Años después..
Se tuviese que enumerar los días, las horas y cada uno de los meses del calendario. Agendaría cada uno como perfectos. Porque simplemente todos estos años juntos lo han sido. Nuestra vida y nuestra familia han estado alejadas de lo que alguna vez fuimos. Salvatore ha demostrado ser un hombre y esposo completamente diferente al chico de hace algún tiempo.
Y no digo que el matrimonio lo cambie todo, bueno puede que si lo haga... Pero creo que sus razones para cambiar fueron otras. O fuimos otras.
La casa que escogimos como nuestro hogar está ubicada en Sicilia, era una propiedad que tenía el abuelo de Salvatore y en la cual vivió sus últimos años junto a Elissabetta su esposa. Reformamos algunas cosas y ahora se convirtió en nuestro hogar definitivo. Estar en Sicilia me llena de paz, me llena de muchas cosas familiares y recuerdos.
- Mami.. – escucho la voz de Lucca mientras sostiene su juguete favorito. Hace un tiempo que Salvatore prometió llevarnos a dar un paseo pero al parecer se ha perdido de nuestro radar. Al poco tiempo de casados exactamente cuatro meses descubrí que estaba esperando a Lucca, no sabía por dónde empezar a decirle a Salva, él nunca había tocado el tema de los bebés desde que fui a estudiar al extranjero, así que solo quedó estático sin decir nada hasta que asimilo lo que había dicho. Lo tomo con calma y después vino el enfrenarnos a ser padres.
Nuestros hijos han sido el reflejo de muchas cosas. Hemos madurado y atrás hemos dejado a los adolescentes de diecisiete.
- Vamos a buscar juntos a papá – lo subo a mis espaldas aunque para ser un niño de seis es bastante grande-. Avión – doy vueltas y el suelta una risita.
Paso cerca de la habitación de nuestros hijos y descubro a Stefano y a Taddeo jugar con las pelotas en suelo. Son más calmados que su hermano mayor porque él salió idéntico a Salvatore. Continuo buscándolo por toda la casa hasta que escucho su voz salir de la habitación rosada.
- Esta somos mamá y yo de niños. Tu madre no era muy buena amiga de papá para ese tiempo, papá le hacía muchas bromas pesadas porque la quería. Oh pequeña Roma, ¿quién diría que Dani y yo te tendríamos ahora con nosotros? De seguro me diría a mí mismo que me falta un tornillo.
- De nuevo mostrándole el álbum .. – le digo mientras sobresalta en la mecedora.
- ¡Joder no hagas eso!
Ruedo los ojos.
- Vaya llorón, pareces un peluche a su lado – dejo en el suelo a Lucca mientras me acerco a él quien sostiene a la bebé.
- Mamá no creía que tendríamos una niña eh.. – me golpea en el hombro y ruedo los ojos. Su sueño de tener una niña se hizo realidad-. Prometiste que nos llevarías a dar un paseo.
- Lo sé – se coloca de pie mientras acomoda el listón de Roma-. Pero alguien me llamo esta madrugada – se rasca la nuca.
- ¿Quien? – comienzo a mecer a Roma en mis brazos.
- Valentiniani – susurra.
- ¿Qué quiere él?
- Lo que le prometimos hace mucho tiempo. Protección.
Me quedo en silencio hace mucho tiempo no había escuchado de ese apellido.
- ¿Has llamado a los demás?
- Julieta vendrá con Raffaelle y el resto dijo que lo pensaría.
- ¿Qué hay de Lucian?
- Ya sabes que ahora no está dedicado a esto. Se retiró desde que..
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Inevitable Atracción
Teen FictionSalvatore Lombardi, el niño con el que jugaba a las escondidas, el mismo idiota que me pego un chicle en el cabello en mi cumpleaños número seis, la persona más fastidiosa, odiosa y orgullosa del mundo. Un narcisista de primera. Y para colmo el mejo...