Vulkan He'stan, Padre Forjador de los Salamandras, viaja por la galaxia buscando las últimas reliquias que escondió su Primarca y con ello espera encontrar el paradero de este, con el fin de que vuelva a dirigir al Capítulo de los Nacidos del Fuego...
Bienvenidos camaradas leales, xenos y seres corrompidos por el caos, no más intervención de mi parte sigan por favor:
INTERFERENCIA
El ambiente era helado en esa parte de la "Sophos Rex", se podía observar el aire que entraba por los respiraderos pues llegaban como una nube condensada de vapor, las paredes se hallaban húmedas por este mismo motivo, la calefacción había sufrido una avería, era el tercer día que los ocupantes de esa zona debían soportar las gélidas condiciones, incluso siendo estos el personal médico y sus pacientes no se le prestó atención, debido a que el mando concentraba todos sus esfuerzos en descubrir si el traidor tenía cómplices, los electrosacerdotes fueron revisados por Pyriel sin hallar mancha de corrupción en ellos, fue igual con los visioingenieros y los otros tecnosacerdotes, el bibliotecario empezaba a creer que el saboteador trabajaba sólo, encontraron el cuerpo con la baliza de tecnología xeno, fue destruida e incinerada, todas las pistas murieron con el visioingeniero Marcus Sutherland que Ariadne asesinó, era posible que los herejes descubrieran una forma de burlar las habilidades del bibliotecario por lo que el estado de emergencia no fue revocado, siendo las partes fundamentales de la nave vigilada celosamente por astartes, sororitas y los electrosacerdotes más leales, elegidos por el mismo Gael, mientras tanto las investigaciones procedían bajo la estricta supervisión de Pyriel y Annelies.
—La bestia repta de regreso a la pútrida agua haciendo resonar sus escamas, Nero observa impotente como aquel reptil cargaba en sus fauces a otro niño depredado por una criatura que con arcaica sabiduría emboscó una presa más. El hombre no pudo más que sentirse miserable, la culpa se apoderó de su ser, él había estudiado mal el caso, tantos niños perdidos que en realidad no lo estaban. — finalizó Su'ane cerrando su libro lentamente.
—Interesante, pensé que si sería el barquero— expresó Aria acostada en su camilla de hospital.
—Sí, yo también pero hay que recordar que la naturaleza es capaz de atrocidades y no la puedes culpar pues no lo hace con maldad.
— ¿Es la moraleja?
—No lo creo, el final pienso fue escrito de esa manera para no ser predecible.
La hermana serafín hizo un mohín con su boca, el par sonrió.
—Bueno doctora, ya llevo ocho días aquí. ¿Cuándo podré salir de esta cama? Me estoy oxidando.
Su revisó los análisis de la rubia —Puedo dar el alta hoy, tus heridas se han sanado y este frío es horrendo.
—Qué bueno que lo notaste— cantó Ariadne que se cubría con dos mantas.
Su'ane guardó su libro y miró a su amiga para indagar —Vi un tatuaje de los Halcones de Guerra de Harakon.
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HARAKONIWARHAWK
—Oh— expresó la rubia — ¿Quieres oír la trágica historia de mi vida?
