Capítulo 9: "Sensible"

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CRÉDITOS A LA EDITORA: Natalia_,Ballesteros

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CRÉDITOS A LA EDITORA: Natalia_,Ballesteros

Pov's Lía

 
Seguía sentada en el café con la mirada perdida en el gran ventanal a mi lado. Mi mente parecía que haberse puesto en mi contra, haciéndome recordar cosas que solo lograban que más lágrimas se acumularan en mis ojos.  
 
El ruido de mi teléfono aleja todo tipo de pensamiento, comienzo a buscarlo en mi bolso, pero me detengo antes de tomarlo.  
 
¿Y si es Matt?  
 
No estoy lista para hablar con él.  
 
Encuentro mi teléfono y estoy dispuesta cortar la llamada, pero me detengo al ver que es Alena, mi mejor amiga, la cual tenía abandonada hace unos meses.  
 
Ella vivía en el mismo complejo privado que yo cuando éramos niñas, era un lugar alejado de todo, por lo tanto cuando yo me mudé con Matt a la ciudad para seguir mis estudios, Alena también lo hizo, solo que ella se instaló más cerca de su universidad; luego de graduarse ella se quedó ahí por comodidad, no era muy lejos de aquí pero ambas andábamos muy apretadas con los horarios de nuestros estudios, habíamos perdido un poco de contacto.  
 
Llamada:  
 
—Hola, cariño —Su voz alegre del otro lado me saca una sonrisita que necesitaba.  
 
—Hola, Al —Trato de sonar lo más tranquila posible mientras mis dedos no dejan de golpear la mesa frente a mi.
 
—¿Todo en orden, honey? —Suena muy preocupada.  
 
Ya veo qué sucede aquí.  
 
—¿Matt pidió que hablaras conmigo? —La acuso pero lo disfrazo de pregunta. El silencio ocupa la línea.  
 
—¿Insinúas que no me preocupo por mi amiga como para llamarte porque la quiero oír? —Su voz totalmente "ofendida" confirma mis sospechas.  Aquí vamos, un drama más de mi amiga.  
 
—Ah, sí claro, justo me llamas cuando mi corazoncito está triste. —Sueno como niña pequeña, pero al segundo hago una mueca ¿Desde cuándo hablaba tan sentimental?
 
—¿No podrías pensar que es telepatía de amigas? —Sonrío al escucharla.  
 
—No podemos hacer eso, Al —Me quedo en silencio por un momento — .Podría quedarme con ustedes solo por esta noche —Susurró y mi voz suena más vulnerable de lo que planeba.  
 
—Claro que sí,¿En donde dónde estás? Le le diré a Kyle que vaya por ti. —Asiento aunque  no me vea.  
 
—Estoy en un café, Harry's es el Nombre. — Digo mirando a mi alrededor.  
 
—Ah, okey, sé dónde es —Nos despedimos y cortó el teléfono.  
 
Suelto un suspiro y miro por la ventana, ya era tarde, está anocheciendo, veo la hora en mi teléfono, 7:50 .  
 
Mierda sí que pasó el tiempo.

 
. . .   

— Lía —Doy un salto cuando alguien toca mi hombro, estaba muy distraída.  
 
—Mierda, Kyle, casi me matas. —Él suelta una risa, me levanta y me atrae a su pecho.  
 
—Hola, enana —Deja un beso en mi cabeza, cierro mis brazos abrazándolo —¿Vamos? — Pregunta y asiento, tomo mi bolso y salimos del lugar, su auto estaba estacionado atrás del café. El camino está siendo silencioso, Kyle se dedica a conducir mientras yo miro por la ventana, ya es de noche.  
 
Kyle es mi mejor amigo junto con Alena, cuando éramos niñas ella y yo íbamos a una escuela pública, a pesar de tener una familia adinerada, nuestros padres nos querían dar una vida como cualquier otro niño, dándonos el mejor valor:
 
"No por tener dinero tienes que pisotear a los demás "  
 
Los padres de Kyle trabajaban para los de Alena, su madre limpiaba la casa; es una mujer muy amable y su padre se encargaba de el jardín, sin duda se notaba que se querían.  
 
Cuando ellos comenzaron a trabajar en la casa de Alena nosotros teníamos seis años, rápidamente nos hicimos amigas de Kyle, asistíamos a la escuela juntos, éramos inseparables. Desde entonces ellos se convirtieron en mis hermanos.  
 
Sorpresa fue la mía cuando mi mejor amiga me confesó que le gustaba Kyle, teníamos quince, fue raro para mí ser el mal tercio en su relación, siempre en el medio cuando salíamos, aunque ellos me decían que no les molestaba yo me sentía incómoda igual, todo cambió cuando me fijé en Matt, quien comenzó a pertenecer al grupo de amigos ya que teníamos una especie de relación.  
 
Ves, ya estoy recordando otra vez a Matt, maldita sea.  
 
Kyle y Alena se habían mudado juntos a un apartamento al mismo tiempo que lo hice yo, nos visitamos cada tanto y hacíamos citas doble, ellos eran los únicos amigos en los que confiaba para saber que yo estaba con Matt.  
 
Ellos llevaban mucho tiempo juntos y aunque al principio les costó pasar de ser amigos a novios, se notaba que se amaban y yo los amaba a ellos.  
 
—Llegamos —La voz de Kyle me trae a la realidad, bajo del auto en silencio, no tenía muchas ganas de hablar.  
 
Subimos en el ascensor los dos callados, miro de reojo a Kyle y lo puedo ver inquieto, como si quisiera decirme algo, las puertas se abren y  Kyle se adelanta para abrir el apartamento.  
 
—Adelante señorita —Dice y suelto una pequeña risita al oírlo.  
 
—Cariño —Grita Alena alargando la "o" mientras corre para tirarse encima mío, ambas caemos al suelo.  
 
—Mierda —Me quejo —.Casi me rompes el cuello —Le digo.  
 
—Amor —Regaña Kyle a Alena —¿Cómo vas a tirarte así? podrías hacerte daño. —La toma de la cintura levantándola, los miro desde el suelo, parece que se olvidaron de que yo también caí.  
 
Kyle deposita a Alena en el piso y la inspecciona con la mirada tocando su cuerpo, buscando ¿Heridas? Murmura algo que no alcanzo a escuchar.  
 
—Okey, lo siento, no te enfades —Alena deposita un beso en sus labios.  
 
—No me enfado solo te cuido.—Su vos es melosa.  
 
—Es como si quisieras meterme en una caja de cristal —Suelta una risa y yo aclaro mi garganta llamando su atención.  
 
Él era sobreprotector con ella pero hoy estaba sobrepasándose.  
 
—Yo también caí al suelo, chicos —Parezco una niña queriendo llamar la atención, ambos me ayudan a levantarme.  
 
—Por fin, te extrañaba, cariño —Alena me abraza y yo la aprieto contra mí, necesitaba a mi amiga.  
 
—Iré a ver cómo va la cena —Kyle deposita un beso en los labios de Alena y desaparece por la cocina. Nosotras nos sentamos en el sillón, un pequeño silencio nos invade.  
 
—¿Por qué Kyle se porta tan extraño? —Pregunto sin pasar por alto la extraña forma en la que se comportaba el hoy, como inquieto.
 
—Kyle siempre es extraño —Su risa invade la sala, tiene una risa muy peculiar parece que están ahogando a una foca.  
 
—No me evadas, ¿qué sucede? —Ella se pone seria y yo me preocupo.  
 
—Podríamos cenar, luego hablaremos ¿Sí? —Toma mis manos entre las suyas, suspiro y asiento. —¿Qué le tengo que decir a Matt entonces? —Suspiro otra vez —.Ya sabes, él quería estar seguro de que estés bien, está preocupado por ti —Sus ojos buscan los míos.  
 
—Dile...Dile que fui con mis padres —Alena me mira confundida — .Necesito pensar, conociendo a Matt, va a querer ir a verme a donde estoy, ahora..., ahora solo necesito pensar —Termino para convencerme a mí misma.  
 
—Okey, ve a la cocina y ayuda a Kyle, yo lo llamaré —Me da un último abrazo. Entro a la cocina y Kyle está sacando una pizza del horno.  
 
—Qué delicia —Digo sintiendo mi boca hacerse agua, como siempre tan débil ante una pizza. 
 
—Lo sé, soy delicioso pero tengo novia — Kyle tenía un gran ego pero sé que lo decía en broma.  
 
Novia, novio, novio, Matt.  
 
Él fue lo más cercano a un novio y ahora ni ese algo tengo, siento una fuerte opresión en el pecho, siento los brazos de Kyle rodearme y escondo mi cara contra su pecho.  
 
—No llores, chiquita —Acaricia mi espalda, su abrazo es protector. Ni siquiera me había dado cuenta que tenía la cara llena de lágrimas.  
 
—Yo..., yo no soy así, no lloro por nada — .Me separo para mirarlo, frustrada conmigo misma, con mis sentimientos.
 
—Chiquitina —Su voz es dulce —Somos humanos, debemos llorar, es la mejor manera de curar los males —Limpia mis mejillas con sus dedos y besa mi frente, se que no preguntara nada y eso me deja más tranquila — .Te quiero —Puedo ver ternura y amor fraternal en su mirada. 
 
—Y yo a ti, Kyle —Lo abrazo por última vez para que siga cocinando.  
 
—Lía, cariño ¿Quieres que te lleve a tu habitación? —Alena entra a la cocina con su teléfono en la mano.  
 
—Claro, ¿Podría darme una ducha? —Me siento que estoy abusando de su bondad.  
 
—Claro, esta es tu casa —Caminamos por un pasillo que desemboca a dos habitaciones, una la que compartían Kyle y Alena, y la otra la que sería mía esta noche — .Bueno, acomódate. En un rato te llamaré para cenar, tenemos que hablar, ni pienses que te salvaste de la charla —Imita la voz de una madre, ruedo los ojos y me rio.  
 
En cuanto me quedo sola en la habitación, me quito toda la ropa y camino al baño, abro el agua, me gusta tibia, lleno la bañera, necesitaba relajarme.  
 
Me estremecí al sentir el primer contacto del agua con mi piel, la tenía muy caliente, recuesto mi cabeza cerrando los ojos, amaba una buena ducha; esa que te sacaba tenciones, que te relajaba, en donde tu cabeza se despejaba de todo tipo de problema, eso quería, no pensar, pero uno no manda en su cerebro; él hace lo que se le va en gana, este se empeñó en traer recuerdos a mi mente, recuerdos hermosos pero que ahora dolían.  
 
Flashback  
 
Son las 11:50 de la noche, estoy en living de la casa llena de trabajos para la universidad, este año me recibía y no podía bajar los brazos.  
 
Paso mis manos por mi cabello y me dejo caer dramáticamente en el sillón quedándome quieta, casi dormía diría. Giro mi cabeza para la puerta principal cuando se abre y aparece Matt llegando del trabajo.  
 
—Hola, cielo —Dice de lejos colgando el saco de su traje en el perchero, dejando en el piso su maletín, junto a sus zapatos.  
 
—Hola —Digo desanimada, lo veo avanzar hasta donde estoy para subirse arriba mío sin hacerme daño.  
 
— ¿Estresada? — Pregunta burlándose de mi para luego besarme lento, permitiéndome probar sus carnosos labios, de los que tanto necesitaba, los que me daban paz —.Ven — Susurra levantándose, tendiéndome la mano. Me levanta y nos conduce por el pasillo que va a nuestra habitación, entramos en ella, lo sigo en silencio hasta el baño.  
 
Lo veo poner el tapón en la bañera y abrir el agua, se vuelve a mí y sin perder el contacto visual empieza a desabotonar su camisa dejándome ver su trabajado cuerpo, muerdo mi labio controlando el instinto de tirármele encima. Saca su camisa y avanza hacia mí solo con su pantalón.  
 
Sus manos van a mi remera y me la quita dejando mis senos libres, no llevaba sostén, estoy en la comodidad de mi casa, ¿Para qué lo quiero?, su mirada está en mis ojos mientras acaricia mi espalda, mis brazos, no es un contacto sexual, es uno dulce y relajante.  
 
Nos terminamos de desnudar para adentrarnos en la bañera con agua tibia, él lo hace primero ocupando casi toda la bañera, era muy grande.  
 
Me da la mano para poder entrar sentándome contra su pecho, suspiro ante el contacto con el agua calentita contra mi piel helada, siento como mis músculos se relajan al sentir su pecho caliente detrás mío.  
 
Alcanza una esponja y le pone jabón, agarra mi brazo y comienza a pasarlo por mis brazos, por todo mi torso, cierro mis ojos para disfrutar su atención.  
 
—Levántate un poco, así puedo tallar tu espalda.—Me susurra al oído mandando un escalofrío por mi columna, me separa y siento la esponja en mi espalda, para luego ser remplazada por sus manos que comienza a hacerme masajes deliciosos, seguimos así un rato hasta que decido también lavarlo a él, seguro está agotado del trabajo.
 
Me siento en su regazo ahora mirándolo a la cara y comienzo a pasar la esponja por su pecho, sus fuertes brazos de los que tantas veces me agarré mientras me llevaba al orgasmo.  
 
¿Lía, puedes dejar de pensar en sexo?  
 
Con Matt a mi alrededor me era imposible, había algo en él que me atraía como imán, la atracción sexual que teníamos no se podía negar, nunca me sentí así de atraída hacia nadie más.  
 
—No te estreses —Susurra Matt con los ojos cerrados — .Tu puedes con esto y más —Los abre y me estremezco al verlos llenos de cariño.  
 
—¿Cómobestás tan seguro? —Susurro en su mismo tono mirando mis manos sobre su pecho.  
 
—Porque eres una mujer muy inteligente y fuerte. —Levanta mi cabeza para que lo mire —No necesitas de nadie para alcanzar tus sueños, pero igual siempre estaré aquí. — Unimos nuestros labios en un beso lento, romántico, abrazados, recorriendo nuestros cuerpos, sintiendo su aroma masculino que me es tan familiar, tan de él.  
 
Fin del flashback  
 
Mi mente me pega una patada devolviéndome a la realidad, en donde me encontraba sola en una bañera, con un dolor en el pecho que no me dejaba respirar, sintiendo mi cuerpo pesado.  
 
¿Era así como se sentía una decepción amorosa?  
 
¿Contaba en este caso como una?  
 
No lo sé, yo lo sentía como una, mi cuerpo igual. Supongo que los corazones rotos se sentían así, no lo sabía, nunca había pasado por algo parecido.  
 
¿Pero por qué estaba mi corazón roto?  ¿Por la pérdida de Matt? Claro  que era eso. Pero ¿Por qué? Si yo sabía que esto era solo un juego.  
 
La costumbre, Lía.  
 
Me recuerdo.  
 
Si, debería de ser eso, la costumbre de tenerlo conmigo; de saber que iba a estar siempre a mi lado.  
 
No estoy enamorada de él, no claro que no, solo somos amigos, ¿No?  
 
—¿Querida, estás bien? —Doy un salto todavía dentro de la bañera,  cuando la vos de Alena me llama del otro lado de la puerta.  
 
—Em...Sí, ya salgo —Comienzo a secar mi cuerpo para ponerme un bata de baño y una toalla en el pelo. Al salir a la habitación encuentro a Alena sentada en la cama esperándome —¿Sucede algo? —Camino hasta sentarme a su lado.  
 
—Puedes contar conmigo, Lía, hablémoslo —Su voz sale sumamentee tranquila pero sus ojos me dan la seguridad que necesito para decirlo en voz alta. Toma mis manos, siento mis ojos picar.  
 
—No quiero que me veas llorar —Me tapo la cara con mis manos, tratando de tranquilizarme.

¿Qué me esta pasando?
 
—Debes llorar, y yo quiero estar aquí para abrazarte —Su vos es tan cariñosa, claro que podía hablarlo con ella, confiaba en Alena.
 
—Matt...Él —Tomo una gran bocanada de aire y separo mis manos de la cara para poder mirar a Alena — .Él se va a casar — Mi voz está temblorosa, siento que tengo el corazón en la mano, esperando a que mi amiga me lo saque y lo apapache para así dejar de sentir este dolor.  
 
—Oh, cosita —Ella me abraza cuando un par de lágrimas se me escurren —¿Cómo que se casará? ¿Con quién? —Niego con la cabeza cuando ella se separa y me mira.  
 
—Con una chica, se llama Melissa, creo —Suspiro para dejar de llorar —. Si se van a casar supongo que están desde hace mucho juntos —Mi corazón se pone chiquito al pensar en eso —¿A quién se supone que le puso el cuerno, a ella o a mí? —Caigo de espaldas a la cama con los ojos sumamente abiertos ante esa pregunta.
 
—Hay algo raro aquí, Lía —La vuelvo a mirar —Matt, no es así, él te ama y no haría nada para lastimarte.—Se acuesta a mi lado —Lo conozco como a ti, deberías hablar con él —Acaricia mi cabello.  
 
—Luego lo haré, ahora solo quiero estar aquí con mi amiga —Me levanto rápido tratando de cambiar mi humor para no amargarme la noche, aún que mi voz sale un poco nasal a causa de mis anteriores lagrimas — .Te extrañé —La abrazo cuando se levanta, sé que se dio cuenta ya que no quiero hablar del tema.  
 
—Yo igual, vamos a la cocina que en un rato estará la cena. —Nos soltamos y caminamos hasta allí.  
 
—Creí que estaban teniendo sexo, tardaron mucho —Kyle y sus bromas sobre el sexo.  
 
—Kyle —Alena le da un golpecito mientras se ríen. Yo solo los miro, son tan lindos juntos.  
 
—Vamos, ya están listas las pizzas, vamos hasta el comedor.

  
 . . .  

 
—Eso estuvo delicioso. —Los tres estamos tirados en el sillón de la sala después de comer. Sobo mi panza, estoy muy llena.  
 
Kyle y Alena están sentados en el mismo  sillón, ella arriba del acurrucados, y yo toda ya toda esparcida por el sillón.  
 
—Em...Oye, debemos decirte algo —Alena mira a Kyle buscando su apoyo, asiento para que siga hablando —Em, bueno... —Su cara se ilumina con una gran sonrisa —Quiero que te prepares para lo que vas a escuchar —Aclara tratando d mantenerse tranquila pero alterandome a mi, no me gusta el misterio. —¡Estamos embarazados! —Chilla Alena, mi boca se habré en una enorme "o".  
 
En cuanto logro encontrar mi voz un grito escapa de ella y de un segundo a otro me levanto para tirarme arriba de ambos con cuidado de no lastimar a Alena.

—Por dios, seré tía —Los abrazo fuertemente —¿Desde cuándo? —Les pregunto cuando me vuelvo a acomodar en el sillón, feliz.  
 
—Nos enteramos hace una semana.—Dice Kyle, para luego mirar a Alena con mucho amor.  
 
—Déjame ver tu pancita —Le pido a Alena ella, se para y levanta su remera.—Ow, es muy pequeña, ¿Pero de cuánto estás? — Toco su abdomen un poco abultado, sintiendo un ilusion hacia la personita que se está creando ahí dentro.
 
—Estoy de dos meses —Sus ojos se llenan de lágrimas también, igual que los míos.  
 
Por qué lloro tanto, siento mis emociones a flor de piel.  
 
—Felicidades, me emociona verlos tan bien —Saco sus lágrimas y después las mías, para luego abrazarla — .Bueno hay que ir a dormir, el bebé tiene que descansar, ya vivimos muchas emociones por hoy. — Soltamos una risa todos —Buenas noches —le doy un abrazo a cada uno.  
 
—Buenas noches —Dicen ambos cuando me dirijo hasta mi habitación. En cuanto llegó llego a la cama me dejo caer. Recojo mis piernas quedando en posición fetal, suspiro y cierro mis ojos dejando de reprimir las gotas que quieren caer de mis ojos.

 
________________  
 
¿Qué les parece la pareja de Alena y Kyle?  
 
En lo personal yo los amo.  
 
N/A: espero que les haya gustado el capítulo deja tu voto y seguirme .  
 
Alena y Kyle en miltimedia  
 
Los personajes me los imagino yo así ustedes pueden imaginarlos como quieran.  
 
-Aldi🥀 

CRÉDITOS A LA EDITORA: @Natalia_Ballesteros

CRÉDITOS A LA EDITORA: @Natalia_Ballesteros

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Cuando el corazón habla +18 (Aprender a Amar #1)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora