Todo comenzó por un simple concurso de Arte y terminó con Samantha Samuels presenciando un asesinato a sangre fría a tan solo metros de ella
Seria difícil guardar el secreto de aquella noche. Seria aún más difícil que ella no terminara de la misma m...
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Una mano ayuda a la otra
Minhyuk
—Disculpe, necesito hablar con el oficial Trevor
—Entonces entra a la oficina—alce mi rostro al oír la voz de hombre sobre todo el ruido del departamento.
Me senté en la silla frente al escritorio de aquel jefe de policías del cual había escuchado hablar por culpa de Sam, el hombre de uniforme me dio la palabra en cuanto cruce la puerta
—Tengo muchas cosas que hacer hoy así que habla de una vez—me pidio sentándose en su escritorio
—Necesito saber algo referente a la desaparición de Samantha Samuels—pedí tratando de sonar tranquilo
—Esa es información que no te concierne—dijo serio
—Estoy preocupado por ella, necesito saber que fue lo que sucedió—insistí
El hombre de cabello blanco frente a mí suspiro y se cruzó de brazos sobre la superficie del escritorio.
—Estamos investigando, no te preocupes. Mejor vuelve a casa
—Yo no veo a nadie buscándola afuera—mire a aquel oficial con el ceño fruncido—No puedo simplemente volver a casa sabiendo que un sociopata se la llevó, necesito que me diga que sucedió y así podre hacer algo al respecto—explique
—Debo adivinar, ¿te gusta no?
Puse mis ojos en blanco. Eso no tenía que ver en el tema
No, yo la amo y la necesito
—No juegues al héroe, solo empeora las cosas, Niño—el peliblanco se levantó de su asiento
—No trató de ser un héroe, sólo trató de hacer el trabajo que ustedes no hacen—dije comenzando a molestarme
—Intenta seguirle la huella a alguien que esconde el más mínimo de sus pasos. Te apuesto a que jamás adivinarias donde esta—respondió de mala forma
El oficial abrió la puerta y por la mirada que me dio pude entender que me invitaba a salir de su oficina. Pero no me iría hasta tener lo que quería: que levantarán sus traseros de la silla y fueran a buscarla en todo el pueblo.
—Todo el mundo se equivoca por lo menos en algo—me levante del asiento y lo mire serio
—¿Es todo? —insisto en que saliera
—No voy a irme de aquí hasta que vea que hagan algo al respecto—me cruce de brazos
—Entonces prefieres que llame a alguien para que te arreste —el hombre salió de la oficina y lo seguí rápidamente—Deja de hacerme perder el tiempo
—Si eso hace que vayan a buscarla, entonces adelante
El oficial se paro frente a mí de manera intimidante pero por mi parte eso no lograba asustarme, sabía perfectamente que poner un poco de presión lo haría reaccionar. Aunque poco a poco la tensión entre ambos aumentaba, no me deje vencer por la dureza en su rostro
