Hell.
Kaleb tenía razón, cada maldita palabra que salió de su boca tenía tanta verdad.
Traté de verlo pero la vergüenza me lo impedía, sentía gotas pesadas que bajaban por mis mejillas y me picaba a su paso,mi garganta se sentía seca y cerrada.
Karla tenía ese hechizo en todos, quien la conociera lo suficiente siempre se enamorarían de ella.
Y él solo pensar que él hijo de puta de Axel le podría hacer daño me hacia enfurecer, pero seamos realistas... yo siempre la lastimaria mas.
Traté de regular mi respiración y de tragarme ese horrible nudo que se había formado en mi garganta.
-Denme mis llaves- sonaba tranquilo a pesar de toda la escenita que habíamos montado.
-No iras por ella Hell-La voz de Garret fue autoritaria, como la de un padre regañando a su hijo.
-No iré por ella, Solo necesito estar lejos de todos-las miradas incrédula y por supuesto sin creerme ninguna palabra trataban de analisarme.-Lo prometo.
Con eso último sus miradas y cuerpo se relajarons, sabiendo que nunca rompería una promesa.
Me tendieron mis llaves y me estaban acompañando a la salida en completo silencio, que a pesar de lo que había pasado no era incómodo. Cuando estuvimos lo suficientemente cerca de la puerta, pudimos notar por los ventanales que Karla había llegado.
Por la luz de la casa y la posición del carro podíamos distinguirlos perfectamente.
Karla estaba dormida y el la contemplaba, no se vio que hizo para que se despertará, pero se notaba que el le estaba diciendo algo, cuando sin esperarlo ella se abalanzó a él y lo beso.
Era lento, pausado y con cariño.
Nᴏ ᴄᴏᴍᴏ ᴇʟ ɴᴜᴇsᴛʀᴏ ϙᴜᴇ ғᴜᴇ ᴀʀᴅɪᴇɴᴛᴇ, sᴜᴀᴠᴇ ʏ ᴅᴇʟɪᴄɪᴏsᴏ.
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Ardiente, suave y delicioso.
RandomCuatro chicos y una chica, una amistad de años que demuestra con cada paso que dan que el Laverno es ardiente y que se disfruta con locura. Que se hace cuando estas llena de mentiras, cuando no sabes quien eres, y tu única salida es la adrenalina. Y...
