•Aliento•

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Era un día frío, poco a poco el clima se volvía cada vez más bajo, pronto llegaría el invierno y consigo la época más esperada por muchos, menos para Dib; esa época eran de las más tristes que el recordaba, no había tenido agradables recuerdos, era un sabor amargo que recorría su mente.

Por suerte hoy estaría en casa, era extraño pero antes le gustaba que llegarán los fines de semana, eran los únicos días que no tenía ocupaciones para salir desde muy temprano a cazar extraterrestres, pero ahora que ya no lo hacía o no tan regular, sus fines de semana se volvían aburridos.

Tenía una rutina simple; levantarse; ir a la escuela; hacer tareas; divagar en internet y dormir, y lo mismo para el resto de la semana... Pero ahora con la llegada de Tak, añadió el hecho de que ahora le tenía que dejar alimentos, aunque ella solo se la pasaba encerrada en aquella habitación, Dib deseaba hablarle pero la irken se escudaba o simplemente lo hacía aún lado ¿Estaba haciendo lo correcto?

No quiso indagar mucho sobre el tema, así que se dirigió al televisor para ver algún programa, como era sábado era muy probable que nada bueno estuviera en la television. Para colmo había acertado, pero no se aparto del televisor.

Tak estaba comenzando a despertar, pronto comenzó a tener hambre, quizás ya habría algo de comer, el humano le dijo que era libre de tomar lo que quisiera pero su sentido de alerta estaba al mil por hora, realmente no confiaba mucho en el cabezon pero comenzaba a tener hambre, sin su pak era necesario que ella obtuviera los nutrientes y energía atreves de la comida. Salió lentamente, no había ruido por lo que quizás el humano ya se habría ido a lo que llamaban "escuela", sin embargo una vez que se acerco observo que Dib estaba ahi, se maldijo a si misma ¿que hacia él ahi?. Estaba apunto de regresar a su habitación pero algo le llamo la atención, se aproximo hasta quedar a una distancia prudente.

Dib veía un programa algo extraño, era una caricatura japonesa, no era fan de ese tipo de animación pero a veces solían traer buenos tramas, sin embargo algo lo interrumpió, sintió la presencia de alguien, algo estaba detrás suyo, escuchaba la respiración y sentía parte del aliento rozando su cabeza, tal grada sorpresa fue, cuando vio a Tak detrás suyo viendo con atención aquella pantalla, el programa trataba sobre unos robots.

- Mimi - susurro Tak mientras veía melancólica realmente extrañaba a su UCI, nunca supo que fue de ella, solo conservo un chip de respaldo... Para cuando los comerciales interrumpieron el programa la Irken se dio cuenta de que estaba cerca del humano.

Salio de ahi lo mas rápido, Dib trato de alcanzarla pero era tarde ella ya estaba encerrada... de nuevo, quería saber que es lo que pasaba pero sabia que era en vano.

- Tak... ¿podemos hablar?

- NO... solo has el desayuno

- ¿que es lo que paso?

- No es nada... solo dedicate a cocinar humano - la chica se aferraba a una almohada, realmente no quería que sus emociones la domaran estando el humano cerca.

31 días con ella Donde viven las historias. Descúbrelo ahora