🍂 [04] 🍂

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—¿Crees que es lo correcto? — preguntó Mateo, entre los brazos de Valentín.

—¿El qué? — contestó el mayor, mientras dejaba de ver las estrellas para verlo directamente a los ojos.

Ambos se encontraban en la terraza observando el cielo nocturno: —S-sentir amor por otro homb-re. — habló con voz quebradiza.

El rubio afianzó su agarre sobre el morocho: —Escúchame bien. — dijo Valentín. —No importa si amas a una mujer o un hombre. Todos estamos hechos para amar, al igual que nacemos para ser amados. — aseguró, dándole un corto beso en los labios al morocho. —Y no dejes que nadie te diga lo contrario.

El menor no dijo nada más, así que volvió a acomodarse entre aquellos brazos, que le transmitían una seguridad inexplicable.

Valentín dirigió su mirada al cielo, viendo pasar una estrella fugaz por el horizonte, sintiéndose por primera vez en mucho tiempo completo y feliz.

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—¡Mateoooooo! — Oliva gritó con desesperación, despertando de golpe ante aquel sueño.

Pequeñas gotas de sudor caían por toda su cara, su corazón palpitaba de manera desenfrenada amenazando con salirse de su pecho. Volvió a acostarse tomando una almohada, poniéndosela en el rostro para tratar de retener un grito que tenía en su garganta.

Como odiaba que sus sentimientos cambiarán drásticamente, aunque pasar de la felicidad a la tristeza se estaba volviendo costumbre en Valentín.

Tratando de despejar su mente, se levantó y se dirigió a la cocina, no sabía qué hora era pero su estómago gruñía a causa del hambre que tenía.

No se tomó el tiempo de cambiarse, puesto que se encontraba solo y no esperaba a nadie, una vez en la cocina puso dos rebanadas de pan en la tostadora, mientras buscaba algo para acompañar en el refrigerador, encontrándose con nada.

Bufó molesto cerrando con violencia, puteándose a sí mismo por no haber hecho la despensa. Aunque el ruido del timbre interrumpió sus pensamientos, atrayendo su atención, ya que no esperaba la visita de nadie.

Así que, curioso por saber de quién se trataba, se dirigió a la puerta, encontrándose con una gran sorpresa.

—Manuel. — dijo el ojiazul.

—Valentín. — habló este, mientras pasaba.

—¿Qué se te ofrece? — pregunto un tanto incómodo, por la presencia del menor, cerrando la puerta y yendo tras él.

—Vos sabes a lo que vengo. — Manuel afirmó, cruzándose de brazos y frunciendo el ceño.

Oliva trató de hacerse el desentendido, enfureciendo a Vainstein, quien le arrojó un par de cojines: —¿Sos pelotudo o te haces? — comentó molesto —¿Cuando pensas ir a ver a Mateo? — soltó sin rodeos, viendo como la expresión del rubio cambiaba con rapidez.

—No lo sé. — susurró bajando la mirada, era más que obvio que quería verlo, pero no soportaba aún la idea de no ser reconocido por su novio. —¿Vos ya lo fuiste haber? — interrogó, obteniendo un asentimiento —¿Y cómo está?

—Confundido, triste, desanimado. — respondió el castaño, relajándose por primera vez desde que llegó. —Todo esto es un tanto extraño para él y no lo culpó. Despertar después de mucho tiempo, sin recordar absolutamente nada, tiene que ser difícil. — informó con pena. —¿Sabes que tiene que ir a terapia para recobrar la movilidad de sus piernas?

—Si. — Oliva habló seco —Pedro me lo dijo, días después que lo dieron de alta. — agregó. —Sé a dónde querés llegar, pero no me siento listo para ver lo.

—¿Entonces ya no lo amas? — soltó el menor.

—Claro que sí pero...

—Nada de peros. — acoto el otro. —Si lo amas vas a ir a verlo ahora, y no importa si no te recuerda, tenés que estar a su lado. — agregó, acercándose a Valentín, extendiendo sus manos hasta los hombros del contrario. —No puedo decirte que dejaras de sentirte incómodo al verlo, pero está en vos cambiar eso, para que podas ayudarlo, ¿así que, ¿qué decides? — Manuel espero con ansias, algún tipo de respuesta de parte de Valentín, poniéndose nervioso al no obtener nada.

—Está bien. — este habló después de un par de minutos.

—¿Posta? — dijo un tanto incrédulo, ya que había pensando que el mayor no aceptaría.

—Si, creo que ya es momento de afrontar la situación. — susurró, recibiendo un fuerte abrazo de parte del menor, sintiéndose un extraño.

Recordando los cálidos abrazos de parte de Mateo, no pudiendo evitar sentirse nostálgico ante aquellos recuerdos, los cuales pensaba recuperar sin importar nada.

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|| ¿Me Recuerdas? : Truewos : FINALIZADA  : ✅✅ ||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora