Él cometió un error inesperado, digno de arrepentimiento, sin pensarlo y sin importarle los sentimientos de ella y lo mucho que podía herirla, se enredo en aquel látigo que tarde o temprano le causaría heridas.
Ella jamás imaginó una traición de par...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
La tinta de aquella pluma hacia muy bien su trabajo, pues la mano que la impulsa se movía con buen ritmo dejando unas letras bonitas y legibles, en ocasiones se detenía para tomar otra vez ritmo.
Y cuando menos se lo espero había terminado por fin, baya que escribir una carta era algo divertido y le recordaban a las veces que escribió cartas para santa claus cuando era una pequeña sin saber nada de la vida. Además en estos tiempos ya nadie escribe cartas, pues ya hacen propuestas de matrimonio hasta con un simple mensaje de texto.
—Firma milk ox satan— Doblo la hoja y la guardo en un sobre, camino hasta su habitación y lo guardo en su buró, salió de la habitación y se dirigió hacia afuera para tender la ropa.
Estaba por terminar de tenderla cuando algo le dejo preocupada de tanto pensar en aquella carta.
—¿Y donde voy a dejarla? ¿Cómo haré para que llegue a su destino?— Se pregunto así misma y se adentro algo preocupada.
A lo lejos alguien la estaba observando, nada más y nada menos que black quien al ver lo preocupada que la mujer se puso solo sonrió pues el sabía cómo entrar a su habitación. Inmemorables veces había estado velando sus sueños y ella nunca se dio cuenta, la carta sería pan comido.
—Hablando de pan, ya me dio hambre— Se alejo del lugar y fue a buscar algo para comer.
Mientras tanto, en c.c Bulma se preparaba para darle una visita a su amiga la azabache, pues había quedado de acuerdo para ir con 18, ya que desde que se enteraron del problema que surgió con Goku ya no la volvió a ver por allí.
Cuando llegaron a casa de su amiga está se encontraba preparando el almuerzo, pues sus hijos vendrían pronto y regresarían con hambre. El timbre sonó y ella fue a abrir la puerta inmediatamente, eran nada más y nada menos que las antes mencionadas.
—chicas pasen— sonrió mientras les cedía el paso. —¡Que gusto verlas! ¿Que las trae por aquí?—
—a nosotras también nos da gusto verte milk— 18 la saludo en la mejilla seguida de Bulma.
—Desde el problema con goku ya no volvimos a verte—
—Bulma, te suplico que no vuelvas a mencionarlo en mi presencia— menciono con una mirada sería.
—perdón—
—¿Quieren algo de comer? Prepare empanadas de camarón y queso— ofreció con un plato repleto de estás.
—gracias milk, por cierto ¿donde están tus hijos?— preguntó 18
—Fueron a dar una vuelta— sirvió un plato de ellas y las tres se sentaron a comer mientras platicaban. —regresaran en un rato más y éstoy segura que con mucha hambre—
—no entiendo cómo puedes ser tan paciente y preparar demasiada comida para un saiyajin, ellos comen en un día lo que yo me como en dos o tres semanas—