Always & Forever [Blood Segunda Temporada]

• Capítulo 49 «Valdrá la pena» •

______.

Complicada. Esa sería la descripción exacta que daría si alguien llegase a preguntarme cómo es mi vida. Sin embargo, dentro de esa definición incluye los perfectos momentos que he presenciado; principalmente el haberme casado con el amor de mi eterna vida (si es que no muero antes), tuve una preciosa hija  la cual es mi completa adoración y ahora, a tan sólo unos meses de que mi pequeña hermana se una en matrimonio con un hombre al que conozco como la palma de mi mano y sé que juntos les depara un futuro maravilloso; así como estoy segura del inmenso amor que se tienen, siento un enorme  orgullo el estar a su lado.

Dejando de lado las cursilerías, Aria me avisó hace unas horas que por favor reuniera las mujeres de la familia justamente en mi casa porque es más espaciosa –palabras dichas por ella– para acordar los detalles de la boda ya que le gustó cómo Lea organizó la mía y estoy de acuerdo con ella pues tiene razón.

Reunidas en la sala, con Yeon Seo jugando en el piso con Akira. Mi niña ya había crecido un montón, pareciera que tiene unos 3 años cuando en realidad no tiene ni uno, su edad es de apenas 8 meses, es comprensible pues no es hija de humanos y su desarrollo es mucho más avanzado que el promedio, lleva genes de vampiro y aparte la magia corre por sus venas.

—¿A qué hora te dijo Aria, que vendría? —preguntó por enésima vez, mi querida hermana Blair. Ya estaba perdiendo la paciencia pues llevábamos como 2 horas esperándola y Aria ni sus luces.
—A las 2, pero ya sabes cómo es —contesté con tranquilidad. Conocía a mi hermana, sé que a veces se puede tardar en llegar a un lugar.
—Si, pero no es como para que nos tenga ya 2 horas esperándola, además ni siquiera a avisado nada de que ya venga o algo. Tengo más cosas que hacer y ella tardándose. —Blair rodó los ojos cambiando el canal de la televisión, veíamos una serie pero ya se había terminado.
—Probablemente haya ido a otro asunto relacionado con la boda, tal vez fue a ver lo de la comida, o lo de su vestido —señaló Lea, comprensiva. Ella sabía lo tedioso que podría llegar a ser organizar una boda. —Cualquier inconveniente es mejor atenderlo —Blair movió la cabeza negando.

Minutos después Aria llegó como Pedro por su casa (que no avisa, simplemente entra sin tocar) , y fue tiempo de que la reunión comenzará.

—Perdonen si las hice esperar mucho, ya venía de camino pero hubo un pequeño percance respecto a mi vestido y ya saben, es lo primordial en esto así que debía resolverlo —mi hermana suspiró resignada.
—¿Qué fue lo que pasó? Cuéntanos, ¿fue grave el asunto? —Lea sonaba preocupada, de reojo vi como Blair rodaba los ojos a distancia se notaba su disgusto.

Aria comenzó a explicarnos lo que pasó, para resumir la historia; sucedió que otra clienta ya llevaba el vestido escogido por mi hermana directo a pagarlo, por suerte la encargada alcanzó a notar que uno de los vestidos apartados ya no estaba, entonces a paso apresurado y justo a tiempo vio que se lo iban a llevar. Amablemente habló con la clienta y logró salvar el vestido pues no debían tomarse los vestidos de esa área y al no haber ninguna empleada cerca, simplemente decidió tomar el de su agrado. Al final, se llevó otro parecido al de Aria y todavía más económico.

—Y eso es todo —dejó caer los brazos sobre sus piernas.
—Esta bien, ahora que ya nos contaste el porqué llegaste tarde ¿podemos iniciar ya con lo que "se supone" vinimos a hacer? Tengo más pendientes por hacer como para estar perdiendo tiempo —habló Blair. Aria volteó a verla por el tono en que lo dijo pero no hizo caso y continuamos con la reunión. Pensé que casi habría discusión.
—De acuerdo, podemos continuar —Aria regresó la mirada hacía Lea quién tenía una agenda donde anotaba cada idea y cada opción que pudiera ser de ayuda.
—Bueno, como todas saben en una boda siempre debe haber una temática para así mismo poder concordar los arreglos y decoraciones unas con otras, así como los vestidos que usarán las damas de honor. —explicó Lea, la más experta en este tema. —Ahora te pregunto a ti mi niña —se dirigió precisamente a Aria. —¿ya tienes algo en mente? Y si es así, ¿Qué te gustaría que fuera? ¿Llevarás damas de honor? —preguntó tomando en mano el lapicero.
—Si, como me gustan tanto los girasoles pensé que en un día tan especial para mí, podría hacer uso de ese gusto y aprovecharlo en lo que se pueda ¿O sería muy exagerado? —preguntó dudosa.
—Es tu día, tu decides como lo quieres. No somos quienes para juzgarte, pero a mí opinión me parece adecuado; sería una boda muy bonita —sonreí contestando a su antigua pregunta. De vez en cuando le echaba un ojo a mi hija, la cual jugaba muy feliz con Akira. Aria musitó un "gracias".

Continuamos con los preparativos indicados, al final de la tarde ya estaba todo listo. Nosotras seríamos sus damas de honor claramente, llevando un vestido de color amarillo y un ramillete de flores amarillas y blancas ya que mi hermana solicitó esa combinación.

—_____, oye ¿podrías pasarme el contacto del fotógrafo que estuvo en tu boda? ¡Amé las fotografías que tomó! ¡Me encantaron! —para entonces Blair ya se había ido, últimamente andaba de un humor que ni ella misma se aguantaba, incluso Yeol a veces huía de ella.
—Claro, pásame esa pequeña libreta de color morado —señalé dicho objeto y Aria me la dio. Busqué el número de contacto del fotógrafo para enseguida pasárselo a mi hermana ya que ella se encargará de arreglarse con él.

“Nunca descansarás de mí, mi cielo. Estaré todo el maldito tiempo junto a ti, y muy pronto serás completamente mía. Así me cueste causar dolor , todo será por ti.”

Me estremecí solo de escuchar esas palabras en mi mente, que solté la libreta de mis manos cayendo al suelo.

—¿Estás bien? ¿Te sucede algo? —me preguntó Aria colocando su mano sobre mi mano causando que la quitará de repente.
—Si...estoy bien...no es nada, descuida —pasé un cabello detrás de mí oído  pero pronto volvió a caer.
—Te notó extraña —Aria me miraba con duda —¿segura que todo está bien? —volvió a preguntar.
—Ya te dije que todo está bien, ¿Es difícil creerme? —traté de sonar convincente, Aria era muy precavida en cuanto a mí se tratará.
—De acuerdo, no volveré a preguntar. Debo irme, Baek seguramente ya debió llegar a casa, nos vemos hermana, te cuidas —y dio un beso en mi frente para luego dar otro en mi hija.

Si esto de Seth continúa, temo que me volveré loca. Debo hacer algo ¿Pero qué?

Más tarde, esa noche me encontraba recostada con el celular en la mano texteando con Aria, de vez en cuando hacíamos pláticas de hermanas. Sehun, dormía pues ya pasaba de medianoche y al día siguiente madrugaria para el trabajo.

•Oye, estaba pensando –llevo días debatiendo– ¿Recuerdas el "baile" sorpresa que hicieron los chicos en tu boda? •

~Como olvidarlo, si casi cometía una vergüenza esa noche jejeje por poco y desvisto a mi marido frente a toda esa gente. Imagínate, tuve que controlar mis impulsos para no hacerlo ~

•Te creo, yo actuaría de la misma manera si eso habría pasado en mi boda así que...me dije a mi misma, ¿Por qué no hacer lo mismo? Digo, sólo es una loca sugerencia ¿que opinas? •

~¿Estás sugiriendo que ahora nosotras seríamos las que los sorprendan? No suena nada mal pero ¿Cómo haríamos para que no se enterarán? ~

•No lo sé, eso ya lo pensaríamos luego ¿No? Por ahora necesito que me des tu respuesta, quería a Blair también además de mi tía Linn aunque ésta última no sé si quiera •

~De mí obtienes un sí definitivo, he soñado con esa venganza desde mi boda. De Blair podemos comentarle sin que Yeol se entere o alguno de los demás e igual con mi tía. Bueno, te dejo hermana me está venciendo el sueño~

Sentí como Sehun se removió en su lugar depositando su brazo sobre mi vientre, me despedí de mi hermana cerca de las dos am. Dos horas más tarde, los avisos de Seth continuaban; sus crueles palabras torturaban mi mente sin piedad, llegué a tal punto que no pude más...me rendí dejando que dijera todo lo que pudiera, aún con mi mente bloqueada él encontraba la manera de perforar esa protección para causarme daño. Sin conciliar más el sueño con una enorme desesperación porque sus palabras desaparecieran, me arrodillé en el piso a mitad de la habitación llorando totalmente como una loca mientras me balanceaba hacía delante y atrás tomando mis cabellos entre mis manos.

—Cariño, ¿qué tienes? ¿por qué lloras? —Sehun se arrodilló frente a mí con una cara de preocupación. Y lo entiendo, ¿quién carajos ve a su esposa llorando en mitad de la madrugada sin razón alguna?
Aún llorando dije: —Quiero que todo termine...ya no quiero oírlo más...—mi voz era un susurro y se quebraba debido a mis lágrimas.
—¿A quién? Cielo, dime qué sucede, no me asustes —sus manos en mis brazos me daban a entender su preocupación por mí.
—Seth...—susurré con miedo viendo hacia la ventana, podía sentir su presencia desde fuera viéndonos a cualquier hora.

Esa única palabra bastó para que Sehun comprendiera que no me era posible hablar más, simplemente me abrazo. Acariciaba mi cabello mientras varios "shh" salían de su boca, besó mi frente y ahí supe que todo estaría bien si él estaba a mi lado.