𝘍𝘢𝘥𝘦𝘥 𝘨𝘭𝘰𝘳𝘺

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No podía creer todo lo que vi, era demasiado para mi, jamás imaginé que mi esposa, mi más grande amor, me pudiera engañar con mi propio hermano, alguien de mi propia sangre; yo hubiera hecho cualquier cosa por ellos, y ellos hicieron hasta lo imposible por mi dinero. De verdad me alegraba bastante haberle dejado todo a mi madre y a mis hijos, y que, finalmente Juliet y John pagaran por lo que hicieron, a Andrew no le tengo rencor alguno pues sé que se aprovecharon de su pobreza y los únicos culpables habían sido ellos.

Me lastimaba bastante ¿como pudieron atreverse? ¿Cómo? No me entraba a la cabeza, había sido una traición total y jamás lo esperé de su parte.

—¿Quién cuida a mis niños?— le pregunté a Remiel, pues aquello no me lo había mostrado.

—Están con tu madre, y en ocasiones con Cecile, no te preocupes, están en buenas manos— respondió.

Asentí y miré al suelo, dándole más vueltas al asunto, tenía mucha rabia.

—¿Estás listo para descansar? ¿O necesitas más tiempo?.

Me sacó de mis pensamientos y volteé a verlo, parecía algo preocupado por mi.

—¿Tendré que ver a Juliet nuevamente?— pregunté.

—Las personas como ella van a un lugar distinto y jamás tienen un buen descanso.

—¿Por el suicidio?.

—No, por el homicidio— aclaró.

Me alivié un poco al saber que no tendría que verla de nuevo, por que de ser posible ahora yo la mataría en el plano astral, o al que sea que vaya.

—Bien, ya me quiero ir, acabemos con esto— dije.

—Pero antes, necesitas el uniforme— comentó.

—¿Unifo...

No pude ni terminar de preguntarle cuando de pronto toda mi ropa cambió, era mi atuendo favorito, solo que totalmente blanco.

—Bueno, no es uniforme, solo tomamos tus prendas favoritas, las tornamos de color blanco y te las ponemos— me explicó efusivo — al fin te quité esa horrorosa playera de Mobil que llevabas puesta desde hace 6 meses.

—Hey, no insultes mi sentido de la moda— reclamé riendo.

Admiré un poco más mi nuevo atuendo, era mi preciada chaqueta repleta de picos, una playera, pantalones de mezclilla y mis converse.

—Estás listo para irte Jules— me dijo, nunca antes me había llamado Jules, solo Julian y eso me hizo sacar una pequeña sonrisa.

—¿Vendrás a visitarme?.

A decir verdad, le había tomado cariño y me gustaría volver a verlo.

—Generalmente no visito a ninguno de los que estuvieron conmigo, pero contigo puedo hacer una excepción, no fuiste como los demás— respondió.

—Te esperaré entonces.

Ambos sonreímos y nos despedimos con un pequeño abrazo, estaba a punto de darme la media vuelta cuando de pronto me habló nuevamente.

—Hey— me llamó —¿no se te olvida algo?.

Lo miré confundido, estaba casi seguro de que no me faltaba nada.

—Uhm, no— respondí dudoso.

—Checa el bolso derecho de tu chaqueta— me pidió mientras se dibujaba una enorme sonrisa en su rostro.

Me parecía algo raro, pero aún así metí la mano y busqué con mis dedos, encontrando lo que parecía ser un anillo; lo saqué y lo vi, y efectivamente, era un anillo, del mismo modelo del que le di a Juliet, solo que con diamantes rojos que hacían juego con el traje de Remiel.

—Oh por favor, pensé que ya lo habías olvidado— rodé los ojos y me reí, provocando que él soltara una gran carcajada.

Aún riéndose, se acercó y me puso enfrente su mano.

—Pónmelo, querido.

Negué con la cabeza pero aún así se lo puse, no podía creer que en mi último día siguiera con su broma.

—Se te ve muy bonito— le dije sarcástico.

—¿Verdad que si? Me lo dio un chico como símbolo de arrepentimiento.

Reí, en realidad ya no me molestaban sus comentarios, solo me causaban risa.

—Ya me voy— me di la media vuelta y comencé a caminar.

—No te creas ¡yo te amo Julian!— exclamó para después fingir un llanto.

—Yo igual te amo— dije entre risas —Nos vemos luego.

Volteé hacia atrás y le dediqué una última sonrisa y él también me la devolvió mientras agitaba su mano.

Cuando regresé mi mirada hacia el frente, me topé con otro arcángel, uno aún más imponente, con alas más grandes que las de Remiel y un traje azul rey. Estaba casi seguro de que era Miguel, recuerdo alguna vez haber oído de él cuando aún estaba vivo.

No me dijo nada, simplemente caminó a mi lado para indicarme el camino, hasta que que finalmente llegamos a lo que parecía ser un portal, como una puerta, y del otro lado todo estaba iluminado, muy bonito, y todo era de colores claros.

Me hizo un ademán para que yo entrara, pero estaba nervioso ¿debería decirle algo? ¿Agradecerle? Supuse que si, así que le di las gracias en voz baja y crucé hacia el otro lado.

Lo había logrado, al fin todo había pasado, no podía creerlo.

Volteé hacia atrás una última vez, pero el portal ya no estaba.

No sabía qué hacer así que solo comencé a caminar para conocer el lugar; todo era tan elegante, como una mansión y había gente platicando y pasándola bien, bastante tranquilo.

—¿Julian?— me llamó la voz de un hombre, y yo volteé inmediatamente, para encontrarme con mi padre, frente a frente, como en los viejos tiempos.

—¿Papá? No puedo creerlo— dije emocionado.

Ambos nos dimos un gran abrazo y luego nos separamos.

—Yo tampoco puedo creerlo ¿qué haces aquí? Todavía eres joven— parecía confundido y preocupado, pero a la vez alegre.

—Oh, si tan solo supieras– suspiré y apreté los labios.

—¿Pasó algo malo?.

Asentí y él colocó una mano sobre mi hombro, supongo que presentía que alguien me había matado o había pasado algún accidente.

—¿Quieres contarme?— preguntó nuevamente —Vamos por algo de tomar, aquí no hay alcohol, pero mínimo hay jugo.

Sonreí y lo seguí hacia lo que se suponía que era la barra del bar, claro que estaba dispuesto a contarle todo, pues era mi padre, necesitaba saberlo y además yo necesitaba sacarlo.

Poco a poco mis sentimientos de ira y tristeza comenzaron a desparecer; y después de todo, al fin estaba bien de nuevo, tranquilo, sin preocupaciones y lo único que podía sentir era paz.










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¡Hola chicas! Hemos llegado al final de la historia y de verdad quiero agradecerles mucho por haberme leído, significa mucho para mi ❤️

Lo más probable es que este sea mi último fic, pues siento que ya es hora de concentrarme y perseguir mi sueño de convertirme en escritora "profesional". Espero publicar una novela original en unas cuantas semanas, y si desean apoyarme, igual se los agradecería infinitamente.
En un futuro igual me gustaría adaptar esta historia a algo original, creo que tiene potencial.  (Acabo de publicar un libro de Shots con los Voidz, por si gustan pasar a leerlo <3).

Fun fact: la trama de esta historia surgió de una vez que estaba escuchando River Of Brakelights y no le había puesto mucha atención a la letra, y en la parte donde dice "Who should be" por la manera en la que canta, parece que dijera "Who shot me" y a partir de ahí toda mi imaginación se desató, tardé un par de meses en estructurarla y así finalmente poder traérselas.

De verdad, muchas gracias a todas ustedes que me leyeron, las amo 💕

11th Dimension (Julian Casablancas)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora