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A veces encuentras el amor en el más inesperado de los lugares...
Esta no es una de esas veces.
Todo el mundo espera que Millie Brown se case con uno de los hermanos Wolfhard, las dos familias han sido vecinas durante siglos, y desde niña la poco femenina Millie corrió salvajemente con Noah y Gaten, cualquiera de los dos sería un marido perfecto... algún día.
A veces te enamoras exactamente de la persona que crees que deberías...
O no.
Solo hay un Wolfhard al que Millie absolutamente no puede tolerar, y ese es Finn.
Puede que sea el mayor y heredero del condado, pero es arrogante, molesto, y ella está absolutamente segura de que la detesta, lo cual es perfectamente conveniente, ya que tampoco puede soportar verlo, pero a veces el destino tiene un gran sentido del humor, porque cuando Millie y Finn son literalmente lanzados juntos, toda una nueva clase de chispas comienzan a volar.
Y cuando esos adversarios de toda la vida, finalmente se besan, solo podrían descubrir que la única persona a la que no pueden soportar es la única persona sin la que no pueden vivir.
