Nothing to lose [Rubius]

CHAPTER III - Táctica i

-¡Kitana! El general quiere que te presentes en su despacho. -Me comunica Takeshi al entrar en nuestro edificio.
-Gracias Takeshi ¿Qué tal te ha ido?
-Luego te cuento. -Me da un golpe en el hombro y se marcha sonriendo. Es un gran amigo y muy buena persona.
Si, persona. Los conservacionistas somos humanos. Bueno al menos no hay nadie fusionado, pero si algunos que han tenido que ser moficados por heridas en combates.
Entro al despacho del General Z. Está de espaldas mirando a través de la cristalera que hay en nuestro rascacielos.
-¿Qué tal ha ido la operación Kitana?
-Doce bajas confirmadas señor, hemos conseguido la mercancía.
-¿Sabemos quién la enviaba y de que se trataba esta vez?
-Armamento militar, todo apunta a que se trataba de la banda del magnate R.
-Buen trabajo Kitana -Suspira y se gira para mirarme. -Nunca me defraudas, eres la mejor de mis reclutas.
-No me hagas la pelota Zed -Rio y me apoyo en la pared.
-Es la verdad. Y precisamente por eso creo que eres la idónea para realizar esta misión -Saca una carpeta del cajón de su mesa y me la lanza, la cojo al vuelo y leo lo que pone en un sello "Táctica i".-Puedes retirarte, ahí tienes todos los detalles. Y Kitana, ten...cuidado.
Frunzo el ceño y salgo rápido del despacho estoy deseando ver de qué se trata. Subo a la planta 35, donde se encuentran las habitaciones para los soldados que no tienen casa, es decir, gente como yo.
Me he criado aquí. Zed me recogió cuando tan solo tenía 4 años, cuando mi padre se suicidó tras el asesinato de mi madre. Fui entrenada por él a partir de cumplir los doce y gracias a él soy la mejor de sus soldados aunque sin duda todo ello me ha hecho pasar por cosas que no desearía a nadie.
Me quito por fin el pesado armatoste que conecta con mi columna vertebral, todos los soldados tenemos uno pues nos permite tener mucha más fuerza, sin esto no seríamos amenaza para ningún robot o fusionado.
Cojo la carpeta y la abro, dentro hay unos folios y una grabadora. La pongo en marcha, una voz robotica femenina comienza a hablar:
"Si está escuchando esto es que le ha sido encomendada la Táctica i o Táctica de Infiltración. Su misión será infiltrarse en la banda del Señor R, el magnate más poderoso de nuestro país para obtener todo tipo de información y, a ser posible, acabar con su clan desde dentro. En el interior de la carpeta descubrirá una documentación para identificarse como una mercenaria, en la red ya se ha falsificado su expediente. Además, encontrará fotografías de algunos compinches del Señor R, los cuales son su mano derecha o socios que le proporcionan toda clase de materiales para traficar. El primer objetivo será que la recluten y se haga con la confianza de todo el equipo. No podrá mantener ningún tipo de contacto con conservacionistas, tenga en cuenta que si lo hace no solo pone en riesgo su vida. Si acepta la misión debe mantener en secreto esta organización aunque se encuentre en una situación de vida o muerte, si la eliminan sus fondos bancarios serán depositados a la persona que usted indique y no quedará rastro de usted por la red. Buena suerte soldado. Fin de la retransmisión. Este mensaje se autoborrara en 10 segundos."
-Joder -Digo en voz alta. Me quito la coleta y masajeo la frente. Esto va a ser la misión de mi vida, colarme en la banda más corrupta de nuestra era...
Miro los folios. Son fotografías en las que aparecen los aliados y miembros del Señor R: un tal Auron como su mano derecha, Mangel su mejor amigo, Alexby como uno de sus socios más cercanos y vaya, Hachiro es su perrito faldero. Un robot japonés creado para la guerra, inspirado en los antiguos ninjas. Desde hace años está entre los asesinos más buscados, esto se pone interesante...