THIRTY ONE: In memoriam

457 46 17
                                    

antes que lean este capitulo quiero que le den una oportunidad a dos nuevos proyectos: WANDA Y Príncipe de tinta. Ambos ya están en mi perfil con sus respectivos prólogos y sinopsis.

no se arrepentirán de darle una oportunidad.

les ama bel. 

pd: preparen los clínex, porque yo llore horrible escribiendo este capitulo. 

Narrador 

El pequeño pastor alemán deambulaba aullando por las calles de una pequeña ciudad, ya transcurrían cinco horas desde que le habían abandonado en una caja de cartón con solo una pequeña bufanda de pelusa.

El animal chillaba con fuerza en busca de su amo, quien ya no podía conservarlo y dejo una nota en la caja que citaba de esta manera.

Maylo y yo no podemos estar juntos.

Yo lo quiero mucho, pero mi hermana es alérgica a él.

Solo tiene siete meses, es un pastor alemán obediente, juguetón y sobre todo un gran compañero. Desearía poder quedarme con él, pero tengo que proteger a mi hermana.

En la caja esta su bufanda favorita y veinte dólares con las que les podrán comprar sus croquetas favoritas: perro consentido, él no come otras croquetas solo esa.

Por favor, cuida muy bien de él y dile que Andy lo ama mucho.

El pastor alemán, se entristeció al no reconocer el lugar en el que se encontraba, se sentía asustado, entro nuevamente en la caja y con sus patas delanteras tapo sus ojos.

La calle en la que se encontraba el pequeño animal había una universidad en la que estudiaba Seth Benson. El chico caminaba rumbo a su casa luego de tener una fuerte discusión con el maestro de cálculo, estaba furioso y solo quería llegar a casa y dormir, ni siquiera dormiría en las residencias de la universidad. sabía que reprobaría esa clase.

Mientras Seth avanzaba el sonido de sus zapatos en el pavimento fue lo primero que escucho el perrito, salió rápido de su caja se acercó a Seth y ladro muchas veces para que el pudiese notarlo.

Seth presto atención a los ladridos del can y lo observo detenidamente —hola pequeño —giro hacia atrás para ver si se había escapado a su dueño. —parece que estas solo. ¿Quién tendría el corazón para abandonar a tal belleza? —lo tomo entre sus manos y busco el collar. No tenía, horas antes el pequeño Andy se lo había quitado para poder tener un recuerdo de su mascota. —no tienes identificación, ¿Qué are contigo? —se preguntó Seth.

Maylo era un perro muy inteligente y ladro en dirección a su caja, Seth capto el mensaje y corrió a tomarla. Se encontró con una bufanda de pelusa, los veinte dólares y la carta del pequeño Andy. La leyó y su corazón se estremeció, por un momento pensó en quedárselo, pero en los departamentos de la universidad no lo aceptarían, su novia Katherine no le gustan los animales y la única persona a la que podía interesarle seria su hermano Matt.

—tú te vienes conmigo, supongo que serás la mejor compañía para mi hermano.

Tanto Seth como Maylo estaban felices, por un lado, Seth sabía que Matt amaría al cachorro y a pesar de todo, su madre dejaría que se quedase en casa, y maylo sacudía su cola con entusiasmo porque su instinto animal le decía que volveria a ser amado.

******

Seth llegó a casa de su madre y bajo de la camioneta dejando al cachorro en esperando dentro y fue en busca de Matt.

Su hermanito de diez años estaba sentado en el césped, parecía distraído y algo triste, hace dos años su padre había perdido la custodia de Matt y tuvo que quedarse con su mamá. Seth pudo elegir entre su padre o su madre y el eligió lo mejor, pero no sabía que el sufrimiento iba a ser para su hermano.

Sunflower Apartment© ✔ Donde viven las historias. Descúbrelo ahora