Cameron Boyce/Mix

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—Entonces, ¿vendrás conmigo al cine? —Le miré de manera dudosa, como siempre mordisqueando el interior de mi mejilla y arrugando la nariz, acto que siempre provocaba la caída de mis lentes por el puente de esta.

—No lo sé Cam, tengo un proyecto pendiente y en verdad me gustaría terminarlo a tiempo —Mi mejor amigo de mala manera asintió justo en el momento que el timbre anunció que nuestro breve descanso había concluido.

—Está bien, enana pero prometo ir a molestarte en la noche a tu casa —Volqué los ojos con cierta diversión mientras cerraba mi taquilla y le colocaba el candado.

—Bien, ahi estaré esperando al odioso de mi mejor amigo.

Nadie dijo nada, solamente me tomó unos breves instantes de la cintura y sus labios se estamparon contra mi regordeta mejilla. De no ser porque llevaba el tiempo medido y tenía la cabeza metida en los finales diría que sentí un cosquilleo en el estómago, pero seguramente era a mi falta de alimento por la temporada.

[...]

En el momento que mi cara se zafó del soporte que mi mano izquierda le brindaba, simulando ser la almohada menos cómoda que alguien pudiera ocupar pero que servía de consuelo en mi eterna tortura, mi clase de estadística que con fortuna terminó cuando un poco de lo que es mi nariz se estampó en la mesa a causa de mi pequeña siesta en la parte trasera del aula. No solía salir con prisa pero por alguna razón hoy lo hice, siendo aplastada entre toda la multitud de mis compañeros.

Al llegar a mi casillero, arroje todos mis libros para solamente tomar mi pesado libro de biología e irme a mi casa. Pero supongo que los planes no resultan como uno siempre los tiene planeados aunque en este caso ni siquiera fue algo que yo tenía anticipado que sucedería; me refiero en el instante en que Jensen, aquel chico que ha coqueteado conmigo desde que tengo memoria me besó, arrinconándome contra las taquillas y haciendo que me quedase perpleja hasta que escuché la voz de Cameron.

—Ahora entiendo porque no querías ir al cine pero supongo que a ti te cuesta ser sincera.

Por alguna razón sentí como si estuviese parada en una reacción en cadena, de mi boca querían salir tantas palabras que resultaba imposible ponerles un principio y el hecho de que mi estómago se estuviera destrozando, mis entrañas revueltas al ver la cara de Cameron, tan descuadrada y tragándose aquel dolor.

—Cam, yo... —Negó poniendo su mano en señal de alto, así que me quedé en mi lugar; empujando a Jensen lejos de mi aunque era muy tarde, el castaño se había marchado.

[...]

Llegué a casa y como si mi día no pudiera empeorar, mi ropa estaba completamente empapada por dos razones: la primera, mi sombrilla se había estropeado y había ido a dar a mitad de la carretera donde miles de carros la arrollaron y segunda, la lluvia fue digna de las que se avecinaban en temporada otoñal.

—Cariño, ¿qué ocurre? —Mi madre apareció, por lo que negué ya sorbiendo la nariz como acto involuntario.

Me estrechó sin importarle mi desalineado aspecto mientras yo le relataba lo sucedido con Cameron y para cuando terminé ella estalló en una sonora carcajada.

—Sara, hija ambas sabemos que siempre has sido distraída —Le miré mal mientras sorbía mi nariz, un gesto desagradable pero que apaciguaba mi llanto —Y es que todo está en los ojos, en la forma en la que uno se ve. Te lo digo porque ustedes se miran de una forma indescriptible, tanto que sus ojos hablan aún cuando sus labios no se atreven a decir lo que el corazón siente.

En ese momento aquel revoloteo en mi estómago tomó sentido, el hecho de que me hubiese dolido tanto su reacción lo indicaba todo, yo estaba enamorada de él. Y ahora solamente quedaba descubrir si era recíproco aquel sentimiento.

[...]

Decidí esperar, despejar mi mente y comprobar que realmente eso era lo que sentía antes de hacer lo que hoy, después de dos largos días me disponía hacer. Subir por aquel tronco de la muerte hasta su ventana mientras pensaba que si los nervios me ganaban probablemente podría recitarle alguna obra melodramática para disminuir la tensión.

Al llegar a su habitación o al menos a la ventana, di unos cuantos golpeteos con mi puño cerrado hasta que finalmente la abrió y me miró de mala gana.

—Antes de que planees cerrarme la ventana y yo me caiga para quedar más plana de lo que ya estoy déjame hablar —Él negó y trató de cerrar la ventana, supongo que fui más rápida que Cameron (aunque también más estúpida) ya que interpuse mi mano contra la ventana y esta la aplastó haciéndome soltar un aullido de dolor.

—Maldita sea, Sara solamente a ti se te ocurre eso —Le mire con lagrimas acumuladas en mis ojos mientras trataba de no caerme de aquella rama, sin embargo él me atrajo, con pesadez hasta que finalmente estuve sentada en el piso de su habitación.

Antes de decir cualquier cosa, le miré, miré sus ojos de manera atenta y no supe si fue mi imaginación, pero sentí aquella mirada de la que mi madre me había hablado. Asi que no pude hacer más que, con mi mano que aún sentía entera tomarle de la camisa, atrayéndolo a mi y estampando nuestros labios en bueno, he de admitir que en un torpe beso.

—Nunca quise besar a Jensen, nunca como mis ojos lo han expresado y como mis labios quieren besar los tuyos —Una carcajada salió de sus labios aún contra los míos, le miré sin entender que sucedía aunque después habló.

—Entonces a la próxima le romperé la cara.

No sabía a dónde iba esto pero era momento de que nuestros ojos dejasen de hacer todo el trabajo y nuestras bocas empezaran a desenvolverse; de preferencia con la del otro.

»🍌«
Dedicated to:
chicaaxx19
En verdad espero sea de tu agrado, creo que quedó bastante largo(?
JAJAJAJA, pero en verdad espero lo disfruten y espero que nos leamos en un rato.

One shoots [2]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora