Nothing to lose [Rubius]

CHAPTER XVI - Más socios.

*A cuatro días de la operación Demolición*
Mangel no ha venido hoy y eso me viene muy mal, queda poco tiempo para que vayamos a hacer el ataque y necesito ir a alertarlos, aunque con el jaleo que hubo ayer entiendo por qué no se ha pasado.
La verdad es que sin Mangel por aquí la mañana se me hace un tostón intento jugar a videojuegos pero al final acabo sentada en el sofá mirando por la ventana.
A la tarde me comunican que tengo que ir con Auron a recoger un par de armas más que nos hacen falta.
Vamos en un deportivo rojo, para no llamar la atención (nótese la ironía), llegamos a un puerto donde nos espera el tío con una cara que me resulta conocida.
-¿Que tal Alex?¿Tienes eso? - Ya decía yo que me sonaba.                                                                                                                                                                                                                                                                                  
-Si, ven.
-Quédate aquí y vigila -Me manda Auron. Que mala hostia tiene.
Se acercan al maletero del coche de Alex, vuelven con un par de maletines los cuales ayudo a meter en el deportivo del coche.
-Hombre, ¿De chanchullos andáis? -Un tercer hombre nos habla a nuestra espalda. Por acto reflejo, saco la pistola que tengo a la espalda y le apunto. -Baja el arma guapa, soy colega. -Vuelvo a guardar el arma.
-¿Que haces tú por aquí Wismichu? -Le pregunta Auron y se saludan. Luego le saluda Alex.
-Esta es mi segunda casa, ya sabes ¿Que tenéis previsto?
-Algo muy gordo, un momento. -Auron se aleja para responder a una llamada.
-¿Y tú quien eres? -Me pregunta Wismichu.
-El perrito faldero de estos.
-Mira, sincera, ya me caes bien -Contesta y después se ríe.
-Buenos noticias -Auron vuelve sonriente. - R me ha dicho que os vengáis a Skyrim a tomar algo y hablar de algunos negocios.
-Hostia está enrollado hoy, no desaprovecharemos la ocasión -Los tres se ríen y Auron y Wismichu se chocan las manos. Parece que estos dos se llevan muy bien, nunca había visto a Auron en plan coleguita con nadie.
Llegamos a Skyrim, no se si tengo que volver a mi apartamento o voy con ellos.
-¿Os acompaño?- Pregunto dirigiéndome a Auron.
-Claro vente -Responde Wismichu.
Me quedo esperando una respuesta de Auron pero como no dice nada acato lo que su amigo me ha dicho. Subimos a la tercera planta del apartamento de Rubius, no había estado aquí antes. Es una zona muy...de ocio. Tiene dianas, billar, una barra para cócteles y copas, un jacuzzi y buenas luces de ambiente. Como si un club nocturno estuviese concentrado en una planta. Nos recibe bastante alegre, hasta que me ve a mi. Lleva un rollo bastante diferente al que estoy acostumbrada a ver. Va en chándal y con una gorra, además se ha afeitado un poco la barba que le cubría media cara. La verdad es que parece otro, diría que hasta está guapo.
-Sentaros por la barra. Ahora mando a un T4 que nos prepare unos cubatas -Voy a pasar por su lado pero entonces me agarra del brazo. -¿Que haces aquí? -Me susurra.
-Wismichu me ha pedido que venga -Le contesto también en voz baja. Me suelta del brazo.
Nos sentamos en la barra y un T4 se acerca, tal y como ha dicho Rubius.
-¿Como te va? -Le pregunta Wismichu.
-Bien, mucho jaleo últimamente. Estoy hasta pensando retirarme.
¿Que? Todos nos quedamos en silencio, no asimilamos lo que acaba de decir. ¿Está en serio? Pero si yo estoy aquí para desmantelarlo...Cómo va a dejarlo. Por qué.
-Bueno bonita broma -Ríe Alex. -¿Ahora que vas a decirnos? ¿Que estás enamorado? -Está vez todos se ríen, yo me quedo callada y veo como él se ruboriza, realmente parece que esté delante de alguien muy diferente al señor R que estoy acostumbrada a ver.
Cambian de tema y poco a poco empiezan a andar todos borrachos, lo cierto es que yo voy bastante bien llevo un rato que no he tomado nada. Al rato, comienzan a fumar y a mi me apetece tomar el aire. Salgo a la terraza, que tiene también esa planta, y me apoyo en la barandilla. Oigo que alguien se acerca por detrás así que me giro y veo a Wismichu apoyarse también a mi lado.
-¿Lo estás pasando bien? -Pregunta con una sonrisa en el rostro.
-Supongo que si.
-Gracias a mi has venido -Añade todo orgulloso. -¿Que te parece si vienes a mi piso y lo pasamos un poco mejor? -Me susurra al oído y me acaricia el brazo. Me aparto.
-No puedo salir de aquí -Digo a modo de excusa.
-Vaya ósea que eres una princesita raptada...¿Que te parece si te rescato? -Me agarra bruscamente de la cintura y me pega a él, acerca su cara a la mía para intentar besarme pero entonces con un movimiento rápido lo pongo de espaldas cogiendo su brazo dejándolo inmóvil. Esto lo solía hacer cuando detenía a gente. Veo inmediatamente entrar a Rubius, me aparta para que lo suelte.
-¿Que está pasando?
-¡La tipa esta está loca! -Lloriquea.
-Se ha intentado aprovechar de mi y le he dado su merecido -Respondo con chulería, Rubius me sonríe y entonces le pega un puñetazo en el estómago a Wismichu.
-¡Vete! -Hace caso, desaparece quejándose y con la cola entre las patas. -¿Estás bien?
-¿No me ves? No necesito guardaespaldas ni que me salves.
-Lo se, es otra de las razones por las que me gustas -Se da media vuelta y vuelve a entrar al piso.