(6-8-2010)

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Él estaba sonriendo.

-Si no tienes nada que hacer y te aburres puedes emplear tu paciencia en contar todos los círculos de un árbol, tanto los claros como los oscuros, adivinaras su edad-Dijo, con su tono de alegría infantil tan característico, hace tanto tiempo que no lo veo sonreír, que mis recuerdos parecen una invención mía.

Estábamos en el jardín botánico con una excursión del colegio y era enero.

Por supuesto, íbamos de la mano, las mías estaban ligeramente más frías que las suyas y él no paraba de bromear sobre ello.

-¿Has contado alguno?-pregunto

-No

-¿Entonces?

-Quiero que lo hagamos juntos-Siempre tenía la respuesta correcta para todo, me acerco y beso su mejilla.

-¿Me lo prometes?

-Te lo prometo

Cuando la profesora dobla la esquina aprovecha para besar mis labios

Que ingenua fui al creerle.

A pesar de tener tan solo 10 años,nos queriamos, tan en serio que si las cosas no hubieran salido tan mal, podría haber durado para siempre,lo sé porque el sentimiento aun no se ha ido, ni se va a ir.

Borrosa realidadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora