamos una vez tras otra, y de su cuello cuelga un collar, el cual no puedo evitar tocar.

Él opta por quitarme la ropa hasta quedarme en ropa de interior, y yo hago lo mismo con él.

Me da un beso en los labios bastante apasionado y baja sus labios húmedos y fríos hacia el cuello lo cual produce una sensación muy rara en mí. Intente no gemir, pero fracasé miserablemente. Ya no soy dueña de mis actos.

Hago un giro con el que consigo que el sea el que esté debajo y yo ser la que conlleva la situación.

-¿Estás preparada? -me pregunta con voz ronca, la cual hace que mi piel se erice y cause mariposas en mi ser.

Asiento, me coloco de rodillas y él por igual. Me quito toda la ropa de interior que quedaba y él hace lo mismo.

-Eres maravillosa. -me dice al oído, en un acto que no puedo evitar cerrar los ojos y hacer que le tenga aun mas ganas.

Un gemido tras otro, acompañado de respiraciones agitadas. Miradas deseadas con sonrisas como acto seguido.

(...)

Chicas ya he decidido quitarme éste capítulo de encima escribiéndolo y subiéndolo enseguida, porque tampoco sabía de que manera redactarlo. Jajajaja.

Chicas espero que os vaya gustando cada vez mas, pensad que ya son mas de 10k visitas, y esto para mi es muy fuerte, escribir para vosotras y que sea leído, nunca pensaba que llegaría a surgir.

Solo os pido que pongáis un poco mas de vuestra parte, que comentéis sobre lo que queráis, acepto críticas, consejos para llevarlos acabo, y los votos, por favor, apenas tengo votos y de esta manera no me motivo. Lo siento pero no acepto lectores fantasmas.

Gracias por todo chicas, bye bye ❤