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Mágico.
El cuerpo de Mike estaba siendo observado para ver si de verdad había muerto ahogado en el río, fue trabajo más mío llevarlo al río y dejarlo ahí, me negué a que bella participara, nadie sospechaba nada, pues me había encargado de hipnotizar a los médicos forenses, el chiquillo se dio muerto por un intento de suicidio ahogándose en el río, una muerte absurda para un absurdo chico.
Ahora solo me enfocaba en ver lo hermosa que se veía Isabella a la luz del sol, ella mantenía sus ojos cerrados, en Forks hacia calor, el sol estaba quemando a todos los habitantes, y no era verano, podía ver como la nieve se derretía, estábamos sentadas en una roca grande que había en la cima del bosque, sonreí al ver a mi novia arrugar su nariz, luego de esto estornudo.
- Estaba pensando en ir a nadar, saltar de un acantilado, pero no el de acá, la push es reserva de lobos, hay una cerca que no pertenece a nadie, podrás verme como sirena, lo que tanto deseas.- Bella abrió sus ojos emocionada y me miró feliz.
- ¿Podemos ir ahora?.- Ella tomo mi mano y su cara estuvo muy cerca de mi, regalandome una sonrisa que tanto amaba.
- Sus deseos son órdenes mi señora.-
Me levanté de mi lugar y le tendí la mano a bella para que ella la tomara, cuando lo hizo y estuvo de de pie la tomé rápidamente como a una princesa y corrí a velocidad rápida al auto, al llegar, ella se inclinó para besarme, yo acerque más mi cara a la de ella y uní nuestros labios, los cálidos labios de ella eran como una droga para mi.
- Admito que vivo con miedo.- La dejé en el suelo y la mire con duda al oírla decir aquello.
- ¿Por qué dices eso cariño?- Ella me sonrió con pena y me abrazó, podía sentir como temblaba.
- A que me dejes, soy una simple mortal que un día te puede aburrir, encontrarás a otra, una mejor que yo.- Bella mordió su labio para mirarme a los ojos, estos estaban cristalinos.
- Jamás te abandonaría Bella, eres mi mundo, eres el ser más hermoso que he visto en mis mil años de vida, y no eres una simple mortal, eres mi mujer, mi futura esposa.-
Tome las caderas de Bella y la acerque a mi para besar su frente, ella ahora sonreía feliz, sus pensamientos eran positivos, ella se puso de puntitas y me abrazó por el cuello, se separó un poco y dejo un pequeño beso en mi cuello, yo la mire y alce varias veces las cejas mirándola, mi novia más roja que un tomate no podía estar.
Al llegar al acantilado que estaba a las afueras de forks, bajamos ambas del auto y bella suspiro de asombro, muy pocas personas sabían de este lugar, Alisson me habló de el cuando vino con Leah, para decirle la verdad sobre su naturaleza, la loba siendo masoquista decidió quedarse con ella sabiendo que su manada lo prohibía, ¿el motivo? era una híbrida chupa sangre y mujer.
Sabia que Alisson no queria para algo serio a Leah, mi hermana solía aburrirse de estar con la misma persona por mucho tiempo, estaba segura que pronto se encapricharia con alguien nuevo.
- Este acantilado está mejor que el de la push, es más alto.- Bella me hablo mientras ella se sacaba las zapatillas y la ropa, no había nadie, por lo que nadie la vería en ropa interior, por que si alguien la miraba era capaz de matarlo.
- Lo sé, pero deberías apagar ese teléfono, tu amigo no deja de molestar.- Jacob no dejaba de llamar a Bella y aquello me molestaba.
- Ya lo apagué, no te preocupes, celosa. - Bella río por lo último dicho y rode los ojos.
- Me gustaría ver como eres tu estando celosa.- Sería muy tierno tener el privilegio de ver a mi novia celosa.
- Yo creo que te arrancaría los ojos.-
Dicho esto bella corrió para lanzarse al mar y yo la mire sorprendida, esta mujer era adrenalina pura, como ya estaba sin ropa me tiré junto a ella; Bella llego primero hundiéndose en el mar y yo junto a ella, abrí mis ojos y la vi frente a mi bajo el agua, pensé en mi cola y esta poco a poco fue apareciendo, era color azul marino, podía cambiar el color dependiendo de el agua que estuviera para camuflarse, todas las sirenas que conocía podían hacerlo, alumbraba bajo el océano y podía ver con claridad el rostro de bella, ella miraba con admiración mi cola, la tomé de las caderas y salimos a la superficie, ella dio un gran respiro y luego abrió los ojos, estaba extasiada, lo sabía por que sus pensamientos eran acelerados, le parecía hermoso.
- Nunca pensé en ver a una sirena, y menos ser novia de una.- Ella miró mis ojos y nadó más cerca de mi, ambas nos moviamos por las olas.
- Bueno también es primera vez que vez mis pechos pervertida, tus pensamientos también hablan de ese detalle.- Bella se sonrojo nuevamente y yo solté una carcajada.
Mis pechos al igual que las demás sirenas estaban descubiertos, no éramos las sirenitas de disney que llevaban un brasier de conchas, no, éramos sádicas, las que solo eran sirenas cantaban para atraer a los pescadores con su belleza y magnífica voz hipnotizante, para luego de seducirlos alimentarse de su alma, aún lo hacen, pero cuando no hay pescadores cazan simples mortales que van a surfear o nadar, ellas si tienen piernas y viven una vida normal entre humanos, pero no pueden estar tan alejadas del mar, si no entran al mar, su hábitat natural mueren, yo al ser hibrida no me pasaba eso, podía entrar y salir del mar cuando quisiera.
- ¿Puedo verla nuevamente?.- Bella interrumpió mis pensamientos y yo le sonreí, se mostraba muy interesada en mi naturaleza, y lo preferia así, ya que mis planes eran que ella fuera como yo, una hibrida.
- En un año más tendrás tu propia cola para admirarla.- Le besé la nariz y ella estiró sus labios para que besara los suyos.
- Y aunque sea así seguiré fascinada con la tuya, bésame ahora.-
Como si de una orden se tratara tome a mi novia de su trasero y ella soltó un pequeño jadeo haciéndome sonreír, Bella enredo sus piernas en donde deberían estar mis caderas pero ahora estaba el inicio de mi cola, me acerqué a su rostro y ella me besó abriendo su boca, nuestras lenguas se tocaban y yo mordía su labio inferior, me introduje con ella debajo del agua nuevamente sin dejar de besarla y sonreí entre el beso cuando ella se removió haciendo contacto sus pechos con brasier con los míos completamente desnudos, sabía que Bella estaba como un tomate hasta por debajo del agua.
Prepárense que el próximo capítulo nos encontraremos con la familia Cullen...
Capitulo dedicado a una de mis primeras lectoras y mas fiel en comentar cada capitulo.
