Always & Forever [Blood Segunda Temporada]

• Capítulo 32 "Después de la tormenta sale el arcoíris" •

______.

Luego de lo ocurrido esa noche tuve miedo por primera vez al llegar a mi casa, mi tía me reconfortaba pero no me era suficiente, temía por como se pondría Sehun al enterarse de todo; cuando entré a la casa me lo encontré de pie cruzado de brazos y con un semblante totalmente serio, me miraba decepcionado mientras negaba múltiples veces con su cabeza. Lo único que se me ocurrió hacer en ese momento fue agacharme, incluso yo estaba decepcionada de mí misma por haber actuado así. Esa noche, platicamos de muchas cosas entre ellas el severo regaño que recibí de su parte por un momento llegué a pensar que si continuaba actuando imprudente podría llegar a perder al hombre que adoro y amo con todo mi ser, a la persona que me hizo ver las cosas desde otra perspectiva y ser positiva ante cualquier situación. Por suerte, el enojo le duro poco y a los pocos días nuestro matrimonio marchaba bien y eso en cierta forma me alivia y pone feliz.

~Tiempo después ~

Ahora, estoy a punto de darme un baño pues Sehun me comentó que quiere ir a comer fuera, según él para salir de la rutina y mejorar nuestro matrimonio en ciertos aspectos. Abrí el grifo de la regadera esperando que saliera el agua, la verdad no me interesa mucho si está fría o caliente al final no siento ninguna de las dos. En un costado cuelgan las toallas donde previamente coloqué dos, una para secarme el cuerpo y otra para mi cabello; pasados unos segundos entré.

Luego de haber lavado mi cabello y cuerpo completos, ya para salir me dio un mareo que me hizo tambalearme y finalmente resbalar con el agua cayendo de trasero en la tina y soltando un grito. Sin embargo, no sabía que me daba más vergüenza si el hecho de haberme dado un fregadazo mientras me bañaba o que Sehun esté viniendo probablemente entré y me vea tirada a media tina desnuda.

—¡_____, cielo! ¿qué ocurrió? Escuché un fuerte ruido y seguido un grito ¿fuiste tú?— Sehun se encontraba detrás de la puerta con cierta preocupación. Hasta yo me preguntaría ¿qué carajos fue ese ruido?
—¡Ay dios que vergüenza! — me comencé a reír pero el mareo continuaba.
—¿Todo bien? Voy a entrar —aseguró. Luego vi como el pomo giraba siendo manipulado por mi esposo quién al entrar y verme tirada, se aguanto las ganas de reírse. —¿Por qué estás tirada en la tina?
—Bueno, como te puedes dar cuenta me estaba bañando y de repente me pegó un mareo que hizo que cayera dándome un buen golpe en mi trasero y ¡no te atrevas a reírte Oh Sehun! — advertí al ver que luchaba contra sí mismo para no hacerlo. —En vez de estarte riendo de tu esposa, ayúdame a levantarme que esto está resbaloso y no quiero darme otro golpe — estiré mi mano hacia él y con la otra señalaba la superficie de la tina.
—Solamente a ti pequeña torpe te ocurren estas cosas — habló entre risas porque al final si terminó riéndose. Mi brazo estaba sobre sus hombros mientras el suyo me tomaba de la cintura mojando su ropa en el proceso.
—Ya sé, ya sé. Ser torpe es parte indispensable en mi — con mi mano libre logré alcanzar una de las toallas envolviéndola alrededor de mi cuerpo. —Ya puedes soltarme, cariño.
—¿Y que te vuelvas a caer? ¡Ni lo pienses! Te acompaño hasta el cuarto — contestó sin soltarme para luego caminar conmigo a dicho lugar.

Ya en el cuarto, me puse a pensar en el repentino mareo. Ahora que lo pienso, no es la primera vez que me ocurre también he tenido ascos con algunas comidas y ya había tenido mi ciclo completo otra vez. ¿Será que estaré embarazada de nuevo? ¿es posible? Si es correcto, debo asegurarme lo antes posible, aprovecharé esta salida para comprar una prueba y realizarla este mismo día.

En el restaurante.

Al llegar al restaurante donde comeríamos, Sehun escogió una mesa en la azotea del lugar. Era tranquilo y bonito, pues eran pocas las mesas que ahí habían por lo que sólo éramos como 6 personas en esa zona, tomamos asiento y yo cada vez me impacientaba más. Tenía una corazonada y los nervios me comían viva, por el momento no le comentaría nada a Sehun pues no quiero ilusionarlo por si me equivocó así como tampoco quiero ilusionarme yo, esperaré hasta que pueda ir a una farmacia pero estando con Sehun es difícil, tendré que pedirle a otra persona que me haga ese pequeño favor. Y ya sé quién será esa persona.

—¡Bonita! — Sehun pasó su mano frente a mi cara. —Te noto distraída y nerviosa ¿hay algo que te preocupa? — preguntó con la tarjeta del menú en sus manos.
—¿Ah? Ah, no estoy bien ¿me decías algo? — sacudí mi cabeza esperando que mi nerviosismo se fuera por arte de magia.
—¿Segura? — yo asentí. — Te preguntaba ¿qué querías de comer? — fijé mi vista en el menú leyendo cada cosa.
—Amm, no sé —me mordí el labio mientras leía. —Gimbap, está bien — le dije al mesero quién esperaba paciente. Ni cuenta me di cuando llegó.
—¿Y usted caballero? — terminó de anotar mi orden y se dirigió a Sehun.
—Sería lo mismo, gracias — respondió mirándolo fijamente.
—En un momento les traigo su comida — el mesero se retiró no sin antes darme un guiño.
—Idiota — murmuró Sehun por lo bajo bastante celoso.

Después de comer tranquilamente, quise ir al baño para poder enviar un mensaje a mi tía Linn y en cuanto lleguemos a casa lo que encargué ya esté y salir de dudas.

*****

Estando de vuelta en casa, traté de actuar normal en presencia de Sehun. Poco después entró al baño de nuestro cuarto por lo que fui a dónde se estaba quedando mi tía.

—¿Estás segura de que puedas estar embarazada de nuevo? — me preguntó buscando en su bolsa.
—Probablemente, estoy un 50% convencida pero la otra mitad me asegura que tal vez sean imaginaciones mías. Es por eso que te pedí este favor tía, para asegurarme — explique tomando la prueba que mi tía extendía hacia mí.
—Anda, entra y asegurémonos de si seré tía otra vez — me dio un ligero empujón.

Suerte que mi tía tenía otro baño, entré e hice todo lo que indicaba.

—¿Y bien? — preguntó mi tía un tanto emocionada.
—Hay que esperar y ver el resultado —le dije sentándome en el borde de la cama.

Mi tía se sentó a mi lado y juntas esperamos, tenía miedo y nervios al mismo tiempo que no quise ni ver el resultado. Mi tía tomó la prueba y la vio, su cara expresó felicidad y dio saltos de emoción.

—¡No puedo creerlo! — dijo por lo bajo. —¡Estás embarazada! — celebró silenciosamente, no queríamos que Sehun lo supiera por el momento, sería sorpresa.
—¿De verdad? ¿No estás mintiendo? — le pregunté a punto de llorar de felicidad. Mi tía negó, me cubrí la boca ahogando un grito. Tantos sentimientos encontrados eran los que tenía, por fin y después de tantos intentos he logrado embarazarme.
—¡Felicidades mi niña!  Ya quiero ver la cara de Sehun cuando le digas ¿por cierto, cuándo se enterará? — borró su sonrisa.
—No lo sé, quiero hacerlo de una manera distinta y que sea especial para los dos — dije poniendo mi dedo índice y pulgar en mi barbilla.
—Linn ¿está ____ contigo? — la voz de Sehun nos sorprendió a las dos y casi brinco del susto.
—Sí, aquí está pero ya va contigo — respondió mi tía.

Agradecida y obteniendo su promesa de que guardará el secreto hasta que se me ocurra una idea para decírselo a Sehun, salí de su cuarto y fui al nuestro. ¡Jesús, seré mamá! Será difícil esconder semejante emoción tanto de mi familia como de mi esposo.