Caitulo 23 Extension

255 21 0
                                    

OTRA OPORTUNIDAD


Cuando Luci salió por la puerta, Harry supo que todo estaba echado a la suerte. Y en cuanto Dimitri volvió a atraparlo bajo su cuerpo, se sintió rendido y acabado. Se preguntó una y otra vez como sería el rostro de pequeña princesa o de su pequeño niño. Si sacaría sus ojos verdes o tal vez los hermosos ojos grises de Luci. Se preguntó si ella buscaría un padre para su hijo, e incluso si le hablaría de él. 

Lo que Harry no sabía en aquel momento era que Luci nunca encontraría a otra persona que para que pasase el resto de su vida junto a ella. Por que Harry era el amor de su vida, el padre de su hijo y no lo olvidaría fácilmente, nunca lo olvidaría. Pero Luci aún al salir de la fábrica abandonada, parada en la carretera, llorando desconsoladamente tenía un hilo de esperanza.

Dimitri ató a Harry con cadenas en una de las paredes. Y se acercó a él, metiendo su mano en el bolsillo a medida en que avanzaba. Sacó de allí una pluma negra, del tamaño de su pulgar. La pluma que Harry le había dado a Luci aquella vez, la pluma de sus antiguas alas. Harry sabía perfectamente lo que Dimitri haría con eso. Quemarla, incendiarla en el ardiente fuego, y condenarlo al infierno, tal y como Harry lo había hecho con él hacía años. Dimitri solo quería venganza. Si él quemaba esa pluma Harry se iría al infierno, y ahora sí no había vuelta atrás, pero Noa se iría con él, ya que también había poseído sus alas alguna vez. Sin embargo, estaba claro que a él no le importaba en lo más mínimo.

Luci comenzó a caminar a la deriva, esperando que algo suceda, y que cuando volteara a ver atrás sea Harry quien estuviera caminando tras ella. Pero a pesar de que miró miles de veces hacia atrás, se encontró completamente sola, con la única compañía de su hijo. Se preguntó si estaba haciendo lo correcto, si en verdad tenía que dejar que Harry arriesgase la vida por su hijo y por ella, pero se dijo que si era lo correcto. En cuanto sintió un enorme dolor provenir de su estómago calló de rodillas al suelo y pensó en él, una y otra vez... 

Lo que ninguno de los dos sabía en aquel momento, era que había una oportunidad final. Una oportunidad de que Harry se convirtiera en un simple humano.

En cuanto Luci levantó la vista, su hermana se encontraba viéndola fijamente, arrodillada frente a ella. Sus ojos azules penetraban los suyos cálidamente y entonces Luci esbozó una pequeña y débil sonrisa.

– Pide un deseo Luci, lo que sea – Lola le habló al oído, dulcemente. Ella estaba rodeada como siempre de una aureola de luz, lo que la hacía parecerse a un ángel, eso es lo que era.

– Lola... no entiendo... – Susurró Luci con voz quebrada y confundida.

– Llevas un Ángel puro dentro tuyo, el ángel que fue elegido para que le de paz a la tierra ¿Crees que no serás recompensada por eso? – Soltó Lola sonriendo divertidamente frente a ella. Luci apoyó su mano en el vientre y sus ojos irradiaron alegría sabiendo lo que tenía en mente.

Dimitri tiró la pluma negra de Harry directo hacia las brazas. Y esta poco a poco se iba quemando entre las cenizas. Sin embargo, Harry no sentía nada. Al pasar de los minutos, Dimitri supo que algo andaba mal. Lo que había sucedido es que Luci había pedido su deseo.

"Si un Ángel Caído se convierte en humano, las plumas ya no formaran parte de su ser y el efecto de estas no se llevará cabo"

El Ángel Caído: La Profecía del HumanoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora