-Luego de tomar una ducha, decidí ir a la que ahora era la habitación de Samuel por ropa, pude verlo acostado boca abajo, aún tenía su traje puesto, y estaba ligeramente despeinado, a lo que esboce una pequeña sonrisa. Aunque él me golpee lo amo sobre todas la cosas. Con mucho cuidado abrí el armario para sacar una camisa gris de mangas largas, una bufanda a juego y unos jeans, con sandalias también de color gris con poco tacón. Estaba terminando de arreglarme cuando siento una tibia respiración en mi cuello, y manos fuertes y grandes en mi muy golpeada y adolorida cintura, me di la vuelta y ahí estaba el, recién levantado pero tan guapo como siempre-Buenos días Samuel-____ dijo con voz baja y tímida-
-Buenos días cielo-dijo un radiante y cariñoso mientras me daba un beso en la mejilla y otro en el cuello, hasta que su mirada se posó en los hematomas y magulladuras que tenía su esposa. Su mirada cambio, ____ lo noto, pudo ver rabia y tristeza -quiero que vayas en este mismo momento al baño y cubras esas asquerosas marcas-dijo con asco e impotencia, ella lo miro incrédula, y como una tonta asintió, para ir al baño-y... ¿____?
- ¿Si Samu? -Dijo ella dándose la vuelta cuando ya se encontraba en la puerta del baño-
-Te amo-dijo acercándose a ella, mientras unía sus labios en un beso tierno y suave. ___ trato de recordar cuándo fue la última vez que Samuel la beso así, como cuando eran jóvenes. Se separó de ella para verla directamente a los ojos, esos ojos que lo volvían loco, y le dijo-te amo mucho ____-esta vez lo dijo con un toque de tristeza en sus palabras-no sabes cuánto lo siento, por golpearte y hacerte vivir esta vida de mierda, tú no te mereces esto. Soy un maldito miserable-ella solo lo observaba completamente quieta, era la primera vez que él se disculpaba por maltratarla. Pudo reaccionar cuando vio como una solitaria lágrima caía por la mejilla de el-te comprendería si quisieras irte y dejarme-
-Yo también te amo Samu, demasiado, por eso estoy contigo, no eres un miserable. Te amo tal cual eres-dijo colando su mano en la mejilla de él y limpiando ahora más de una lagrima-no pienses que me iré, me quedare contigo porque te amo. Solo prométeme que cambiaras. Solo prometerlo.
-Lo prometo-dijo Samuel sonriendo de lado para darle un corto beso en los labios a ____. Ella solo sonrió, y se dijo a sí misma "ahora todo será diferente".
Ella no sabía lo que venía, no sabía que era una promesa vacía, no tenía idea de que el no cumpliría lo que prometió, porque cuando eres un golpeador, hace falta mucho más que una promesa, o simples palabras de aliento para dejar de serlo. Después de todo ella se dará cuenta de que estaba completamente ciega y equivocada, y el al fin comprenderá que cometió el error más grande toda su vida...
