Explicarle a detalle el cómo y cuándo, fue una conversación que Hyuk hubiera preferido no tener en la cafetería de un hospital, pero dado las circunstancias no tuvo otra opción. Como no tuvo otra opción más que aferrarse al pecho de su madre, cuando esta, comprendiendo la gravedad de lo que su hijo acababa de decirle, comenzó a llorar desconsolada junto a él.
— ¿Fue ese chico, el que te infectó? — su madre preguntó, refiriéndose a Hongbin, ya que todavía no le quedaba claro el porqué se encontraban en el hospital.
— Por supuesto que no, fue una chica, que conocí por dos segundos en una fiesta de fraternidad — comentó con ironía al recordar lo sucedido en aquella fiesta.
— ¿Y entonces porque estamos aquí?
— Porque yo... Porque Hongbin... Porque yo estoy enamorado de él...
* * *
La mirada de Taek Woon seguía fija en el rostro de Ken quien, para ese entonces, estaba a nada de rendirse y confesar la verdad, aunque está fuera bastante cruel y hasta cierto punto vergonzosa.
— ¿Y bien? — preguntó de nuevo Taek Woon.
Ken dejó de morder su labio inferior con insistencia, al cual le quedó la marca de su dentadura y finalmente miró a Taek Woon.
— Los padres de Hyuk son personas muy poco, como decirlo de una forma bonita ¿racionales?... Su madre me odia porque cuando nos conocimos yo estaba besando a Hyuk.
— ¿Ustedes dos?
— ¡No!, nosotros solo somos amigos, los mejores de hecho, lo que sucedió es que estábamos celebrando en su casa el que por fin acababa de cumplir la mayoría de edad, muchos de nuestros amigos estaban ahí también, pero hubo un reto estúpido realmente, y terminamos besándonos justo en frente de su madre... Por supuesto no fue nada lindo lo que sucedió después. Y es por ello que esa señora me aborrece, porque cree que induje al mal camino a su bello retoño, lo que no sabe es que Hyuk no necesitaba guías, él solo se buscaba los problemas... De los dos, yo soy quien lo ha rescatado más veces.
— De todos modos, la actitud de esa señora, mira que golpearte — dijo Taek Woon acariciando con cuidado la mejilla del contrario que aún se encontraba algo roja.
— Ya sé, pero son sus padres — respondió Ken con simpleza encogiéndose de hombros antes de colocar su cabeza en el hombro de Taek Woon.
Una caricia con las manos entrelazadas hizo que, por escasos minutos, ambos olvidaran todo el asunto y se sumergieran en su única y personal burbuja de amor, recordando la bonita noche que habían pasado en su primera cita oficial, al menos hasta que fueron interrumpidos por Hak Yeon, quien solicitaba hablar con Taek Woon con urgencia.
—... ¿Crees que podrías hablar con él? Ya sabes, para hacer todos los tramites más rápido.
— Ya le envié un mensaje, pero no está ahora en servicio, aunque tampoco me dijo que no, así solo será cuestión de esperar a que Hongbin pueda ser trasladado sin problemas...
Won Sik y Ken quienes estaban a escasos tres metros del par de amigos, escucharon aquella conversación sin pie ni cabeza por algunos segundos, hasta que el castaño decidió tomar las riendas de una nueva platica.
— Won Sik, ¿verdad?
— Si.
— Sabes, no sé porque, pero tu rostro me suena conocido.
— Seguramente me has visto en las instalaciones de True Life, he acompañado a mi hermana en varias ocasiones.
Ken pareció considerar aquella respuesta y después de buscar en sus memorias añadió.
— ¡Eres el hermano Young Mi!