Destinada A Él || EN EDICIÓN

Episodio 15

Voy a explotar.

Literal, siento que mi cabeza estallará en cualquier momento. Estoy en la habitación donde me dejo Dylan la segunda noche aquí, pero no lo veo por ningún lado.

Las imágenes de lo ocurrido ayer llegan a mi como balde de agua fría, Ryan, él había muerto... pero ¿revivió? Necesito saber como esta, y que fue lo que paso, ¿cómo apareció esa luz, fue acaso por esas extrañas palabras?

Me levanto con dificultad ya que los martillazos que siento en mi cabeza no ayudan en nada. Me dirijo a la puerta de la habitación con cuidado, esta todo oscuro y no puedo ver nada; escucho dos voces, una de Dylan y otra de ¿mi madre?

—Ella no puede saberlo aun, no esta preparada— dice mi madre, ¿acaso se refiere a mi?

—Sabe que no podré ocultárselo— responde Dylan.

—Dentro de poco sera su cumpleaños, se lo dire entonces— ¿dentro de poco? Faltaba mas de un mes para mi cumpleaños —ella aun no despierta, ¿verdad?— ¿cuanto tiempo a pasado?

—No— suelta un suspiro Dylan — Me estoy volviendo loco sin ver esos ojos azules— se escucha como si se rompiera algo.

—¿Azules?, entonces a empezado antes— dice mi madre pensativa.

—¿Empezar?— pregunta Dylan confundido.

—En su cumpleaños número 18 ella recuperará todo lo que se le oculto; ella tenía los ojos azules de pequeña y siempre le gustaba tocar las nubes— dice soñadora, ¿recuperar qué?

—Ha pasado mas de un mes durmiendo, ¿cómo se supone que le dirá eso?— pregunta Dylan fastidiado.

—Solo, que no se enteré hasta entonces— dice mi madre presurosa.

—¿Decirme que?— me dirijo al lugar donde estaban.

Se quedan callados mirándome.

—Mi Luna, estas despierta— dice Dylan con lágrimas en los ojos.

Por un momento me olvido de la situación y me dejo envolver por eso brazos que tanto extrañaba, mira mi rostro y frunce el ceño.

—¿Qué es esto?— dice mirando mi frente.

—¿El que?— digo confundida.

—Esta marca, es como una lagrima plateada en tu frente— dice tocando el lugar donde esa luz se deposito.

—No lo se, pero regresando al tema, ¿qué me están ocultando?— digo separándome de Dylan y observo a mi madre.

—Cariño, yo no quería que te enteraras de esta manera— dice entre sollozos.

—¿Enterarme de qué? Madre me estás preocupando dime que sucede— me acerco a ella.

—Te he mentido cariño, me pidieron que te ocultara todo pero fue por tu bien, eras tan pequeña, no podías controlarte— me dice.

—¿Ocultarme qué?— cuestiono.

—No todo lo que sabes es verdad, pero ahora necesitas saberlo— dice mirándome.

—Ya dime que sucede por favor— pido.

—Tú no eres mi hija— suelta.

—¿Qué?— digo con lágrimas en los ojos.

— Nosotros queríamos tener hijos, pero no podíamos, cuando me embarace de tu hermano me dijeron que era probable que no vuelva a tener hijos—

«Pero tu padre y yo no nos rendimos ¿sabes?, a pesar de todo te consideramos nuestra hija, intentamos de todo, todos los tratamientos existentes y nada.