HIJOS DE NOCTURNE

EQUIPO PESADO

Saludos cordiales camaradas leales, xenos y sirvientes de los poderes ruinosos, vengo con un nuevo capítulo para ponerlo a su consideración:

EQUIPO PESADO

Elysius estuvo tres días en Bakka, en ese tiempo Gael se ofreció a integrar un lanzallamas pesado al brazo de combate que reemplazaba el que había perdido peleando contra un Kaudillo Orko, este ofrecimiento fue aceptado con agrado; su última conversación con Tu'Shan fue hace dos días, según su astrópata ya debieron de haber llegado pero Elysius seguía esperando su arribo, no durmió nada en todo el tiempo que llevaba en Bakka pero gracias a su anatomía mejorada no sufría percances por ello, al contrario supuso un beneficio pues estuvo al pendiente de todo, las miradas inquisitivas de las sororitas, la modificación de su brazo, las palabras de júbilo de He'stan, el estudio minucioso que los visioingenieros realizaban sobre "El carruaje de Obsidiana" del cual no se pudo determinar el material del que se había forjado, se hallaron placas de datos todas vacías a excepción de una que solo tenía una palabra, "Draco".

Elysius pacientemente esperó junto a Gael que ultimaba los detalles del lanzallamas, conversaron con soltura y sin despegar su vista de la labor que ocupaba al mago.

—Aquella cantera estaba mal administrada y con máquinas descuidadas, me apropie de ella y empecé a reparar la maquinaria, fue entonces que decidí ser un Magos Technicus— comentó con su voz mecánica.

—Tres canteras, cinco cohortes de guerreros Skitarii, una forja y varios vehículos— menciona Elysius — ¿Cómo has conseguido tanto, mago?

Gael se incorporó y permaneció unos segundos en silencio antes de responder —Quedé en orfandad antes de cumplir mis quince años en un asalto de piratas Orkos a la nave mercante de mi familia, los pieles verdes fueron repelidos pero mis progenitores fallecieron y yo quedé herido de gravedad— aunque su voz era electrónica se apreció un chirrido desfasado, como si las emociones batallaran por ser contenidas —Fui llevado a Marte donde me recupere, como hijo único heredé toda la fortuna, durante unos meses tuve miedo y me sentía indefenso pero una vez obtuve un brazo mecánico y destrocé un bloque de plastiacero supe la verdad— culminó el tecnosacerdote.

— ¿Qué verdad?

—La carne es débil— sentenció Gael firmemente —Su nuevo brazo está listo, Capellán— dijo casi de inmediato como si sus emociones fueran suprimidas y la parte mecánica se apoderara del mago.

—Te extiendo mis agradecimientos, Mago— respondió Elysius cuando el brazo es conectado de nuevo en su cuerpo, Gael le agradaba, muchas veces con sus comentarios le recordaba a Argos, Señor de la Forja, su amigo más cercano y antiguo — ¿Dónde puedo probar esta obra de ingeniería?

—Sígame, Capellán, conozco el lugar indicado.

En otra mesa de trabajo He'stan se tomó su tiempo para reparar su armadura de los daños sufridos en su último enfrentamiento, él tampoco había conciliado el sueño por la emoción del descubrimiento, con su torso desnudo y lleno de marcas martillaba el peto de la servoarmadura arreglando las abolladuras, el sudor recorría todo su cuerpo haciendo brillar sus músculos de ébano, completamente concentrado ignoró las miradas curiosas de las sororitas.

Annelies había estado cómoda con la presencia de He'stan pero ese día en singular no se hallaba conforme con el Salamandra, pues todo su cuerpo estaba adornado por marcas tribales donde no estaban las cicatrices de sus batallas, los símbolos aparentaban ser de alguna especie de culto y para ella nada de eso representaba a su Dios Emperador, en su cabeza las anteriores acusaciones que se hicieron a los Salamandras no estaban faltas de fundamentos, en contraposición tanto el Capellán con el Padre Forjador demostraron humildad y mansedumbre, no emanaban ni un atisbo de arrogancia o inconformidad lo que la detuvo de hacer injerencias, más no pretendía ignorar lo que veía y solo había una persona a la cual cuestionar.