Ardiente, suave y delicioso.

2.Zorra.

Capitulo 2.

Mi día transcurría como cualquier otro, nos encontrábamos los chicos y yo en la ultima clase y para nuestra mala suerte era historia, como siempre nos sentábamos todos hasta atrás y en mi distracción sentí el golpe de un pequeño papelito en mi boca, voltee a mirar quien lo mandaba pero todos estaban concentrados en lo que decía el profesor y algunos otros simplemente estaban durmiendo.

Cuando abrí el pequeño papel, sentí como el calor subía a mis mejillas me sentía impotente y aunque no era la primera vez que me lo insinuaban o decían ya estaba colmada mi paciencia para que alguien mas me lo digiera el papel que estaba en mis manos se mostraba en letras rojas y chillantes con una muy linda letra a mi pesar, "ZORRA DEL AVERNO",así le decían a mi grupo de amigos y a mi AVERNO y claro que tenia relación con Hell, todo tiene que ver con el.

Tire el papel al piso y simplemente me puse a pensar en quien me lo pudo haber enviado.

Mientras pensaba sentí una mirada fija en mi voltee y me encontré con los ojos negros de Hell y al ver su mano observe el pequeño papel que hace unos momentos me habían aventado, supe en ese mismo instante que el tirarlo al piso fue un grave error, pero ya era demasiado tarde.

Hell se levanto de su asiento haciendo chirrear mas de lo normal su banca, lo cual produjo que todos voltearan a su dirección incluyendo al profesor.

Su mirada era fria y para nada compasiva, supe que se había cabreado en verdad. Se dirigió al frente del escritorio y hablo con una serenidad aterradora.

-Salga-eso basto esa simple palabra hizo que el profesor saliera sin rechistar ,cuando este estuvo afuera siguió hablando.-Niños pijos dejemos algo muy claro les parece.

Todos mis amigos me voltearon a ver y tomaron el pequeño papel que estaba en la banca de Hell, después se levantaron hechos furia y como si estuvieran completamente organizados se separaron en diversas zonas del salón. En verdad parecían amenazantes.

-Alguien muy idiota, le mando un pequeño papelito a Karla saben...Y les dejaremos algo muy en claro sobre este tipo de... como decirlo mmm pendejadas si creo que esa es la palabra.-continuo diciendo Garret.

Al decir eso todos voltearon a verme y yo simplemente me levante de mi lugar, no era la primera vez que hacían algo así por defenderme desde pequeños solían ser así, por eso sabia muy bien lo que venia.

-Así que si no nos dicen quien fue el maldito o maldita que le mando esa gran estupidez, los haremos pagar a cada uno de los que están en este salón.-Jacob hablo y su voz fría hizo que hasta a mi se me erizaran los bellos.

-Y todos aquí saben que el pagarla con nosotros sale muy caro-Kaleb comenzó a caminar mientras decía esto y se sentó encima del escritorio a lado de Hell-Así que el idiota que hizo esto-levanto el pequeño papel-que comience a hablar.

Todos se mantenían callados y con la mirada fija en todos mis chicos, cuando un idiota hablo.

-Pues que dice el maldito papel que ofendió tanto a la princesita ¿eh?

Vi como todos se le quedaron viendo y el como Hell comenzó a caminar hacia el con sus puños cerrados, tenia que detener esto antes de que lo matara...así que hable.

-Nada importante solo algo que ladran todos cuando creen que no me doy cuenta, y si se preguntan que es porque son muy estúpidos para descifrarlo ustedes mismos-sentía el peso de cada par de ojos puesto en mi-Ese estúpido papel simplemente dice que me follo con esos cinco chicos, que chungón ¿no?, si creen que es un insulto llamarme zorra por su pequeña capacidad neuronal es a lo único que les permite llegar pues que mal por ustedes, pero les digo a todos que si me follara a esos cinco o a cualquiera de ellos lo que me deberían de tener es envidia.-vi el como algunos me veían con asombro y algunos otros con enojo-Asi que si piensan hacerme sentir mal llamándome zorra de estos chicos, piensen en otra cosa que a mi no me afecta en nada.

Cuando termine de decir eso ya me encontraba con mi mochila en mano a lado de mis cinco chicos, viendo a todos con altanería y aburrimiento a la par.

-Que sea la ultima vez que le llegan a decir algo asiqué si a ella no le importa a mi si.-hablo Hell mirando a cada uno de nuestro salón.-Y quiero que sepan que voy a saber quien fue el que le aventó ese puñetero papel y les prometo que no podrá caminar mínimo una semana, ¿Entendido?-lo dijo tan seguro como siempre y todos sabíamos que las promesas de Hell las cumplía.

-SI-contestaron todos al aniso provocando que quisiera reír pero me contuve, pues se notaba el miedo que nos tenían o bueno mas que nada a Hell.

Se acerco a mi y nos hizo a todos una seña de que saliéramos.

-Bien echo muñeca-eso fue lo único que me dijo dándome un beso en la frente y abrazándome como siempre, los demás chicos se colocaron en sus posiciones habituales y comenzamos a caminar directo a la salida escuchando el timbre que marcaba el finalizar de las clases.

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Después de eso no se volvió a mencionar, sabían que aunque lo negara me molestaba que digieran esas cosas de mi, así que trataron de hacerme olvidar el mal rato.

Decidimos irnos a la casa de Kaleb que era la que estaba mas cerca. Todos los chicos traían su moto y al ser la única que no tenia comenzaron a discutir con quien me iría.

-En mi motocicleta estaremos mas cómodos-Garret señalo su vehículo y tenia un buen punto era espaciosa y cómoda.

-A Karla le gusta mucho mas la mía-era cierto la de Jacob era por mucho mi favorita.

-La mía es la mas rápida así que ya gane-Dijo Kaleb haciendo un baile de victoria al cual comencé a carcajearme.-ya ven la hice reír así que gano por dos.

-Joder arreglemos esto como adultos okey-ese por supuesto fue Hell, levanto su puño mostrando el como se había puesto blanco y supe que empezaría la guerra-¿Listos?-todos asintieron colocando al igual su puño en el aire listos para empezar. Yo simplemente me aleje para ver el espectáculo.

-Piedra, papel o tijera-dijeron al uniso y enseguida se escucharon los lloriqueos de Jacob.

-Mierda no es justo siempre pierdo en este maldito juego.

-Quien te manda a ser tan pendejo-se burlo Garret, pero le duro poco su felicidad pues en la segunda ronda perdió-Puta madre.

Yo simplemente no paraba de reír el espectáculo que me estaban dando era admirable, todos cuando ven a estos fortachones nunca se imaginan que sean como unos pequeñuelos que juegan a piedra, papel o tijera como si fuera algo de vida o muerte.

Para no hacérselas larga termino ganando Kaleb, así que me monte rápidamente en su motocicleta colocándome el casco y abrazándome de su torso, porque el en verdad era un loco conduciendo y eh de admitir que me encanta eso. Todos los chicos se nos quedaron viendo y simplemente les sonreí y Kaleb les guiño un ojo dando a entender que nos veríamos en su casa.