ME PERTENECES II : MI OSCURIDAD

Un corto avance

♥¡Espero hayan tenido unas felices fiestas!♥ ... ¿Ensalada y tamales? Dos, por favor.

(No soy buena dando estos mensajes jeje)

Bueno. Por falta de tiempo no he podido actualizar, pero aquí les tengo un adelanto de lo que se viene en el próximo capítulo. Lo que quiero decir es que mientras ustedes vayan leyendo esto yo estoy terminando de escribir el resto de los capítulos que publicaré dentro de poco. 

Cierto, casi lo olvido. Por el momento no estoy aceptando ninguna solicitud del grupo que anteriormente (miles de años atrás, a.C) he creado. Como en este tiempo he tenido muchas ausencias (las razones ya la saben) dejé atrás el cuidado y permanencia del grupo, por lo que me estoy viendo obligada a realizar una purificación o eliminación de aquella página. Incluso el contenido está pasado, por ejemplo, las portadas. Si eso sucede les avisaré para, los que deseen :'c, accedan a ella y haya nuevo contenido del cual disfrutar y compartir.  

Listo, eso es todo.

♣♣♣

(Advertencia de hallar lenguaje malo :3)

×Lo que se viene...

NARRADOR OMNISCIENTE

Después de la primera bala atravesando el cristal brotaron muchas más.
El cuarto era un campo de batalla y defensa. Un grupo de hombres armados dispararon sin piedad y directamente hacia el cuarto de Adam.

Los chicos se alarmaron y buscaron un sitio donde cubrirse.

Patrick se ocultó al lado de la ventana y enseñó su cuerpo de vez en cuando para disparar hacia el blanco e inmediatamente hacerse a un lado con mucha destreza. Cody repitió lo que por instinto se debía hacer. Por su parte, Jonathan no tuvo otra opción que tocar la pistola que llevó oculta en su cinturón y la relució a los vientos disparando en dirección a los hombres que continúan su atraco desde las afueras del hotel.

Que cruel puede ser la vida en un momento de nerviosismo cuando no llegas a atinar a ninguno.

Carajo, exclamó Jonathan decepcionado de su enrevesada acción.

Entre esa vista rápida que se tomó observó al fondo a Mabel oculta dentro de un auto gris quien dirigía a tres hombres con señas, desconoció sus identidades, que ingresaran al hotel e hicieran de las suyas. Obedecieron con movimientos cortos de cabeza y fueron cruzando la pista a la vez cargando sus armas. Mas allá de la turbia escena los vecinos husmeaban asustados detrás de sus cortinas, pescó a uno hablando por teléfono con la intención de atraer a los policías, tal vez. Otros escondidos en las entradas de sus casas y cuatro madres tapando los oídos a sus hijos huyendo a cualquier refugio con tal de no toparse con una bala perdida y de no crear un impacto mental en sus pequeños.

—Son ellos Jou, son los cuatro —el moreno miraba de hito en hito el acto que se acontecía mientras susurraba a su compañero con la pistola apoyada a su pecho el cual su ritmo fue muy apresurado.

—No están completos, y eso es lo raro —entre la agitación logró decir—. Cody avísale a Any que me alcance las balas que están dentro de mi mochila.

Cody, con una expresión de alerta, se defendía de los continuos disparos. Seguidamente miró a su alrededor, pero no halló a Any.

—No está —dijo casi para sí mismo.

—¿Me estás jodiendo? En la vida estaría oculta en un momento así ¡La necesitamos! —vociferó el ojigris. Se fijó cuantas balas le quedaban y no serían suficientes si la persecución se aplazaba.