Sueños (Camren)

16

Lauren POV.

Tomé un baño y me puse a ver con cuánto dinero contaba. Era más de lo que creía, pero no era tanto. En un par de meses iba a tener que tener un ingreso, sino no iba a poder hacer nada... 

También recibí una llamada de Sísi, que al igual que mi madre, se comunicaba conmigo una vez por semana. Ella siempre me decía que si alguna vez estaba cerca de donde vivía la fuera a visitar. Siempre que me llamaba tenía la esperanza que al preguntarle si sabía algo de Camila, me dijera que si y me contara, pero eso nunca pasó. Colgué la llamada y me quedé pensando en su reacción cuando le dije dónde estaba. Ella solo dijo un "oh..."

Unos golpecitos en la puerta que luego se transformaron en dos golpes como si fueran productos de unas patadas en la puerta, me hizo salir de mi trance. Al abrir la puerta me di cuenta que era la mujer que me había atendido al ingresar al hotel. Por lo que pude inferir ella estaba golpeando al comienzo la puerta con su cabeza, pero para asegurarse dio dos patadas a la misma, ya que sus manos estaban ocupadas sosteniendo una bandeja grande.

- Hola ángel, te traje la cena. Está recién salida de la cocina, porque sería muy raro que saliera del baño... - Se quedó dos segundos como pensando. - Bueno, si sale, pero en el... - Se rio antes de terminar su razonamiento.

Me tomo un par de segundos entender lo que dijo y asimilar la situación.

- ¿Cena? Yo no pedí cena... - Le dije algo desesperada, no creía que fuera algo excesivamente cara esa cena, pero no podía permitírmela.

- La cena está incluida con la habitación. Es una promoción para quién se queda por una noche, es una estrategia para que quieras quedarte más tiempo, pero no tiene nada que ver con la venta de órganos ilegal - Me dijo riendo. - El desayuno también está incluido si te despertas después de que yo lo haga o esperas a que me despierte... Eso sería a las 16hs.

Me quedé mirándola con una ceja levantada. Me parecía muy curiosa, pero también amistosa su actitud.

- ¡Era broma! No me levantó a las 16hs... Descubrí hace poco que tener el hotel abierto siempre da ganancias. - Me dijo y se volvió a reír. - A partir de las 6 am. está el desayuno y mi imperdible cara de dormida. -  Ella terminó de darme esa información y se quedó esperando mi respuesta. 

Cuando vio que no reaccionaba empezó a hacer un ruido con su boca, algo así como un "Plop", mientras me miraba.

- Me tomé el atrevimiento de traerte una cerveza para acompañar la cena caliente que estoy soportando con mis dos manos hace un siglo... Si te perdes en la bebida el bar del pueblo también sale ganando... Y si seguís sin reaccionar el psicólogo también. Serías una muy buena fuente de ingresos para este olvidado pueblo.

Sabía que tenía que reaccionar porque ella solo estaba siendo amable y graciosa, pero me resultaba tan extraño todo. De pronto me encontré tratando de ver algún detalle en ella que me diera algún indicio de todo lo que estaba pasando.

- Te dejo la bandeja en la mesa ¿Si? Disculpa que te haya abrumado, suelo hablar mucho cuando conozco a alguien que me cae bien.

- Gracias... ¿Cómo te llamas?

- Bueno, ya me voy, que duermas bien. - Me dijo como si no me hubiera escuchado que le pregunté por su nombre y se fue sin más.

Me senté para ver que había en la bandeja para comer. Había una pequeña picada de fiambres, aceitunas, y esas cosas, luego el plato principal que era una especie de guiso con carne, papas, arvejas y arroz. También había pan, y luego el postre, que era un pedazo de tarta de manzana. y para beber la botella de cerveza... Esta iba a ser la mejor comida en meses.