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TWENTY THREE: Ella es un sueño 1/3

Matt

Aunque la idea de estar abrazado a Summer toda la mañana sonaba muy buena debo admitir que no podía perpetuarse hoy, tengo que irme antes que ella se despierte para hacer dramático este asunto. Ya saben, eso que te venden las películas románticas, no pienso explicarlo.

Me levante lentamente de la cama y lo primero que hice fue dejar un pequeño beso en la frente de Summer, haciendo más dramática la situación la acurruque, aunque esto lo hice porque sus senos estaban expuestos y ya tenía demasiado con todo lo que soporte anoche y si seguía viéndola podría explotar.

puse mis pantalones y camiseta, tomé mis zapatos junto a mi chaqueta.

Cuando tome el pomo de la puerta note un peculiar estante donde se encontraban algunos cuadros con fotos, llamo mucho mi atención una de ellas la foto era tan hermosa que me hizo sonreír. la robe, quería duplicarla porque en mi memoria era incapaz de recortar tan eminente foto.

Salí del cuarto lo más silencioso que pude, pensé en salir por la puerta de atrás, pero eso solo lo hacen los cobardes, además no creo que a las seis de la mañana la señora Tulissa se encuentre despierta

Atravesé con existo todo el pasillo, pero al pasar por la cocina una voz extraña para mi me detuvo —no quiero nietos, muchacho. Soy muy joven aún. —se escuchó como daba un sorbo a lo que supongo que era café. —me caes bien, eres valiente, sales por la puerta del frente y no por la de atrás como los chicos de tu edad acostumbran hacer. —su voz era muy tranquila, de hecho no me sentí incomodo, la mujer me inspiro confianza. —siéntate, preparé galletas y café.

—señora Tulissa disculpe yo no quería que usted...

—calma, Matt no soy una madre lunática —por primera vez me relaje y le di la cara —Summer es libre de hacer lo que quiera, ella sabe hasta dónde quiere llegar. La libertad que le he dado ha sabido aprovechar de la mejor manera; Ahora siéntate y desayuna que no creo que ese cuerpo se mantenga si ni desayunas.

Sonreí a su cumplido y me senté en el comedor con ella de frente, sirvió una taza para mí y coloco un plato con galletas —gracias, señora.

—oye, si vuelves a llamarme señora te mataré —no entiendo como Summer no es su hija si ambas tienen el mismo temperamento —Matt, antes de que desayunes tengo que preguntarte algo —ella entre lazo sus dedos y apoyo sus codos en la meza mientras apoyaba la barbilla en sus dedos entrelazados —¿te molesta la relación entre tu padre y yo?

Sonreí triunfante e imité su acto con sus manos, hice una pausa para darle dramatismo al momento —su relación con mi padre, me tiene sin cuidado —frunció el ceño —señora...digo, Tulissa... Tú y Rodrigo son adultos, estoy seguro que mi opinión sale sobrando acá, no me molesta que este con el —ella se relajó un poco —de hecho, me siento feliz al saber que el encontró a alguien que tiene los pies sobre la tierra que no solo piensa en gastarse todo el patrimonio Benson y Por último, considero que usted es apta para darle felicidad a ese hombre, mi Pa...Rodrigo necesita una mujer que le apoye y usted tiene buen corazón. Disculpe si sueno muy zalamero, pero es la verdad.

Ella se quedó en silencio analizando cada una de mis palabras.

—Matt, tu padre te ama y tu opinión le importa —eso no lo sabia —esas palabras sonaron tan bien que estoy más que convencida que mi niña está en buenas manos.

—¿te parece que hagamos un juramento tu y yo?

Ella ladeo su cabeza, pero luego comprendió —perfecto, prosigue.

—si yo lastimo a Summer aunque sea una vez, tu no dejaras que yo me acerque a ella y si Rodrigo te lastima a ti, prometo no dejar que él se acerque a ti.