Love and Other Misfortunes *Traduccion*

15.

Hermione estaba gritando.

Lo sabía pero no podía evitarlo, Draco cayó en sus brazos, su transformación se alejó cuando lo atrapó.

—¡No, no, no!— Lo sacudió. Empujó hacia él a través del vínculo. Ya se sentía frío, como tocar un cadáver.

Se estremeció pero siguió presionando.

No estaba cortado y aún no estaba muerto.

Aún había una oportunidad.

—Draco. Vuelve. Te necesito. Por favor, vuelve.

Lo decía en voz alta y a través del vínculo mientras seguía alcanzandolo. Más y más adentro, y todavía sentía nada más que la muerte.

Intentó, con manos temblorosas, realizar un hechizo de diagnóstico, pero su magia se negó a cooperar, como si se hubiera quedado sin ella. Sintió con sus dedos su pulso. Y se dio cuenta, ahora que había desaparecido repentinamente, de que había podido sentir los latidos de su corazón a través del vínculo.

Lo besó. Una y otra vez.

—Por favor, vuelve. No te he convencido de que te amo todavía. Necesito que lo sepas. No puedes ir a ningún lado hasta que lo sepas. Por favor, vuelve. Todavía tenemos que usar mal el chocolate. No he terminado de estar enojada contigo. Y necesito que sepas que te amo, vuelve.

Estaba sollozando mientras lo besaba. Sus lágrimas hacían que sus labios supieran amargos con sal.

Siguió alcanzandolo y no encontró nada.

Pensó que si podía llegar lo suficientemente lejos, encontraría alguna chispa de él que podría traer de vuelta.

Pero no había nada.

No importa cuán lejos llegara.

Era solo más y más muerte hasta que se sintió tragada. Como si se filtrara en ella.

Finalmente se detuvo.

Descansando su frente contra la suya, quería morir.

No podía soportar esto. No podría llevarlo con ella por el resto de su vida. La culpa. La pérdida.

Se sintió como un agujero tragándola.

Seguramente ella también moriría. No se quedaría con esta conexión infecciosa, como un cadáver, en su mente.

Sintió que sus amigos se acercaban y una mano descansaba sobre su hombro. Se estremeció. No quería ser consolada.

Necesitaba encontrar una manera de arreglar esto.

No podía estar muerto.

Estaban unidos y ella todavía estaba viva.

Entonces debía haber alguna forma de traerlo de regreso.

... a menos que fuera a morir de un corazón roto.

Siempre había pensado que la expresión era absurdamente exagerada. Pero tal vez no era una exageración en la vinculación.

El sentimiento de muerte dentro de ella, si eventualmente no se desvanecía, estaba segura de que la llevaría a seguirlo.

¿Y si, se estremeció, vivir significaba que experimentaría la descomposición del vínculo como lo hizo Draco?

Forzó la bilis que se le subió a la garganta.

No podía ...

No podía rendirse todavía.

Necesitaba pensar.

Podía haber una manera de traerlo de regreso. Su mente se aceleró.

El vínculo era más que solo una conexión consciente. Estaban atados al alma. Atados a la magia.