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NINE: Duerme, hermoso verano

Matt

A veces para nosotros los hombres los besos no significan nada, siempre los damos por compromiso en algún evento especial o porque queremos algo más, pero este beso con Summer para mi tiene mucha importancia, es ella la mujer de la que estuve, estoy y no sé si seguiré enamorado, pero es ella la que hace esto especial

Sus labios son suaves como el algodón de azúcar, el beso no es tan intenso solo es un beso lento al parecer ella también deseaba esto porque me permitió besarla. Ahorita siento que nada existe todo se me ha olvidado en este mundo solo existimos ella y yo.

Summer tomo sus manos y apretó mi rostro con ellas, no quiero nada mas solo quiero que ella continúe con este beso, ella es lo que quiero y juro que pensaba darme por vencido, pero desde la secundaria he intentado que ella me dé una oportunidad y nunca obtuve resultados. Jesús, sé que escuchas mi suplicas ya me diste la primera señal ahora te pido otra para saber si puedo continuar o simplemente tengo que retirarme.

Poco a poco ella fue bajando el ritmo y se apartó levemente -besas, muy bien -dijo con sus labios rosando los míos. Se alejó y me observo, yo no podía articular ni una sola palabra -Matt, perdón -ok, eso ya lo esperaba -perdón, por llenar tu rostro de sangre -¿Qué? Pensé que lo que seguía era la canción de que tiene novio y que no me quiere o cosas así.

-oh, olvidaba que estaba curando tu dedo -volví a tomar su mano y termine lo que estaba haciendo antes de besarla. Nada se sentía extraño o tal vez sí, pero para mí no -listo, ¿puedes ir a ver cómo está la comida?, yo limpiare mi rostro.

Ella estaba como hipnotizada porque tenía su vista hacia otro lado y después de unos largos segundos respondió -si -salió rápido del baño. Sonreí a tal acto e inicie a limpiar mi cara, de pronto note que aun tenia acelerada mi respiración y mis labios un poco hinchados.

Salí del baño y Summer estaba sentada en la isla de la cocina comiendo una manzana -tenemos que hablar -dijo sin voltear a verme.

-Sé por dónde viene tu "tenemos que hablar", ya sé que tienes novio, ya sé que no sientes nada por mí, ya sé que ese beso no significo nada. Ahorra todo eso Summer.

-Matt, me gusto que me besaras y soy de las que opinan que un beso no tiene nada de malo, además hoy tenemos una tregua, mañana si quieres puedes olvidarlo -esa chica cada día me sorprende más, ¿acaso le cambiaron el cerebro o yo tenía otro pensamiento sobre ella?

-está bien aceptare tu tregua, pero será a mi manera -por primera vez me observo expectante a lo que tenía que decir -todos los domingos podemos ser amigos y los demás días, puedes ignorarme, golpearme, gritarme o lo que tú quieras.

-acepto tu tregua, pero los besos no están incluidos -estiro su mano y yo la estreche -ahora sirve la comida que tengo mucha hambre.

-declaro los Domingos de tregua inaugurado -dije levantando mi cucharon.

No es lo que imaginaba, pero no soy digno de reprochar. Me gusta cocinar y el arroz con pollo es mi especialidad, serví un poco a Summer y a mi también, nos sentamos en el desayunador y no articulamos ni una sola palabra.

Fue algo raro estar callados durante la cena, aunque eso es algo normal, todos se mantienen en silencio cuando se trata de comida. De vez en cuando me gustaba ver los gestos que hacia Summer al comer es divertida. Ya había terminado de comer cuando mi celular vibro era una llamada de Yunis, mi cerebro debatía entre contestarle o simplemente ignorarla, termine apagando el celular porque no puedo desaprovechar este día de tregua.

Mientras lavaba los platos Summer se sentó en el sillón y encendió la tele, parece que esa serie de doctores es su favorita porque ya van dos veces que la veo disfrutándola, saque un poco de flan que me regalo Katherine hoy y serví para Summer y para mí, lleve a Summer y me senté al otro costado del sillón -ten, tu jefa lo preparo -dije extendiendo el plato con flan.