✔️ Game of cards_Vkook

♠️ Cap. 6: Jeon ♠️

Jungkook estaba acostado en su sofá, la televisión estaba encendida pero el pelirrojo no prestaba atención a lo que está decía, se encontraba mirando al techo; como si este fuera la cosa más interesante de todo el mundo, estaba completamente aburrido, suspiro y regreso su vista al televisor que estaba en el canal de noticias.

"La policía aún no ha dado datos acerca del robo al banco nacional, aún no sabemos nada del culpable..."- apago el televisor enojado, se levantó y se fue a su garaje, tendría algunas cajas llenas de cosas viejas, perdería su tiempo ahí hasta que pudiera regresar a su trabajo.

Abrió la puerta del garaje y le recibió una nube de polvo, se puso unos audífonos y puso la música a todo volumen, perdiéndose en las letras y ritmos movidos, las primeras cajas habían sido fáciles; puros papeles sin sentido y algunas cosas viejas sin valor.

—— 📹 ——

Taehyung miraba fascinado su televisor, su labio ya se encontraba rojo por las pequeñas mordidas que le daba y pequeñas risas salían debes en cuando.

En su televisor se encontraba la imagen de Jungkook, bailando de un lado a otro en su garaje, movió sus pequeñas caderas al ritmo de la música, todo un artista en su pequeño escenario imaginario.

Taehyung tenía tanta curiosidad sobre el y sobre todo quería conocer el pasado de aquel chico, porque sabe que los Jeon tienen algo que ver con los Kim.

-¿Qué hicieron tus padres Jungkook?- susurró aún maravillado y excitado por los movimientos de cadera del chico.

El sonido de una llamada entrante lo distrajo, miró la pantalla que proyectaba "Hoseok", contestó.

-¿Tienes lo que te pedí?- dijo tan pronto contesto.

-Obvio hermanito, todo está en tu correo- y colgó.

—— 📦 ——

Jungkook estaba sacando papeles de una caja felizmente, hasta que encontró una foto ya deteriorada por el tiempo. En ella se encontraban sus padres mirándole abrir un regalo de navidad, los tres sonreían enormemente, tendría unos 5 años.

Todo el animo que tenia se había esfumado en un solo segundo, aquella sola imagen le había traído varios recuerdos que habían estado almacenados en lo mas profundo de su memoria, le movió una fibra sentimental, derrumbo aquella máscara de rudeza que siempre poseía.

Ya van 16 años que no veía a sus padres, aquella foto había sido tomada en la última navidad que había podido pasar con sus ellos...

- Hace 16 años -

Jungkook, era un niño de 5 años como cualquier otro, su madre era ama de casa y su padre era trabajador en una empresa (o al menos eso le dijo su madre), ya que casi nunca lo veía, vivía en una pequeña casa y era feliz...todo lo que necesitaba un niño de su edad.

El pequeño Jungkook, en ese entonces pelinegro, corría por todo el patio y destruía los montos de hojas que su madre recogía, era otoño; la estación favorita de Jungkook, ¿Por qué?, la respuesta era sencilla, su cumpleaños.

Su cumpleaños estaba a la vuelta de la esquina, ya se imaginaba lleno de regalos. Pero unos pocos días antes, se encontraba corriendo como siempre en el parque frente a su casa, su madre le vigilaban desde el porche, todo tranquilo. Un niño castaño se acercó a él...

- ¿Puedo jugar contigo? – El pequeño Jungkook acepto feliz, tendría a alguien con quien jugar.

El pelinegro estaba distraído con su nuevo amigo y lo único que alcanzo a ver esa tarde, fue a su madre siendo arrastrada a una camioneta negra...y nunca la volvió a ver.

- Presente -

Jungkook lloraba desconsoladamente, lloro como aquella tarde, no recordaba algunos meses después, solo recordaba irse con aquel pequeño castaño y su madre, que era muy joven, una madre adolescente.

-¿Cómo era su apellido?- paso varios meses con aquella pequeña familia y no podía recordar el nombre, ni los apellidos de aquellas personas que lo cobijaron por un tiempo.- Tendré que investigar eso después- se propuso.

Aquel trágico accidente había sido el propósito por lo que quiso ser policía, quería encontrar a su madre, con el tiempo...las esperanzas fueron disminuyendo hasta el punto de casi extinguirse.

Las posibilidades de encontrarla eran bajas, no pudo identificar a los secuestradores y lo único que podía describir del auto en aquel entonces era: grande y de color negro. Información que no ayudaba en nada a los policías en aquel entonces.

Hace unos años atrás se había rendido, esperaba que ya sus padres estuvieran descansando y que no hayan sufrido demasiado. Pequeñas lagrimas resbalaban suavemente entre sus mejillas, sollozo de nuevo al pensar en los cálidos abrazos de su madre y las palabras de amor que le decía cuando estaba llorando.

- 📝 -

el pelinegro estaba enojado, sentado en aquel sofá sentía una especie de impotencia, que no sabia explicar de donde surgió, veía al pelirrojo llorar desconsoladamente en el suelo de su garaje. Si, TaeHyung tiene sentimientos, no es como cualquier otro psicópata, el siente a pesar de que no le gusta sentirse vulnerable, ahora se encontraba lleno de impotencia y de rabia...cosa que le asustaba, con los únicos que había sentido sentimientos de empatía habían sido sus padres, nadie mas.

Ahora llega jungkook y pone sus sentimientos de cabeza, hace que tengan un choque eléctrico y se atonten sin control. Pero aquellas sensaciones le gustan al pelinegro y empezara un juego que no tendrá fin hasta que aquel sexy pelirrojo estuviera entre sus sabanas. Abrió su computadora y reviso su correo, buscando aquel mensaje importante de su hermano, aquel expediente que tanto quería leer.

En su pantalla se mostró un amplio expediente; escuelas, trabajos, parejas, todo...estaba ahora en manos de TaeHyung, miro por ultima vez a jungkook y apago el televisor.

"El cazador ha de ir un poco hambriento, pues el hambre agudiza los sentidos."

Y TaeHyung tenia mucha hambre, haría todo lo que estuviera a su alcance para tener aquel conejito entre sus garras y la segunda pieza fue movida con aquella información valiosa.