-Luego de que Samuel tuviera esa pequeña charla con su madre, se quedó solo. Pensaba lo mismo una y otra vez. Y se repetía la misma pregunta. ¿Qué pasaría si ____ lo deja? Se dio una bofetada mental por pensar esa mier.da-
-Ella no puede dejarme. Es mi esposa. Ella me ama. -pensó-
-Mientras en la habitación de ____, ambas mujeres platicaban acerca de Samuel-
-Quiero alejarme de él. No quiero vivir asustada de que en algún momento se vuelva loco y termine mandándome otra vez al hospital-decía ____ con voz neutra pero firme-y mucho menos quiero que mi hijo pase por lo mismo. No quiero que vea a su padre golpear a su madre. No lo permitiré. -Ahora tenía los ojos cristalizados y la voz cortada-
-Sé lo que intentas decirme cariño-dijo Laura tomando una de las manos de ____-pero también es el hijo de Samuel. No puedes prohibirle que vea a su hijo. Y mucho menos al niño que no ve a su padre-
-Claro que no puedo hacerlo. Pero le tengo miedo Laura. Estoy asustada-esta vez ____ había empezado a llorar-
-Tranquila cariño-le dijo con voz comprensiva-respóndeme algo-___ levanto la mirada para verla a los ojos- ¿tu aun amas a Samuel? -
-____ se quedó pensando varios segundos. Analizaba la pregunta. Pero más que todo, analizaba sus sentimientos. Sus sentimientos hacia El. Su esposo. El padre de su hijo. El hombre que la golpeaba. El que casi la mata a ella y a su bebé. Pasaron varios minutos. Laura aun la observaba atentamente. Hasta que ____ le dio una respuesta. -
-No, yo... yo ya no lo amo. No puedo amar a una persona tan cruel-al principio dudaba de sus palabras. Estaba dando una respuesta errónea. Claro que ella amaba a Samuel. Con todo su corazón. Pero sería capaz de mentir para poder huir. Huir de él. Para siempre. O tal vez, hasta que Samuel pueda encontrarla. -