—Cariño, sabes que mañana es día de san valentin, ¿a donde iremos a celebrar?.
—podemos ir a un bar, si lo prefieres, pero no a celebrar sabes perfectamente bien que no me gusta, celebrar eso es ridículo.
-ok, cariño aún bar será.
—Hola cariño, siento llegar tarde.
llegué al restaurante el mesero se acercó para tomar mi orden, Lia ya había ordenado antes yo no quise cenar y solo ordene una copa de vino. Pasadas las nueve nos fuimos a su apartamento.
Esa misma noche le había comentado a Lia que la semana entrante sería la cena anual de abogados y como el año pasado ella me había acompañado esta vez no sería la excepción pese a que su papá no le agrade la idea, ya que el también asistira.Al otro día....
-señorita Evans por fin llega, se tardó demasiado, deme las carpetas por favor.
-si aquí están, tomé, el fiscal canceló la reunión de hoy, porque de hecho la mayoría de los abogados no asistirían hoy a la reunión y pues no tenía ningún sentido realizarla.
-si, ya lo sabía, si estuviéramos en mi despacho a estas horas ya habría muchos desempleados.
-y no dudo que lo haría, –le dije.
-Anderson, que bueno que llegas, necesito tu ayuda con estas declaraciones, al parecer a muchos aquí se les dio la gana no venir hoy a trabajar.
Anderson viene entrando para luego sentarse en un pequeño sillón cerca de la puerta.
–tranquilo hombre, el que ati no te guste esta fecha no quiere decir que a los demás tampoco les guste, pero ya Olvidalo, empezemos a trabajar.
Me levante del escritorio por un momento para atender una llamada, al finalizarla y darme vuelta la señorita Evans traía consigo una pequeña caja que al mismo tiempo me daba.
-señorita Evans, ¿que es eso?.-señaló la caja.
-es un regalo, un pequeño detalle para ti.
-sé bien que es un regalo, pero ¿porque?. -Anderson rie.
-sé que no le gustan esta clase de cosas pero a mí sí y yo quise darle esto, pero no solo a usted sino también a Anderson, a Andrew y a su padre.
-hasta para mí dice Anderson respondiendo desde ese pequeño sillón.
-gracias Romina, te debo el tuyo,–dice Anderson. —y tu hombre, ya toma el regalo, ¿no vas a dejarla con la mano estirada o si?.
-por favor no empecemos con esta clase de cosas, mejor hay que seguir trabajando. Fue lo único que respondió Dario sin tomar el pequeño regalo que le he dado.
Seguida de ello se escucha tocar la puerta -señorita Evans abra la puerta por favor.
le deje el pequeño regalo ahí en el escritorio aún lado de su taza de café.
Y para sorpresa de todos era un joven con un arreglo de girasoles en la mano junto con una enorme canasta con chocolates, galletas y dulces por supuesto en forma de corazón incluyendo una pequeña tarjeta.-disculpe la señorita Romina Evans. -si soy yo. -pues esto es para usted, firme por favor de recibido -muchas gracias -que tenga un buen día...
Anderson que estaba aún lado de la puerta me ayudó con los obsequios y los coloco en el escritorio.
No lo podía creer, Matthew me ha enviado todo esto, los girasoles son preciosos y ni que decir de la canasta de dulces, a pesar de que Matthew no estaba aquí en nueva york se acordó de enviarme este bonito detalle, por un momento no dije nada solo me quede observándolo dejando escapar una sonrisa.
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Te odio Dario James. (completa) ✔️
Romance¿Será cierto que del odio al amor hay un solo paso?. Pienso que del odio al amor lo único que puede haber es una inmensa brecha incapaz de traspazarse, O al menos eso era lo que hasta hace poco pensaba, ahora ya no estoy tan segura de eso. Portada...